Psicología social . Normas, roles y posiciones sociales

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El término de conducta o actuación es definido como la representación de un rol o papel en la acción, o sea, externamente. Esta actuación de rol puede corresponder o no a las expectativas de los otros.

Otra de las nociones de estos términos es la pareja de rol donde se dice que dos personas constituyen una pareja de rol cuando ocupan posiciones complementarias.

Otro de ellos son los derechos y obligaciones de rol, estas posiciones así compuestas nos llevan a definir lo que son los derechos y obligaciones. Ambos se explican en función de las expectativas que cada miembro de la posición foca, y por ende de las posiciones complementarias en ellas comprendidas, tiene respecto de la conducta del otro. Puede haberlos también de carácter mu y particular, que tienen vigencia solamente para un pequeño grupo o dentro de una subcultura, dependiendo de su ligazón a los que algunos autores llaman roles personales y roles culturales respectivamente.

Otra de las nociones es el sector de rol y conjunto de rol donde cada pareja de roles en una posición focal con las expectativas que implica y los derechos y obligaciones a ellas asociados, constituyen lo que Secord y Backman llaman sector de rol. Todo ese conjunto de relaciones, que a su vez implican otras posiciones complementarias, constituyen lo que Robert K. Merton denomina un conjunto de rol o role set.

Y por último la noción de percepción de rol que es definida como la representación interna de las acciones de otro ubicándolas en un determinado rol. Esta implica la respuesta organizada de una persona ante estímulos prevenientes de un medio ambiente social. Esta organización es de tipo cognoscitivo, por lo tanto, dos aspectos que se complementan el uno al otro; uno externo, la conducta o actos de los demás; y otro interno, la organización de los estímulos percibidos de acuerdo con ese contexto cognoscitivo.

Otro de los subtemas del capítulo es la noción de sí mismo, la interacción entre sí mismo y rol es necesaria para que haya esa interacción social que es, a su vez, la base de la vida social.

El yo, que es la parte consiente de mí social y a la que está referida la posición, respecto de la cual juega un rol. Es la reacción ante el mí que toma las actitudes de los otros, por tan ligado a él. El yo es el sujeto activo de la propia conducta, con poder de decisión y responsable de la originalidad del comportamiento propio.

Y el mí sería el sujeto pasivo, en el sentido de que él recibe la noción de los otros y representa la adaptación al grupo. Mí y Yo integran a la persona, que no puede existir sin ambos y es su dinámica interna la que permite al individuo proyectarse activamente en su medio social.

Referencias APA:

Libro: Salazar, Montero, Muñoz, Sánchez, Santoro, Villegas. Psicología Social. México: Editorial Trillas.