INFLACIÓN PRIMER GOBIERNO DE ALAN GARCIA

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CRECIMIENTO ECONÓMICO (1985-1986)

Alán García aplicó una política económica de corto plazo que calificó como “heterodoxa” (keynesiana). De esta manera, García explicó que su plan para estabilizar y hacer crecer la economía era aumentando el consumo de la población. El presidente contaba con asesores izquierdistas y para llevar a marcha su plan, aplicó las siguientes medidas:

•Se aumentaron los salarios reales en un 18%

•Se congelaron los precios de los alimentos

•Se redujeron las tasas de interés bancario de 280 a 110%

•La moneda fue devaluada en 12%

•Se redujeron los precios de los materiales de construcción y los medicamentos

•Se controló el tipo de cambio fijándose 13.90 soles por dólar. Se instauró el llamado MUC (Mercado único de cambio). A la vez, surgió un mercado paralelo y libre que llegó a cotizar el dólar en 20.00 soles.

•Los certificados de divisas quedaron congelados por 90 días, pero se siguieron cotizando en moneda extranjera.

•Las tarifas de electricidad y teléfono subieron en 20%, pero se anunció que permanecerían congeladas hasta fin de año

La aplicación de las medidas, mencionadas anteriormente, dieron un resultado positivo. En setiembre de 1985, la inflación se redujo a 3.5%. En ese entonces, hacia el segundo trimestre de 1986, la economía peruana denotó una clara recuperación. Sin embargo, surgieron múltiples problemas cuando la capacidad de gasto del estado fue agotada.

Uno de los primeros problemas que se percibieron fue que, a pesar de la reactivación económica, el Estado no generaba mayores ingresos. Un segundo problema que también se manifestó fue la limitación de la capacidad de la industria nacional. En otras palabras, no había inversión para instalar nuevas capacidades y seguir con el crecimiento. En ese momento, el Estado se dio cuenta de la importancia de la inversión y del préstamo extranjero.

Por otro lado, las políticas económicas tomadas por el gobierno provocaron una desconfianza en la población, lo cual llevó a que muchos ciudadanos cambiaran sus intis por dólares. De esta manera, se llevó a cabo la devaluación del Inti.

PRIMEROS INDICIOS DE UNA POSIBLE CRISIS

En el año 1987, se denotaba claramente el peligro de una crisis en la balanza de pagos y en las reservas internacionales. A pesar de ello, el Estado Peruano siguió confiando en un crecimiento económico hasta 1988. Al mismo tiempo, se vio obligado a devaluar el inti y elevar los precios y sueldos.

Durante ese periodo, la política económica que aplicaba el Estado se contradecía a si misma. El gobierno buscaba contacto con empresarios importantes, los cuales se hacían llamar los 12 apóstoles (eran una docena de grupos empresariales). El objetivo de ese contacto era persuadir a esos grupos empresariales con el fin de invertir en el desarrollo de la capacidad productiva del país.

En medio de esas decisiones, el Gobierno tenía la necesidad de aumentar los ingresos del Estado y supuestamente obligaba a las empresas a realizar un préstamo de dinero. A causa de ello, el Gobierno provocó reacciones negativas en el sector empresarial. Con todos los datos mencionados en líneas anteriores, se evidencia que las decisiones del Gobierno eran improvisadas y se estaba perdiendo el control del caso. Una fatal consecuencia que agudizó la terrible situación que afrontaba el gobierno fue la renuncia, en junio de 1987, del Ministro de Economía Luis Alva Castro. En ese momento, todos se dieron cuenta que una crisis se acercaba, ya que la inflación ya era agobiante.

ESTATIZACIÓN DE LA BANCA

En el mensaje a la nación del 28 de julio de 1987, se evidenció la ruptura del gobierno de García al anunciar la toma de control del principal mecanismo de captación y distribución de capitales: el sistema financiero. En otras palabras, García declaró el intento de estatizar los bancos, las financieras y la compañía de seguros. El presidente sustentó su decisión a través del siguiente argumento: “Los empresarios se benefician de la política heterodoxa, pero no toman conciencia de la importancia de la inversión en el país y que, además, se dedican a especular y a sacar sus capitales al exterior”.

La decisión que quería tomar el presidente García tuvo sus seguidores (Izquierda Unida) y detractores. Uno de los segundos fue el escritor Mario Vargas Llosa, cuyo papel fue ser cabeza del Movimiento Libertad. Este movimiento, agrupados por sectores altos y medios de la población, se opusieron rotundamente al proyecto de García y realizaban sus reuniones en la histórica Plaza San Martín.

Por otra parte, mediante la ley N° 24723, el Congreso aprobó la expropiación de hasta el 70% del capital de los bancos y financieras en poder del sector privado, del 30% de las acciones de los bancos regionales, y del 15% de las acciones de las compañías de seguros. Sin embargo, a pesar de todos los esfuerzos, esta ley no se aplicó. De las treinta comisiones interventoras proyectadas, se nombraron siete y solo dos se activaron. Estas comisiones fueron la del Banco de Crédito y la del Banco Wiese. De esta forma, se dice que la estatización de la banca fue otro de los fracasos del gobierno aprista.

CRISIS ECONÓMICA (1988-1990)

A finales de 1987, la crisis ya se evidenciaba. Se produjo un aumento brusco de la inflación (114.5% en diciembre de 1987) y, por ende, la producción y la reactivación económica se habían estancado. La balanza de pagos también estaba siendo afectada y tenía un saldo negativo de 521 millones de dólares.

Una de las medidas adoptadas por el Gobierno fue, a causa de la falta de dólares, devaluar el inti en 24% en octubre de 1987. Durante esa época se dieron los llamados “paquetazos”, lo cual generaron una recesión económica. Por ello, García recurrió al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial en busca de préstamos. El modelo heterodoxo había fracasado y ahora el Gobierno aprista se orientó hacia políticas ortodoxas. Los organismos financieros, al cual recurrió García, exigieron un pago previo de las moras, las cuales ascendían a 1500 millones de dólares. Ya para ese entonces, las reservas internacionales eran negativas. Todo el país se estaba sumergiendo en un caos.

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