¿Es el problema científico la puerta a la ciencia?

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Al momento de elegir el problema que se requiere abordar, es necesario saber que existen dos ejes, los cuales son: el primero es la viabilidad, es decir; si es fácil o difícil, en unidades del tiempo que se llevará para realizar dicha investigación, mismo que está sujeto a la tecnología, las habilidades y destrezas de los investigadores y las propias herramientas con las que cuente. A menudo los problemas que son fáciles plasmarlos en papel son difíciles de llevarlo a cabo, y los que son difíciles en papel son casi imposibles en la realidad, es por ello que se necesita analizar la viabilidad (Alon, 2009).

El segundo eje es el interés: en el sentido de qué tanta información se espera generar con el proyecto. La ciencia que se aventura en encontrar lo desconocido tiene mayor valor, por lo que los problemas pueden avanzar tanto como sea posible para aumentar el conocimiento comprobable.

En la actualidad existen muchos proyectos que son fáciles pero poco interesantes, conocidos como fruta madura. Otros por ejemplo son difíciles pero tienen poco interés, muchos otros son grandes desafíos: problemas difíciles pero con mucho potencial de avance en la comprensión. Los más deseables son los problemas factibles y con gran interés para ampliar nuestro conocimiento de manera significativa.

Según Hernández et al., (2008), afirma que un problema bien planteado tiene que tener las siguientes características:

- El problema debe expresar una relación entre dos o más variables.

- El problema debe estar formulado claramente y sin ambigüedad como pregunta (por ejemplo, ¿qué efecto?, ¿en qué condiciones?, ¿cuál es la probabilidad de?, ¿cómo se relaciona?... etc.

- El planteamiento debe implicar la posibilidad de observarse en la realidad.

A estas características se le pueden agregar las anteriormente escritas; ser interesante y viable, así como también debe ser adecuadamente delimitado, para no andar errando en la búsqueda de datos que al final de cuentas no ayudarán a resolver el problema en cuestión.

Es por ello que un planteamiento adecuado tendrá tres elementos importantes relacionados entre sí: los objetivos que persigue la investigación, las preguntas de investigación y la justificación del estudio.

- El origen de los Problemas Científicos

En muchas ocasiones el problema científico al igual que la teoría del Cha- Cha –Cha, puede surgir por resolver un enigma por encargo, por un reto o por serendipia (Koshland, 2007). En muchas ocasiones puede darse el caso que una investigación inicia por encargo, su importancia radica en la elaboración de una solución, mas no en la percepción del problema. Si es por Desafío o Reto, se basará en la percepción de las anomalías y su importancia para generar un nuevo concepto que lo explique. Pero si es por serendipia, la percepción de la importancia del accidente del fenómeno estudiado será la base de la solución.

Es por ello que la mente de un buen científico debe ser “mente preparada”, es decir; debe ser curioso y bien formado, es decir; que tenga la necesidad de obtener respuestas y explicaciones a los fenómenos que ocurren a su alrededor. Que tenga dentro de sus conocimientos hechos y teorías incubadas en el que los nuevos hechos que genere puedan tener cabida (Koshland, 2007).

Por lo que para poder realizar una mejor búsqueda de las posibles soluciones o experimentos que surgen en el mundo científico es necesario ver las áreas de interés como un paisaje debido a que representa un mejor espacio de búsqueda. En muchas ocasiones se puede plantear varios objetivos de estudios y de esta manera podría mejorarse el proceso de descubrimiento científico (Kell, 2012).

Así mismo, el conocer lo que hace un problema científico difícil hace posible seleccionar la mejor manera para resolverlo. La viabilidad y dificultad del problema a resolver constituyen los dos atributos principales que sustentan a un problema.

En pocas palabras; el origen de los problemas científicos radica en la observación de los acontecimientos de la vida cotidiana que no tienen explicación aparente. Los problemas científicos no se resuelven por arte de magia, se necesitan realizar muchas observaciones, experimentos, que nos permitan llegar a un descubrimiento.

- Formas de Solucionar un Problema Científico

La solución de problemas es un elemento necesario dentro de la definición de pensar, por lo que se considera que cualquier actividad que falle al encontrar una solución caerá fuera del campo del pensamiento. ¿Pero es suficiente la ausencia de una solución para calificar todo lo que se ha hecho como no pensamiento? (Pérez, 1988).

La solución de problemas se puede resumir como una situación inicial, una situación deseada o una serie de operaciones que permite el desarrollo hacia una solución. El proceso cíclico de la resolución de problemas por lo general se desarrolla en ocho operaciones principales: la búsqueda de un problema, que presentan un problema, la búsqueda de soluciones, que evalúan y la elección de las soluciones, la planificación de la acción, actuación, evaluación de la acción y el proceso experimentado (.

Una de las ventajas que tiene el adecuado planteamiento de problemas son: tener idea de lo que se está buscando y el reconocimiento de la información pertinente con mayor facilidad, lo que hará que no se tenga la sensación de desorientación en algún momento de la investigación.

Pero ¿qué hace que se catalice la solución de los problemas? Las propias solucionan catalizan la resolución de los problemas, mismas que proporcionan nuevas teorías y herramientas que permiten resolver los problemas planteados. En si las herramientas y teorías no realizan la función catalítica ya que éstas se adecuan de acuerdo a las necesidades. Sin embargo a corto plazo si desempeñan este papel, por lo que las soluciones son la clave para el progreso científico (Jablokow, 2005).

En la actualidad, los científicos tienen nuevas expectativas, quieren más soluciones a los problemas más complejos y difíciles en menor tiempo, teniendo el menor número de fracasos posibles. El éxito que se pueda tener en una investigación hará que se tenga mayor experiencia y con ello mayor capacidad para resolver problemas más complejos y difíciles con mayor eficiencia y eficacia.

Independientemente de las técnicas cuantitativas y cualitativas se han generado diferentes técnicas para la solución de los problemas