HISTORIA DEL SISTEMA FINANCIERO EN COLOMBIA.

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En el 2011, el entorno económico internacional se vio afectado por los problemas de deuda pública o privada en un gran número de países industrializados, mientras que en Colombia en el segundo semestre del año los indicadores económicos mostraron un comportamiento favorable y por consiguiente las expectativas siguen siendo buenas para aumentar el crecimiento económico en el país.

Además, las carteras de consumo y de microcrédito fueron las que obtuvieron un mayor crecimiento en el año, mientras que la comercial presento una desaceleración notable, llevando consigo a que los créditos generaran un aumento en los ingresos por intereses que ayudó a aumentar la utilidad y la solvencia de las instituciones de crédito. “Las actividades de intermediarios presentaron un comportamiento dinámico, que se manifestó en un ritmo de crecimiento de la cartera bruta de los establecimientos de crédito cercano a 18% real anual a diciembre de 2011” (Escobar, 2012)

Por otro lado, las instituciones financieras no bancarias, no tuvieron el mismo avance que las bancarias, ya que tuvieron menores niveles de rentabilidad y además, la desvalorización de títulos de renta generó una recomposición, aumentando la participación a los títulos de deuda pública y a las inversiones en el sector financiero, incrementando así los pasivos, logrando un crecimiento en las deudas de estas instituciones.

Al evidenciar el endeudamiento de los principales deudores se observa que los créditos tuvieron mayor auge y esto se dio por los buenos momentos que algunas de esas organizaciones estaban pasando según el sector económico en el que se enfocaban, por lo tanto las organizaciones podían endeudarse o adquirir créditos financieros para aumentar sus procesos productivos y así obtener más utilidades, caso contrario con los créditos para el hogar, que mostraron un alza por la misma desaceleración que se mencionaba anteriormente de la cartera de consumo.

“Las inversiones del sistema financiero durante el 2011 mostraron también una tendencia creciente, alcanzando un monto de $ 347,4 billones, con una variación real anual de 4,2%.” (Correa, 2011). Se vio que en este año hubo una notable recuperación del portafolio del sistema, con el incremento de las inversiones a títulos, disminución de acciones y otros títulos de participación que son muy importantes, adicional a esto, por el excelente desempeño que se obtuvo, algunas instituciones financieras ingresaron al mercado extranjero, como lo fue “la compra del Banco de Bogotá de las operaciones en Centroamérica del BAC CREDOMATIC, La compra por parte de Suramericana de la operación de pensiones y seguros de ING en México, Colombia, Perú, Chile y Uruguay, La compra hecha por Davivienda de las operaciones del HSBC en Costa Rica, El Salvador y Honduras” (Correa, 2011), por esta razón aumento el mercado financiero en el país y así se diera a conocer internacionalmente. En el transcurso del año 2011, se realizaron balances donde se evidenciaban los activos y pasivos totales que el país poseía, y cuáles mejoras se proyectaban para el 2012, teniendo en cuenta el constante aumento de la cartera bruta y los niveles de rentabilidad de las instituciones de crédito.

Para el nuevo año, en el resto del mundo se vio reflejada una desaceleración en la actividad económica disminuyendo el Producto Interno Bruto en países como la Unión Europea, EEUU y China, esto como “resultado de la combinación de bajo apetito al riesgo, debilidad en las perspectivas de crecimiento y la persistente volatilidad y amplitud en los spreads de la periferia de Europa, que han liderado un incremento en los riesgos macroeconómicos globales” (Banco de la República, 2013).

Debido a estas actuaciones en el mundo, Colombia y en general los bancos de países subdesarrollados tuvieron que tomar medidas para no afectar la economía, manteniendo las tasas en niveles tan bajos que no habían sido implementados antes. Sin embargo, en Colombia se presentaron mejoras en cuanto al riesgo, logrando valorizar los mercados de renta fija y de acciones.

“La expansión de la cartera bruta durante el segundo semestre de 2012 continuó disminuyendo, como se ha venido observando desde finales de 2011. En particular, las modalidades de consumo y comercial presentaron una menor dinámica, en comparación con el resto de carteras. Por su parte, el crecimiento de las inversiones aumentó, aunque su dinamismo fue menor que el de la cartera bruta; sin embargo, su participación en el activo de los establecimientos de crédito permaneció estable durante 2012. Por el lado del pasivo, se sigue observando una importante expansión de los CDT a más de un año, lo que se ha reflejado en una mayor participación de este componente en el pasivo total” (Banco de la República, 2013).

Por otra parte, los indicadores ROA y ROE fueron de 2,1% y 14,6% respectivamente, mostrando una disminución en comparación a seis meses antes, indicando también que han sido más bajos que el promedio de los cinco años anteriores.

En Noviembre de 2011, ahorros públicos dieron como resultado una pérdida aproximada de 763.000 millones de pesos, a comparación de este año, en el 2012 para el mismo mes se registraban ganancias de 34,2 billones de pesos, el 73,5% hacían referencia a fondos de pensiones, fiduciarias, entre otros. Por otra parte, las entidades de crédito, lograron aumentar sus ganancias en un 5,9% con respecto al año anterior. (Portafolio, 2013)

Al año siguiente, durante el 2013, el sector tuvo un crecimiento económico positivo reflejado en sus utilidades, con un 21,1% anual, superando los seis billones de pesos, dentro de este marco se tiene en cuenta un 86,3% de ganancia generada por los ahorros del público que manejan los fondos de pensiones y cesantías, y fiducias, las cuales tuvieron una utilidad por 5,3 billones de pesos.

En anterior a lo expuesto, un artículo del (El Colombiano, 2014) muestran que las entidades bancarios obtuvieron un margen de utilidad de 516.541 millones de pesos, 17,4% más que el año anterior, en el que las entidades como Bancolombia, Banco de Bogotá, Davivienda y el estatal Banco Agrario, lideraron el grupo representativo de ganancias más altas, arrojando resultados de un 99.948 millones, 91.775 millones, 56.377 millones y 44.370 millones de pesos. Aunque estas cifras fueron positivas durante 2013, los mercados financieros contaron con desvalorizaciones y cambios estructurales en los portafolios de las entidades financieras, logrando resultados de 6,28 billones de pesos, mientras que los fondos administrativos, y sociedades fiduciarias cayeron 3,05 billones de pesos, pues en el 2013 el país logró una representación total de los