El plagio - Ensayo

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Por consiguiente, tomando la perspectiva de dichos autores, las TICS podrían considerarse como herramientas socioculturales que cumplen una labor fundamental en el desarrollo del aprendizaje.

Papert, S (1981), uno de los pioneros de la Inteligencia artificial e inventor del lenguaje de computación Logo, destaca que el uso de las computadoras ha tenido un rol preponderante a la hora de proveer nuevas formas de aprendizaje. Según este autor, la computadora podría pensarse como una portadora de semillas culturales, cuyos productos cognitivos trascenderán la presencia de material concreto: “El trabajo con computadoras puede ejercer una poderosa influencia sobre la manera de pensar de la gente, yo he dirigido mi atención a explorar el modo de orientar esta influencia en direcciones positivas"

Basándose en el enfoque constructivista de Piaget, Papert propone una visión del aprendizaje a la cual le dio el nombre de “Construccionismo”. Al igual que Piaget, este autor señala que la acción o el proceder activo del sujeto es fundamental para que se produzca aprendizaje.

El conocimiento es algo que debe ser construido (o reconstruido) por el propio sujeto que aprende a través de la acción, de modo que no es algo que simplemente se pueda transmitir.

Esta visión construccionista de Papert considera además que las actividades de confección o construcción de artefactos (sean estos el diseño de un producto, la construcción de un castillo de arena o la escritura de un programa de ordenador) son facilitadoras del aprendizaje. Los sujetos al estar activos mientras aprenden, construyen también sus propias estructuras de conocimiento de manera paralela a la construcción de objetos. También afirma que los sujetos aprenderán mejor cuando construyan objetos que les interesen personalmente, al tiempo que los objetos construidos ofrecen la posibilidad de hacer más concretos y palpables los conceptos abstractos o teóricos y por tanto, los hace más fácilmente comprensibles.

De esta manera, en concordancia con los autores citados anteriormente, Papert nos advierte que no basta solamente con proponerle al estudiante que se haga cargo de su aprendizaje y que asuma un papel activo. La sociedad y la cultura tienen una gran responsabilidad; pues deben poner a disposición los recursos que necesita para ello.

Todo este enfoque constructivista y construccionista planteado, no solo tiene una implicancia fundamental en el aprendizaje actual; sino también en la enseñanza docente. El profesor siempre debe tratar de conectar los conocimientos de acuerdo a los esquemas con los que cuenten los estudiantes. Y una de las maneras de llevar a cabo dicho proceso, es implementando las “famosas TIC” como herramientas necesarias para el desarrollo educativo.

Las TIC a lo largo de estos años, han llegado a convertirse en uno de los pilares básicos de la sociedad; y por lo tanto, hoy en dia es necesario proporcionar al sujeto una educación que tenga en cuenta esta realidad.

Para ello, las TIC han de ser consideradas en dos aspectos:

El primer aspecto, es la consecuencia directa de la demanda cultural en la sociedad actual. No se puede entender el mundo de hoy sin un mínimo de cultura informática, ya que es preciso entender cómo se genera, cómo se almacena, cómo se transforma, cómo se transmite y cómo se accede a la información en sus múltiples manifestaciones (textos, imágenes, sonidos, hipertextos, hipermedias, etc.). Si no se quiere estar al margen de las corrientes culturales, hay que intentar participar en la generación de esta cultura. Es esa la gran oportunidad que presenta dos facetas:

- Integrar esta nueva cultura en la educación, contemplándola en todos los niveles de la enseñanza. Involucrando a docentes y alumnos en las nuevas metodologías que ofrece hoy en día las TIC.

- Traducir ese conocimiento en un uso generalizado de las TICS para lograr una libre, espontánea y permanente formación a lo largo de toda la vida.

El segundo aspecto, aunque también muy estrechamente relacionado con el primero es más técnico. Se deben usar las TIC para aprender y para enseñar. Es decir, el aprendizaje de cualquier conocimiento o habilidad en el estudiante se puede facilitar mediante las TIC y en particular mediante Internet, aplicando las técnicas adecuadas. Esto implica no solo el conocimiento de dispositivos tecnológicos o la discriminación y evaluación de sitios web, sino también el conocimiento de las “normas APA”; ya sea por parte de los estudiantes o por parte de los propios docentes. Estas normas fueron desarrolladas con el propósito de ayudar a la comprensión de la lectura, de tener una mayor claridad de la comunicación y de expresar las ideas con un mínimo de distracción y un máximo de precisión. El Manual de publicaciones de la APA contiene directrices para todos los aspectos relacionados con la redacción, desde la determinación de la autoría hasta la construcción de un cuadro para evitar el mal uso del “plagio” o “ciberplagio”, y para la precisión en las referencias bibliográficas.

Por lo tanto, si los profesores y alumnos emplean estas metodologías, dichos estudiantes podrán llevar a cabo un “ciberplagio responsable” destinado a producir aprendizaje. Si por el contrario, se desconocen estas normas o no se emplean de la manera correspondiente, el uso del ciberplagio será destinado a la resolución rápida y facilista de problemas. Lo cual tendrá consecuencias sumamente negativas en el proceso de enseñanza aprendizaje. Los alumnos se volverán incompetentes a la hora de desarrollar un razanonamiento lógico deductivo y los docentes a la hora de transmitir sus conocimientos.