“MÉXICO, ÚNICO E INIGUALABLE, COMO TÚ, COMO YO, COMO TODOS”

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Finalmente, las costumbres y tradiciones son las más significativas en tanto a la identidad nacional, pues abarca lo más representativo y usado en la cultura mexicana, como la herencia de algunos alimentos usados en las culturas mesoamericanas, como: tortillas, tamales, atoles, pozole, pulque, mole, chile y uso de salsas, entre muchos otros.

Otra característica en cuanto a costumbres es el cultivo de diferentes semillas en un mismo espacio o sembradío, llamado “milpa”, el cual se sigue utilizando en algunas regiones del país.

El ejemplo más claro e importante de las tradiciones es el culto a los muertos, que en la época actual se ha seguido transmitiendo de generación en generación.

Todos estos aspectos tienen que ver para la conformación de la identidad como mexicano, ya que el habitar en el territorio de lo que fue Mesoamérica y Aridoamérica nos da una nacionalidad como mexicano, el usar palabras de origen indígena de culturas que se desarrollaron en este territorio, me hace perteneciente al mismo, en cuanto a la religión; no existe relación alguna con las características mesoamericanas, pues la religión actual fue implementada de una situación externa, la cual fue la Conquista Española. Como ya se ha mencionado, las costumbres y tradiciones son las que más nos identifican por ser únicas y la mayoría se siguen utilizando en la actualidad.

¿Será esto lo único que conforma nuestra identidad nacional?, ¿realmente estas son las únicas raíces del mexicano y de lo que hoy conforma nuestro país?

Para esto es necesario tomar en cuenta que el desarrollo de los pueblos mesoamericanos se vio truncado por la conquista española, pues este acontecimiento marco la mayor parte de la cultura, religión e ideología de lo que ahora somos como mexicanos.

Como primer punto seria esencial buscar el por qué España tuvo el fácil acceso a los pueblos mesoamericanos, pues estos pueblos contaban con grandes ejércitos, los cuales bien podían combatir con los españoles si estos no hubieran creído que Hernán cortés era su dios Quetzalcóatl. Gracias a esto se pudo conquistar a los pueblos mesoamericanos, pero ¿cómo fue posible que solo cuatrocientos hombres fueran superiores a más de doscientos mil indígenas? La respuesta es clara, pues las alianzas de los pueblos inconformes con el dominio y explotación que el pueblo mexica ejercía sobre ellos facilito la conquista de Tenochtitlan ya que fueron más de doscientos mil indígenas los que se unieron al ejército español. A este hecho se le conoce como Conquista Militar.

¿Qué hubiera pasado si estos pueblos no hubiesen tenido una alianza con los españoles? ¿Conservaríamos las mismas características de los pueblos mesoamericanos? Ciertamente sería imposible responder concretamente estas preguntas, pues no solo España era el único país con ideas expansionistas. Se han hecho diferentes hipótesis de lo que pudo haber pasado, pero ninguna puede ser comprobada a ciencia cierta.

Sin embargo, más determinante resultó entre todos los pueblos de Mesoamérica, así como en el México actual, aquella conquista lenta, pero más significativa: la Conquista Espiritual.

Se dice que es la más significativa ya que fue el principal factor que influyó sobre la religión actual de los mexicanos. En esta Conquista se impartió forzosamente la religión católica a los indígenas mesoamericanos, dicha religión, es la que conforma la mayoría de nuestro país en la actualidad.

Pero, ¿cómo explicar los evangelios con tan diversas lenguas y dialectos?

Algunos evangelistas optaron por hacer representaciones del nacimiento de Jesús, pero fue inútil, los indígenas no lograban entender. De aquí es donde surgen las pastorelas que se llevan a cabo en Diciembre hasta hoy en día.

Para poder impartir esta evangelización se les obligo a los indígenas a aprender el idioma español para que así fuera más fácil la enseñanza de la palabra del señor.

De esta manera fue que el español se volvió el idioma nacional de nuestro país, el cual, obviamente, se sigue hablando hasta hoy formando parte de nuestra identidad.

Durante la conquista espiritual se construyeron centros ceremoniales llamados Iglesias, en estas solamente entraban los españoles y la impartición a los indígenas se realizaban en los patios de las mismas.

Las iglesias, en la actualidad, siguen siendo los centros de impartición de la región católica y se conservan las características de evangelización española de la misma. Con el paso del tiempo, diferentes religiones se han integrado a la ideología de algunas personas, pero ninguna de ellas representa a la población mexicana como lo hace la católica, esta religión se ha convertido en un factor principal de lo que nos identifica nacionalmente, ya que es la doctrina más abundante del país.

Cuando se empezaba la construcción una iglesia durante este periodo, se colocaba una cruz de madera en el primer cimiento en donde se situaría el altar, como representación de bendición. Dicha tradición se sigue realizando por los albañiles de la actualidad, con el mismo propósito religioso.

Es así como el catolicismo se impuso a las ideas politeístas que tenían los pueblos mesoamericanos, pero no pudo suprimirlas por completo, a esto se le dio el nombre de sincretismo religioso. Esto se puede observar en el hecho de que, en el presente se mantienen firmes las creencias religiosas de la antigua Mesoamérica como la celebración del Día de Muertos, el cual tiene sus orígenes desde antes de la Conquista, pero se combinó la tradición española. A esto se le denomina mestizaje de tradiciones o cultural.

Los pueblos mesoamericanos se caracterizaron por tener formas muy elaboradas de espiritualidad, vinculadas a la cosecha. Con la llegada de los españoles, la tradición de la cosecha se fusionó con las costumbres medievales católicas, aparecieron modificaciones en la elaboración de las ofrendas y los altares, dichas características son las que actualmente muestran los rasgos de esta fusión cultural[1].

"Los muertos juegan un papel muy importante en todo el ciclo agrícola, se les solicita apoyo en los momentos críticos, en las lluvias, para el cultivo del maíz… Ellos son los intermediarios con los dioses de la lluvia." Andrés Merina, miembro del Instituto de Investigación Antropológica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En el México del presente, existen las características que trajo España a esta región, pero se siguen conservando las que provienen de las culturas mesoamericanas.