Ejemplo de Ensayo El arte de la Guerra

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VIII. LAS NUEVE VARIABLES

Hay rutas que no se deben usar, ejércitos que no han de ser atacados, ciudades que no deben ser rodeadas, terrenos sobre los que no se debe combatir, y órdenes de gobernantes civiles que no deben ser obedecidas, son las variantes que el general inteligente debe poder reconocer, “los generales que conocen las variables posibles para aprovecharse del terreno sabe cómo manejar las fuerzas armadas”.

Las consideraciones del dirigente inteligente siempre incluyen el analizar objetivamente el beneficio y el daño, “cuando considera el beneficio, su acción se expande; cuando considera el daño, sus problemas pueden resolverse”.

IX. MARCHAS

Como se menciona en reiteradas ocasiones el engaño es fundamental al momento de ganar una guerra, sin embargo, el engaño puede ser usado por las tropas enemigas por eso es indispensable saber reconocerla, “si las tropas enemigas se enfrentan con ardor, pero demoran al momento de entrar en combate sin abandonar el terreno, están preparando un ataque por sorpresa”; en todos los casos el plan debe contener una estrategia de retirada o posterior al ataque, si se confía exclusivamente en la fuerza de los soldados, y se toma a la ligera a los adversarios sin valorar su condición, con toda seguridad los confiados caerán prisioneros. El enemigo que actúa aisladamente, que carece de estrategia y que toma a la ligera a sus adversarios, inevitablemente acabará siendo derrotado.

La influencia moral entre el general al mando y su ejército es fundamental e influye en todo caso a la manera en que el ejército toma las ordenes, cuando las órdenes se dan de manera clara, sencilla y consecuente a las tropas, éstas las aceptan, cuando las órdenes son confusas, contradictorias y cambiantes las tropas no las aceptan o no las entienden, cuando las órdenes son razonables, justas, sencillas, claras y consecuentes, existe una satisfacción recíproca entre el líder y el grupo.

X. EL TERRENO

Sun Tzu nos dice que los que pueden existir terrenos fáciles de atravesar por las dos partes, terrenos donde resulta fácil salir de ellos, terrenos en donde resulta difícil para ambas partes el penetrarlo, terrenos angostos, y los que tienen la obligación de conocer sobre ellos son los generales, los generales que conocen las artes marciales no pierden el tiempo cuando efectúan sus movimientos, ni se agotan cuando atacan, debido a esto se dice: “cuando te conoces a ti mismo y conoces a los demás, la victoria no es un peligro”, el hecho de conocerte a ti mismo tiene la misma importancia que conocer a tu enemigo, porque con esto es posible conocer anticipadamente el curso de la guerra y cuando este te favorecen y señalan una victoria segura es apropiado entablar batalla, incluso si el gobierno ha dado órdenes de no atacar; si las leyes de la guerra no indican una victoria segura, es adecuado no entrar en batalla, aunque el gobierno haya dada la orden de atacar. Para poder vencer al enemigo, todo el mando militar debe tener una sola intención y todas las fuerzas militares deben cooperar.

XI. LAS NUEVE CLASES DE TERRENO (1)

Este capítulo explica que cuando se encuentra en un territorio propio, se encuentra en un terreno de dispersión, cuando solo se adentra un poco en el territorio enemigo se le llama terreno fronterizo, un terreno ventajoso para ambos se le conoce como terreno clave, un terreno accesible para ambas partes se le llama terreno de comunicación, el terreno serio es cuando el ejército se adentra profundamente en territorio enemigo, cuando el ejército atraviesa montañas, bosques, pantanos, etc. se encuentran en un terreno difícil, el denominado mortal es aquel en el que las tropas solo pueden sobrevivir usando la energía de la desesperación; las tácticas apropiadas para las nueve clases de terreno son responsabilidad del general, la rapidez de acción es el factor esencial de la condición de la fuerza militar, aprovechándose de los errores de los adversarios, desplazándose por caminos que no esperan y atacando cuando no están en guardia.

En una invasión, por regla general, cuanto más se adentran los invasores en el territorio ajeno, más fuertes se hacen, hasta el punto de que el gobierno nativo no puede ya expulsarlos.

Una operación militar preparada con inteligencia debe ser como una serpiente veloz que contraataca con su cola cuando alguien le ataca por la cabeza, contraataca con la cabeza cuando alguien le ataca por la cola y contraataca con cabeza y cola, cuando alguien le ataca por el medio.

El principal engaño que se valora en las operaciones militares no se dirige sólo a los enemigos, sino que empieza por las propias tropas, para hacer que le sigan a uno sin saber adónde van.

Emplear a los soldados sólo en combatir, sin comunicarles la estrategia dejarles conocer los beneficios que les esperan, pero no les hablarles de los daños potenciales, si la verdad se filtra, la estrategia puede hundirse si los soldados empiezan a preocuparse, se volverán vacilantes y temerosos.

XII. EL ATAQUE POR MEDIO DEL FUEGO

Actuar cuando sea beneficioso; en caso contrario, desistir, la ira puede convertirse en alegría, y la cólera puede convertirse en placer, pero un pueblo destruido no puede hacérsele renacer, y la muerte no puede convertirse en vida, en consecuencia, un gobierno esclarecido presta atención a todo esto, y un buen mando militar lo tiene en cuenta, ésta es la manera de mantener a la nación a salvo y de conservar intacto a su ejército porque no basta saber cómo atacar a los demás con el fuego, es necesario saber cómo impedir que los demás ataquen.

XIII. LA UTILIZACIÓN DE LOS AGENTES SECRETOS

“Siempre que se vaya a atacar y a combatir, es necesario conocer primero los talentos de los servidores del enemigo, y así es posible enfrentarse a ellos según sus capacidades”.

Para mí uno de los capítulos más interesantes, y aunque en mi consideración Sun Tzu define al engaño como lo primordial durante una guerra yo veo a la información como lo fundamental, puesto que no será ventajoso para el ejército actuar sin conocer la situación del enemigo, y conocer la situación del enemigo no es posible sin el espionaje, la utilización de espías y espías dobles es la clave para conseguir la ventaja. Pero, si no se trata bien a los espías, pueden convertirse en renegados y trabajar para el enemigo, y los espías renegados que se identifiquen entre sus líneas deben ser usados como espías dobles.