Derechos Humanos. Derecho a la Cultura,

...

Fue hasta 2009[10] que se habló como derecho a la cultura como un derecho Constitucional, previo a que esto sucediera, Luis Echeverría fue el primer encargado en hacer una reforma ante el artículo cuarto antes ya citado en +este trabajo,[11] posterior a esto, el referido artículo se reforma varias veces pero nunca se habla de la cultura hasta que en el gobierno del Felipe Calderón Hinojosa el jueves 30 de abril del 2009 se le agrega el penúltimo párrafo tal cual como lo conocemos al día de hoy[12]. Sin embargo no sólo el artículo 4º Constitucional no se habla de esto, más bien se vincula con el artículo 3º en su fracción V “…el Estado promoverá y atenderá todos los tipos y modalidades educativos…y alentará el fortalecimiento y difusión de nuestra cultura.” De igual manera en su artículo 73 en la fracción XXV donde faculta al congreso para desarrollar la difusión culturales de los recintos arqueológicos e históricos del país así como para legislar leyes a favor de éstas, es decir a su promoción. Por lo antes expuesto podemos mencionar que si bien es cierto no hay un solo artículo que refiera al derecho a la cultura, pero también es cierto que solo se habla de difundirla nunca se señalan las maneras ni los marcos como se debería expandir.

Y aunque antes de la reformas mencionadas no se encontraba a la cultura citada en la Carta Magna, se llevaron a cabo programas como muestra de un deseo de mostrar al país éste derecho, lo fue como primera instancia en 1959 con la creación de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (CONALITEG) por Jaime Torres Badet, ya que al llegar a ocupar el cargo de Secretario de Educación Pública observó unos datos altísimos del analfabetismo. Así como también es importante mencionar que en la década de los 60’s fue en donde la creación de museos, los más importantes de la ciudad, estuvieron en su pleno auge como lo fue el Museo de Antropología e Historia y el Museo de Arte Moderno, pero aunque inicialmente éste impulso hacia lo museos fue un mero interés hacia la atracción del turismo al país, se podría decir que actuó como un arma de doble filo al también cumplir con el requisito de la promoción de la Cultura. En éste mismo año se apreció un movimiento estudiantil principalmente promovido por la reprimida y señalada música Rock en donde se llevaron a cabo conciertos underground como consecuencia a la violenta representación hacia quienes lo escuchaban.[13] Uno de los hitos más significativos dentro de la cultura en México fue la creación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA) en la década de los 80’s como un órgano Administrativo, fue fundada el 7 de diciembre de 1988 bajo la misión de preservar el patrimonio cultural de la Nación en sus diversas manifestaciones artísticas y culturales (sic)[14]. Posteriormente ésta en el año de 2015 se convertiría en la Secretaria de Cultura por el Presidente Enrique Peña Nieto, en la cual cada semana hay una cartelera de diferentes actividades culturales por toda la ciudad y la promoción ha incrementado ya que en los últimos dos años se han realizado cerca de 173 mil actividades artísticas pero por otro lado los números de la población que tiene acceso o se ve beneficiada por la cultura son cada vez menos, en el 2015 las personas que visitaban museos eran un total de 21, 019, 352 al año y de lo que va del año 2016 fue de 14, 942, 015 ciudadanos y así como en su mayoría de categorías como el fomento a la lectura, la educación artística y cultural, la cinematografía, entre otros[15]. Ahora bien con lo antes expuesto la pregunta que habría lugar a hacer sería ¿De verdad se ha impulsado la Cultura en México?.

Conclusión.

Tuvieron que pasar poco más de cincuenta años para que México reaccionara y creara un órgano administrativo para la promoción y creación de las actividades culturales. Hasta este punto hemos analizado los pasos que tuvieron que transcurrir con los decretos, acuerdos, tratados, pactos y demás para que la Cultura pasara a formar parte de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y por consecuente considerarse uno de los Derechos Humanos reconocidos en el territorio; sabemos que la creación de una Secretaria de Cultura es un decreto Convencional, Constitucional y en apoyo al principio Pro Persona, el primero de éstos aplica ya que al ser emitido originariamente de un tratado Internacional es reconocido y pasa a formar parte del segundo plano antes mencionado ya que no viola ningún ámbito constitucional y sin embargo apoya al libre desarrollo de cada ser humano en impulso al principio Pro Persona. Es decir no había excusa para que esto tuviera que esperar tanto tiempo, las herramientas y los decretos ya estaban lo único que faltaba era poner manos a la obra. Se me hace intrigante el poder conocer la manera en que el estado pudo evadir la presión internacional al ver tan escasos resultados del tema en un principio y la manera en la que el dinero destinado a esto se desviaba.

Así también como no descarto el esfuerzo que se ha ido haciendo para el surgimiento de los recintos culturales más representativos del país y la preservación de los mismos pero el problema más resaltante que podemos identificar es la escasa población que hace caso omiso a los promocionales de la cultura. Creo que por fin aquí en México hay un verdadero programa hacia el apoyo de la cultura, altamente bueno pero muy ineficiente ya que las décadas pasadas dejaron un bajo interés de la población para acercarse a museos, bibliotecas, las artes, entre otros; cada vez hay menos población interesada en conocer nuestra cultura misma y no hacen nada por ello y con parte de razón ha sido culpa del estado mexicano por no haber tenido una continuidad desde un principio a la difusión de la cultura, y digo parte porque la sociedad se ve también altamente influida por los medios de comunicación llenos de intereses económicos y es la misma sociedad quien muchas veces afirma el no querer conocer los espacios y programas culturales.

Podríamos concluir que efectivamente en México si existe el Derecho a la Cultura pero como unos números muy bajos, y en alcance de esto la solución ideal podría ser el nuevamente empezar desde la educación básica a inculcar éste sentido de interés hacia la cultura como en los Libros de Texto, en Capacitaciones a profesores para dedicar más horas semanales a actividades culturales de los alumnos, en la enseñanza de las nuevas tecnologías al buen uso para la Cultura, en dar becas a todos aquellos que pertenecen a grupos públicos de cultura como las Casas de la Cultura para que con este apoyo sigan creando arte. Pero una de las más importantes seria la creación de una campaña de conciencia