LA OLA DE LA DEMOCRACIA

...

Pero nunca nos hemos preguntado qué es eso que nos tiene tan pasivos y segados en el mundo de la supervivencia, pues bien en la película la “ola” también se desarrolla un punto muy importante que son los medios de comunicación y la publicidad, que son de gran ayuda a la hora de atraer gente (masas), tan solo con publicar en las redes sociales, televisión y panfletos, se puede realizar muchas cosas a gusto de quien las necesite, estamos en una sociedad consumista, que solo nos importa la supervivencia y no vemos más allá de las cosas que nos quieren transmitir.

En pleno acogeo y progreso de las tecnologías de la comunicación que solo han jugado un papel muy importante en la facilitación de engaños y adoctrinamiento de las masas en ideologías interesadas difundidas por las redes globales de comunicación. Los medios masivos cosechan influencia en cada uno de nosotros “informándonos” de todo lo que ocurre en el mundo, creando en nosotros una opinión “critica” basada en todo a lo que a ellos le conviene, quienes con toda la intención desvergonzada nos dominan sin compasión, ¿pero quienes son realmente las mentes dominadoras?, el “dominio” de los medios es entonces el dominio de quienes lo manejan, en una sociedad capitalista o neoliberal el dominio, como los medios, son de la burguesía.

La confianza que le hemos dado a los medios de comunicación, ha causado que los grupos dominantes accedan a ellos como una forma más de control y represión, adueñándose de toda la información, entregándonos solo lo que les conviene y lo que venden. Sumergiendo a la sociedad a un estado de dominación inquebrantable, inyectando en esta, una falsa idea de la verdad; una ideología de consumo, construyendo una nueva cultura basada en la desinformación, en la despreocupación del dominado de saber más allá de lo que estos quieren transmitir.

De esta circunstancia nace el hecho de que hablar de “democracia” no es censurar los medios de comunicación para bienes comunes, tampoco es esclavizar a las personas en horarios de trabajos intensos, siempre la burguesía ha utilizado los pretextos más variados para controlar los países más débiles y explotar sus riquezas. Todo mundo habla de la guerra que se está viviendo constantemente en el medio oriente, pasan en las noticias, pasan a percibido, pero a nadie le ha causado curiosidad saber la verdad de la situación, y es que el detonante de esta guerra no es la terminación de grupos revolucionarios, por favor, es la riqueza, el dinero, el petróleo, el poder, por eso USA saca partido hablando de democracia y en la defensa de los derechos humanos y como el pueblo es ignorante todo lo se lo cree.

De la misma manera estamos padeciendo una dictadura que nos tiene dominados y esclavizados, y no es extraño decir que la dictadura ocurrió años anteriores, pero si se puede comparar con el mundo de hoy, que está siendo dominado por el dinero y por unas poquitas personas que creen que la riqueza es felicidad, por eso argumenta Bentham que “el exceso de felicidad del más rico no será más grande como el exceso de riqueza”, por eso el exceso de felicidad será alcanzado al máximo cuando todos los individuos posean igual riqueza.

Es por ello que al edificio de la democracia también se le puede llamar el de la desigualdad, y es que cada día va creciendo más la desigualdad sin que nadie pueda hacer algo, de modo que el ciudadano se encuentra situado en la base de una pirámide en cuya cima está el poder económico, inalcanzable; luego, situado en medio, el poder político, representado por los parlamentos y gobiernos, se supone que para mediar, y debajo, a veces aplastada por tanto peso, la ciudadanía.

Y es que el funcionamiento correcto de un gobierno es velar por las necesidades del pueblo y los derechos humanos, pero esto solo se queda en las constituciones políticas y en las organizaciones mundiales de derecho, ahora bien, las tratas de personas, la utilización de los niños en las industrias, que en vez de estar estudiando, jugando con sus amigos, se desempeñan ya en trabajos que exigen gran esfuerzo, solo para conseguir unos cuantos centavos para su supervivencia, trabajos mal pagos, todo esto para abaratar costos de producción en un mundo donde prima la injusticia social y el poder.

En conclusión,