LA ILUSTRACIÓN DE EMMANUEL KANT

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Le llama razón pura ya que “un conocimiento es absolutamente puro cuando en él no se encuentra ninguna experiencia o sensación”, y la razón pura contiene los principios que sirven para tener conocimiento absolutamente a priori.

Urdanoz (1975: 31) explica que la crítica de Kant no proviene de los libros o sistemas, sino de la propia facultad de la razón general, y se concentra sólo en un principio de análisis de la facultad cognoscente, dando por respuesta la existencia de tales formas y principios aprióricos que determinan todo el conocimiento, cuya aplicación dará como resultado “un sistema de la razón pura” y que Ferrari (1981), señala como filosofía trascendental kantiana, cuyo objetivo es comprender la extensión de los conocimientos sintéticos.

Ernst Cassirer (1978:176) menciona que la Crítica de la razón pura no pretende someter a un nuevo tratamiento y a iluminar de un modo nuevo el objeto de la metafísica, pero nos ayuda a comprender con mayor profundidad que antes su problema y a descubrir las primeras raíces de aquella en nuestro “entendimiento”.

Diego Sánchez Meca (1996:41-42), hace una descripción Histórica de la razón pura, la cual muestra las tres oposiciones históricas que el sistema de filosofía crítica de Kant pretendía reconciliar. Estos tres aspectos son: “la oposición sensualismo/intelectualismo; la oposición empirismo/noologismo; y la oposición escepticismo/ dogmatismo.” En donde la primera se refiere al problema objeto del conocimiento racional. “para los sensualistas, sólo los objetos de los sentidos son reales” y para los intelectuales los sentidos proveen ilusión y el conocimiento es el dominio de lo cierto. La segunda trata del origen del conocimiento y sus mayores exponentes siendo estos Aristóteles y Platón. Para Aristóteles la experiencia es el origen, mientras que para Platón el conocimiento procede de la razón y es independiente a la experiencia. Y la tercera que se refiere a la cuestión del método científico cuyos representantes son Hume y Wolf respectivamente, y que Kant menciona que después de ellos sólo queda el camino crítico.

Ontología de Kant

En la ilustración también habla de ontología como lo señala Juan Carlos Mansur Garda (2010:17), pues para Kant la naturaleza humana es finita e incapaz de comprender el universo en su totalidad.

“Tal finitud se manifiesta desde nuestra forma de comprender el mundo sensible, pues así como otros filósofos, Kant acepta la intuición sensible y la experiencia como base del conocimiento y señala que no es ella la fuente de éste, debido a la parcialidad y limitación de todas las intuiciones sensibles.” Mansur (2010: 17)

Además, Dios es el único que tiene un conocimiento intuitivo e inmediato del mundo debido a que él es su creador. Y el hombre por ser finito y por poseer una “intuición sensible”, no intelectual, no conoce el mundo de forma inmediata, ni lo podrá conocer como es en sí. La fundamentación de la metafísica en total quiere decir: revelación de la posibilidad interna de la ontología.

Conclusión

La Ilustración de Kant ha sido aceptada y refutada, sin embargo, creo que puede estudiarse y analizarse de una forma hermenéutica muy bella. Cuando Kant habla sobre la liberación, nuestra propia liberación, deja verdaderamente pensar que es lo que hemos hecho durante tanto tiempo, ser manipulados, ser gobernados y dirigidos por mandatos y prejuicios, de los cuales desconocemos su origen.

Además cuando Kant hablaba sobre la liberación y su proximidad a ella, creo que ahí si se equivocaba, pues hoy en día se sigue viendo este fenómeno. Pero ahora se puede observar que nuestra zona de confort es la computadora, pero principalmente el internet, pues éste lo es “todo” actualmente y se observa en la actitud compulsiva de la gente cuando se ve sujeta a la necesidad de encontrar una red Wi-fi, si no hay internet es imposible hacer la tarea y erróneamente se cree que toda la información que nos muestra en una pantalla es cierta.

Lamentablemente seguimos en un mundo emancipado y falta mucho para acabar con esto. Seguimos actuando como niños, dejando que alguien más haga las cosas por nosotros, que alguien más piense por nosotros. Si todos leyéramos los principios que Kant dejó para esta sociedad de emancipados, de adultos con mentalidad prematura y dejáramos de lado la mediocridad lograríamos encontrar nuestro verdadero yo. Pero también creo que es casi imposible pues tenemos que servirnos de otras ideas para construir un conocimiento propio, o de todas aquellas ideas que otros mencionan poder crear las propias y dar una razón objetiva y sustentada del por qué.

Bibliografía

Cassirer, E. (1978). Kant, Vida y Doctrina. México, D.F.: Fondo de cultura Económica.

Ferrari. J. (1981). Kant o la invención del hombre. Madrid: Edaf.

Kant, E. (1979). Filosofía de la historia: Emmanuel Kant. México: Fondo de Cultura Económica.

Mansur, G. (2010). Kant: Ontología y belleza. México: Herder

Sánchez M. D. (1996). La historia de la filosofía como hermenéutica. Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia.

Urdanoz, T. (1975). Historia de la filosofía. Madrid: Católica.