APRECIARON RESPECTO AL ENTREVISTADO

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Marta es el nombre de su segunda esposa a ella la conocía desde su infancia eran vecinos, su nueva esposa sabía exactamente los malos momentos que en ese entonces estaba viviendo don Pepe por lo que ella busca una forma de ayudarle dándole trabajo de cargador de papas en un mercado. Sin pensar ni analizar bien las cosas Marta y Pepe se enamoran ya que la mayor parte de tiempo pasaban juntos es así que con ella contrajo matrimonio a sus 26 años, esta relación duró 13 años en donde engendraron 3 hijos y en la actualidad tienen 5 nietos y dos bis nietos. Esta etapa de su vida termina debido a que Don Pepe pretendí a otra mujer a quien el la llama la “única mujer que ame en la vida”.

Su tercera y última esposa se llama Rosa María, la forma de conquistarla fue un poco complicado ya que ella sabía que Don Pepe era casado, pero el todas las mañanas y todas las noches pasaba por su casa silbando o lanzaba piedritas pequeñas a la ventana de Rosa María lo cual ocasionaba que ella saliera a la ventana, no siempre pero si algunas veces lo cual a Don Pepe le fascinaba esa escena porque ella era todo lo contrario a Marta. Un día Don Pepe la invito a tomar un jugo al mercado mayorista en Ibarra porque era ahí en donde vivía con su madre. Los pocos sucres que puso ahorrar fue ayudando a cuidar vacas a los vecinos de la zona, ahorro una semana para poder invitarla a un jugo. Con el temor de un rechazo por parte de Rosa María. Sin embargo ella gustosa acepto la invitación después de haberle rogado 2 semanas. A los 40 años deciden contraer matrimonio después de un largo periodo de conquista “ha sido la mujer más difícil, pero la indicada” dijo Don Pepe, con Rosa María estuvo casado durante 18 años, tuvieron 5 hijos, en la actualidad 12 nietos y 3 bisnietos. Rosa María falleció hace 13 años atrás debido a un paro cardiaco ocasionado por una caída.

La muerte de Rosa María fue el dolor más grande que recibió en su vida de loco bohemio como don Pepe se describe. “Gracias a Dios lo he sabido superar de manera racional con ayuda de mis hijos y ahora con mis nietos que todo el amor que tengo por Rosita María se ve reflejado en sus bellos ojos y rostros” mencionó así Don Pepito.

Y para finalizar no podría olvidarse de su última aventura amorosa, no quiso entrar en detalles específicos pero mencionó la existencia de treceavo hijo con el cual nunca ha convivido, ni tampoco sabe nada de él. Solo espera que para su vejez este hijo esté dispuesto a conocerlo y frecuentar muy seguido, porque nadie sabe lo que puede ocurrir el día de mañana. A pesar de esto Don Pepe pide por el bienestar de este hijo.

CONCLUSION

Personalmente fue muy grato conocer parte dela vida de Don Pepito, ya que se podría decir que es “famoso” en el barrio por su solidaridad y amabilidad con todas las personas que a diario frecuentamos con él.