Descubriendo el maravilloso mundo de aquello que llamamos “Autodidacta”

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Ahora, ¿Cómo estudiar? Aquí el consejo puede parecer poco relevante, pero es probablemente el mejor, leer, escuchar, observar, escribir y replicar, y todo esto ante el conocimiento se debe aprender a callar un segundo y sólo observar, poner las ideas asimismo, escribirlas es bueno ya que la memoria puede palidecer pero la tinta perdura, y luego exponer y demostrar el conocimiento, ya que sin resultados visibles en lo que se adquiere, la decepción y desmotivación frenarán, demostrar las ideas son los actos más importantes para el autodidacta, pues serán formas en las que se podrá charlar consigo mismo con más seriedad, requiere una conversación interior continua, y sería muy bueno no puede refutarse asimismo, ya que si se comienza con cuestionamientos, lo más probable es que aparezca la sensación del miedo e inseguridad. Es bueno señalar que solo el autodidacta comprende su medio cercano, esto no hará que necesariamente se sea ermitaño pero tampoco se debe esperar que quién se educa de una manera solitaria bajo lineamientos académicos comparta lo que conoce con otras personas. El autodidacta tiene que encontrar fuentes de información de donde surtirse, la más básica de las fuentes es la observación, es el punto de partida de todos. Pero entre más específico se vuelve un conocimiento más invisible se vuele. Se debe tener en máxima claridad que al igual que Asimov y Faraday, se va a fracasar una y otra vez, pues el aprendizaje es normalmente un proceso de probar, herrar, descartar, mejorar, entre otras cosas. Todo esto una y otra vez. Tal vez puede sonar como una especie de ”repelente” ya que es una era obsesionada con el éxito y sobre todo con la competitividad, Algo bastante importante es que el curso escolar de un autodidacta e incluso de cualquier persona que no emplee necesariamente este estilo de aprendizaje no acaba después de una calificación que sea reprobatoria o que sea medida de acuerdo a nuestro aprendizaje, el autodidacta tiene que acatar un error y aprender de el para no repetirlo, una vez que se empiece a dominar un conocimiento, la sensación de éxtasis del descubrimiento y el entendimiento debería llegar a perseguir conocimientos más profundos. Como se puede apreciar existen una gama de consejos, pero los más pertinentes según los autores son: tomarse en serio lo que se hace, lo más probable es que la gente no creerá hasta que se logren resultados visibles, hay que aprender de los errores, claramente no hay maestros que califiquen, plantearse objetivos tan pronto como se pueda, pues eso ayudara a enfocarse.

Sin embargo no necesariamente deben ser objetivos grandes o físicos, por ejemplo para aquel entusiasta de la matemática comprender la lógica detrás de la deducción de una ecuación es un buen punto de inicio, también tener claro que hay que registrar los conocimientos porque tan pronto se empiece a acelerar en el aprendizaje se empezará a encontrar todo tipo de datos y habilidades que rápidamente pueden dejar apabullado a cualquiera, inspirarse, mirar películas, series, comic y demás relacionado al tema en que se está educando. Cuando se observe el trabajo de alguien más experimentado definitivamente se debe apreciar como algo que un día se podrá lograr, pues la envidia puede envenenar y hacer menos racionales a las personas, sin embargo la admiración puede generar competitividad, no hay que temer experimentar y buscar posibilidades donde nadie más lo ha hecho, el no tener miedo de fracasar al intentar crear algo nuevo es muy bueno. Hay que ponerse retos, tantos como sea posible, pero sin olvidar refinar lo que ya tienes, lo cierto es que todos pueden ser autodidactas, pues sin cosas como video juegos, muchos sin darse cuenta aplican los consejos ya dados para ascender en habilidad, solo que no se dan cuenta de lo que hicieron por no haberlo hecho en un salón de clases y nadie se los ha señalado, normalmente con personas de interés comunes es de gran ayuda, sin embrago también hay que escuchar a aquellos individuos con los que no se está de acuerdo, el ejemplo más claro para aquello es que hay que ser como un cazador, cazar las ideas, ya sea en territorio propio o en otro ajeno. Pero el mayor de todos los consejos que se podría dar en este artículo, es que el autodidacta crea sus propios métodos de aprendizaje y sus métodos de gestión de conocimiento, el individuo autodidacta crea la forma en la que aprende, es por eso que no se puede dar una lista exacta de métodos a seguir para ser un autodidacta, personalmente las herramientas que en general se deberían llevar a todos lados para seguir el proceso de educación, son una libreta, plumas, y libros que se lean en el momento. Pero, dentro de todo lo visto anteriormente ¿es efectivo el autodidactismo como método de aprendizaje? El autodidactismo es un camino hacía la autonomía del aprendizaje y aporta muchas aptitudes a las personas que lo llevan a cabo, como la capacidad de esfuerzo y superación, pues nace de la iniciativa propia y libre de aprender por sí mismos. Esta reflexión nos lleva a otra: ¿Están todas las personas preparadas para ser autodidactas? No, ya que la autodisciplina necesaria, el exceso de información existente, no siempre será útil o veraz y la falta de tiempo para discernir qué es importante y que no lo es, hace que muy pocas personas estén preparadas para formarse de manera autodidacta. Pese a todas las cosas buenas que hemos visto, aprender de forma autodidacta no tiene por qué ser más fácil que hacerlo de la forma tradicional o reglada, y es que la ayuda de un profesor siempre es interesante. El hecho de aprender de forma flexible y con los recursos que se elijan conlleva la imposibilidad de poder reconocer lo aprendido por medio de títulos o certificados oficiales, los cuales sí emite cualquier entidad de enseñanza.

Conclusión

EL Maravilloso Autodidacta muestra como una persona que aprende por sí sola demuestra capacidad de esfuerzo, sacrificio y organización, dado que estudia algo por iniciativa propia, sin estar obligado, y con continuidad. Además no se pone límites y puede llegar a dominar uno o más temas a alto nivel si se lo propone, cosa que sería muy difícil estudiando por obligación y no por vocación. Algo que también se destaca de gran manera es la distribución flexible de horarios que permite esta modalidad de aprendizaje: Se estudia la cantidad, el momento y el lugar cuando se desee, sin una especie de trabas, sin exámenes, donde estos muchas veces son inútiles y obligan a memorizar conceptos que algunas veces son “sin sentido”.

El ser autodidacta, en definitiva, permite aprender mucho acerca de varios temas con flexibilidad y sin necesidad de pagar más que los recursos utilizados. Pero aun así no todo se puede aprender de forma autónoma: