Educación Sexual: su contraste en el mundo

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A la educación sexual, que cada familia les brinda a sus hijos adolescentes, se suma la enseñanza impartidas en las escuelas o colegios, desde niños a jóvenes y a la correspondiente a cada cultura. En Europa occidental la educación sexual está enfocada al “crecimiento personal”, por su condición emergente y de desarrollo durante la adolescencia, por eso no se percibe como un “problema” o “amenaza”, sino que todo lo contrario, como la potencialidad de desarrollar su sexualidad de una u otra forma, contribuyendo en esto la educación en la juventud para su vida en general, para el desarrollo de relaciones satisfactorias que ayuden positivamente al desarrollo de la personalidad y la autoestima.

Ante esta idea, la Convención de los derechos de la infancia de la UE, estableció el derecho a la información y la obligación de los estados de proporcionar medidas educativas, que se consideren necesarias. Esto generó en Alemania, las escuelas ya sean públicas o privadas, se pusiera en marcha este plan, enfocada con mayor énfasis en los adolescentes, a través de charlas de orientación, fomentación del tema en cada familia, afiches y propaganda de concientización del tema, generando que los estudiantes tengan mucho más en cuenta los métodos preventivos, así es como el 71% de las mujeres y el 66% de los varones aplican el uso del preservativo en su primera vez, en comparación al 20% que lo hacía en 1980, siendo sólo un 9% hoy, el que no las utiliza, y así reduciendo notablemente los embarazos no deseados en menos de 18 años.

La píldora anticonceptiva se ha ido dejando en segundo plano, empleándola sólo un tercio de las adolescentes. Dentro de las razones para no tomar precauciones, según un estudio; los jóvenes dicen que el factor determinante sería la “espontaneidad de la primera vez”; llega por sorpresa.

A pesar de los beneficios que ha traído la enseñanza sexual en escuelas, de igual forma se ha generado polémica, por su carácter “obligatorio”, especialmente en niños entre 5 – 10 años, ya que muchos papás consideran que sus hijos aún no están en edad para ser instruidos en esto, en donde han terminado hasta padres presos, por no querer llevar a sus hijos a las clases de educación sexual.

Conclusión

El abordaje de este tema tan controversial, es esencial para obtener resultados favorables en cuanto al desarrollo íntegro de la vida sexual desde la edad temprana. Es importante esta calidad valorativa que incurre en la sociedad actual respecto a la educación sexual formativa, por tanto, se espera que incremente con el tiempo el alcance de información a todas las localidades, desde las más remotas hasta las más urbanas, disminuyendo así la probabilidad de embarazos no deseados.

En chile, no hay una educación sexual fuertemente implementada o impuesta desde temprana edad, en consecuencia, la tasa de embarazos es mayor que en Alemania y otros países desarrollados. Estos podrían ser claramente un modelo a seguir para Chile, tanto para confrontar problemas como la educación sexual, como para generar un cambio más amplio en el modo de pensamiento, adquiriendo cada vez más experiencia y poniendo en práctica políticas públicas para generar conciencia.

Cabe destacar, que para querer generar consciencia debe existir una preocupación por la sociedad, por el “otro” y su calidad de vida, por su bienestar, y ello se traduce, de alguna manera, en una responsabilidad social. Existe una cierta empatía que permite a las demás personas surgir en conjunto e interaccionar para enriquecer su cultura. Por lo tanto, todo cambio parte desde uno mismo hacia el entorno, y es posible si cada una de las personas se dispone a abrir sus mentes e incorporar nuevos conceptos, con el fin de contribuir a la educación social.