Tema- La ciencia del bienestar psicológico.
Enviado por Ledesma • 15 de Marzo de 2018 • 4.752 Palabras (20 Páginas) • 473 Visitas
...
El modelo más importante de construccionismo psicológico es de Russell (2003) en el que se expone el fenómeno emocional en el afecto, de modo que se entiende la emoción como una construcción psicológica que resulta de la percepción de ciertos fenómenos afectivos concatenados, en el que ninguno de ellos es la emoción, ya que no tiene un estatus ontológico relativo, es decir, existe como una construcción perceptiva del individuo.
Por otro lado, dentro del construccionismo social, la emoción es básicamente el resultado de un conjunto de convenciones sociales. En el que las emociones son la suma de distintos procesos psicológicos y conductas. En este tipo de teoría se plantea que el individuo nace, y comienza a tener emociones al aprender las reglas establecidas por su sociedad.
Sea cual fuere de las teorías, se plantea el placer como el elemento central y denominador común de las emociones positivas.
En este caso, en los modelos de emoción básica, el placer está ligado a una emoción. En los modelos appraisal, el placer es un reflejo sensorio-motor sin carácter emocional. En el construccionismo psicológico el placer es uno de los estados del afecto nuclear y la percepción Y, en el construccionismo social es un elemento de los sistemas básicas que sustentan los roles emocionales, pero además es una convención. Por otro lado, en la psicología de la emoción el placer es considerado como un fenómeno afectivo.
Sea como fuere, la medida dimensional del placer supone un problema, ya que es una dimensión con dos polos de valencia opuesta, que en ocasiones se entienden como independientes y, en otras como unipolares, como es el caso de Carcioppo y Berntson (1994) experimentando el placer y displacer simultáneamente.
No obstante, los datos no son concluyentes y en ocasiones la experiencia de placer no es necesariamente consciente, tal y como expone Zajonc, en la que se dice que la existencia de un procesamiento afectivo de la información, ajenos en ocasiones al subconsciente, siendo en ocasiones incapaces de informar sobre nuestras reacciones afectivas. Por tanto, se extrapola que existe una dimensión de placer inconsciente.
No obstante, visualizando el placer inconsciente se plantea la pregunta de si el placer no existe para darnos gusto. Ante ello, existen aspectos positivos como la función de equilibrio o esfuerzo, siendo partícipe de nuestra autorregulación.
Esta emoción, no se plantea ni se define igual en todos los países. En España, la emoción más prototípica es precisamente la alegría, pero no es en el caso del inglés, en el que la felicidad es la máxima y la alegría está por debajo de los cinco primeros ejemplos de emoción.
Esta conexión entre emoción y felicidad es compleja y presenta panoramas distintos dependiendo de qué perspectiva teórica estemos asumiendo.
EL BIENESTAR DE LAS PERSONAS
Como se ha comentado antes, el bienestar de las personas es actualmente un tema con verdadero interés científico para conocer las características psicológicas de estas personas que cualquiera etiquetaría como crónicamente felices, por su asociación a los efectos beneficiosos como mejor integración social o mejor rendimiento laboral, por lo que no sólo beneficia a los individuos sino también a la sociedad en su conjunto.
Antes de la irrupción de la psicología positiva, la investigación de estos aspectos no se consideraba muy prioritaria, pero actualmente, el estudio de la personalidad feliz, es relevante por dos motivos: ayuda a comprender mejor la personalidad desde una dimensión positiva y porque nos permite conocer los procesos por los cuales las personas consiguen ser felices.
La extraversión, es un rasgo caracterizado por la propensión a la sociabilidad y la tendencia a volcarse en todo tipo de experiencias gratificantes, es decir, la sensibilidad a las experiencias de disfrute. De ese modo, las personas extrovertidas les gusta la gente y son capaces de crear entornos positivos y estimulantes, son activos y no se suelen desmoronar ante las dificultades. Mientras que los introvertidos no desarrollan tanto sus habilidades sociales y no disfrutan de esos contextos ni son tan activos, siendo menos estimulantes y por lo tanto sienten menos emociones positivas.
El segundo de los rasgos es la estabilidad emocional. En ellos, se tiende a reaccionar ante los pequeños y grandes sucesos de la vida de forma moderada y, al experimentar emociones negativas son menos duraderas e intensas por tener una mayor autoestima y una mejor capacidad para regular las emociones.
Estos aspectos, se pueden modificar al variar la personalidad, siendo más moldeable en las etapas de niñez aunque se puede modificar mediante esfuerzos significativos en la etapa adulta. Para ello, es necesario comenzar con la tendencia a disfrutar de pequeñas experiencias cotidianas, siendo extravertidos.
En contra de la intuición general, la mayoría de las circunstancias no parecen tener una influencia significativa sobre los niveles de bienestar, dado a la enorme capacidad de adaptación. Estudios determinan que las circunstancias generales no explican más de un 10%, mientras que un 50% es nuestro temperamento y un 40% son elementos modificables, como actitudes, actividades intencionales o hábitos cotidianos. Por lo que a través de ciertos cambios una persona podría aumentar su nivel de bienestar.
Por otro lado, al tener en cuenta factores de estado civil y apoyo social, muchas de las investigaciones postulan que el bienestar aumenta con el matrimonio, siendo la satisfacción marital uno de los factores más importantes que predicen el bienestar de las personas.
Otro factor a tener en cuenta es que la felicidad humana se determina por la cantidad de relaciones sociales, siendo un predictor sólido de bienestar. En cuanto a este aspecto, personalmente no me encuentro de acuerdo, ya que creo que no es la cantidad sino la calidad de esas relaciones, es decir, puede que se tengan muchos amigos pero realmente, para las cosas importantes, tan sólo están unos cuantos. Por ello, no creo que sea la cantidad de relaciones un factor determinante de bienestar sino la calidad de esas relaciones, es decir, que sepas que la gente de la que estás rodeada está ahí de verdad.
Por otro lado, es significado que en este capítulo se considera que el nivel económico no ejerce un papel tan significativo como se pensaba, tan solo hasta cubrir unas ciertas necesidades básicas. No obstante, la gente de apié considera que si tuviese más dinero sería más feliz, sobreestimando las reacciones
...