Análisis del libro Tu hijo tu espejo

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“El rechazo y sus mascaras”, describe la condición humana generando necesidades de insatisfacción creando miedos y conflictos en las relaciones padres e hijos, estructurándolo en dos áreas principales ser del sexo opuesto a que el padre deseaba y el síndrome del patito feo.

El “Cambia tú lo que yo no pude cambiar” es aquí donde los hijos aprenden valores de lo que somos más no de lo que decimos, debes comprender que para lograrlo debes serlo tú primero lo que quieres, para que tu hijo sea lo que tú quieres, la dualidad de la vida.

Las “Etapas no resueltas”, detalla cada una de las etapas del desarrollo de nuestro hijos, advirtiéndonos de las necesidad no satisfechas en el desarrollo infantil, basándose que en la infancia encontraremos todos los conflictos no resueltos que serán obstáculos en nuestra vida adulta y alteraran nuestro comportamiento, generando insatisfacción y frustración, nos sugiere que para ser felices debemos de darle fin a las cosas inconclusas a lo largo de nuestra vida.

“La historia sin fin”, básicamente se centra en el nombre que será el generador de una barrera de frustraciones y sueños inconclusos de los padres, en donde las cargas son mas emocionales por las generaciones, que en muchas ocasiones son de más de diez generaciones llevando el mismo nombre.

“Su nombre es envidia”, nos habla en la forma que los padres manifestamos la envidia hacía un hijo o hija, por medio de la crítica y la desaprobación generando en ellos un karma emocional.

En “La pesada carga del hijo parental”, describe los excesos de responsabilidades que les damos a los hijos, generando fracasos y evitando que el hijo lleve a cabo actividades acordes a su edad y evitamos las relaciones con sus pares, asignando en ellos responsabilidades no correspondidas de acorde a su edad, problemática principal en la actualidad.

Por último “El compromiso sagrado”, ser padre o madre es el más hermoso y sagrado compromiso que adquirimos con la vida, compromiso que algunos deciden no cumplir siendo físico o emocional, o adquirir el compromiso de ser padres, siendo una elección voluntaria y no convirtiéndola en una obligación, pero de acuerdo a la decisión serán las consecuencias en los hijos.

La autora, nos dice que la clave está en el amor, que das y recibes día a día fortaleciendo los lazos de la unión padre e hijo, que son la base principal de la comunicación. “Estoy convencida de que el amor es lo más importante en la vida y que de nuestro mayor esfuerzo interés debe estar dirigido a la búsqueda y el desarrollo de nuestra habilidad de amar”.

Ser padre no es sólo ser padre, sino que es un camino lleno de alegrías, tristezas, angustias, miedos, inseguridades; pero en nuestras manos está que camino elegir, para darles a nuestros hijos un camino de amor, será una aventura que no termina, seremos padres hasta el fin de nuestros días y siempre tendremos miedos, inseguridades, frustraciones, necesidades, etc.

La clave está en que nadie nos enseña a ser padres, ser padres es formarnos en el camino de las vida de nuestros hijos, no es darle todo a manos llenas, es enseñarles a vivir y sobrevivir, porque nadie nos da las cosas tan fácil.

La vida es un camino lleno de hoyos, dependerá de nosotros hundirnos o salir a delante con ellos, ser padres es no sólo ser padres, es guiarlos en el camino de la vida.

El momento de ser padres lo elegimos nosotros, al haber adquirido está responsabilidad, debemos ser capaces de enfrentarnos y tener el valor de enfrentar la vida junto a nuestros hijos, no huyendo ante los problemas y tomando el camino fácil de rendirnos, sino de luchar a lado de ellos para generar personas de carácter y valores.

Me agrado mucho la obra, porque te muestra la diversidad de padre e hijos en la que estamos inmersos, y que somos los culpables de generar buenos o malos hijos, eso dependerá de nosotros como padres.