PERSPECTIVAS DE LA LIBERTAD EN LOS MUNICIPIOS DE OAXACA

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En materia de educación En Oaxaca, la ENSANUT 2012 identificó que 94.2% de los niños de 6 a 14 años asistía a la escuela, en tanto que entre los individuos de 15 a 24 años este porcentaje bajaba a 39.0%, el problema en Oaxaca no es de hoy pero podemos hacer referencia a aquella minuta de 1992 en que se entregó de pies a cabeza el control del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca a la sección 22 de la CNTE teniendo como resultado plazas heredadas, desvíos de fondos, ineptitud en la función pública y que culminó con un mismo común denominador “la educación fallida en Oaxaca”.

En Oaxaca, 20.6% de la población no contaba con protección en salud, cifra ligeramente inferior a la nacional (21.4%). En la ENSANUT 2006 se había identificado que 64.0% de la población no contaba con protección en salud, por lo que la cifra para 2012 representa una reducción de 67.8% entre 2006 y 2012. La mayor proporción de protección en salud en Oaxaca se dio por el SPSS (identificado como Seguro Popular), que cubría a 63.0% de la población, cifra mayor a la nacional, que fue de 38.5%. La cobertura alcanzada por el SPSS representa un incremento de 751.4% en relación con la cifra registrada en 2006 (7.4% en 2006 frente a 63.0% en 2012). Entonces si estamos dentro de la media nacional, debemos preguntarnos porque es Oaxaca el estado donde las mujeres tienen que dar a luz en la vía pública.

En materia de justicia tortura, la falsa incriminación, el encarcelamiento y la aprehensión ilegal son muy recurrentes en Oaxaca, precisamente por su gran presencia indígena y sus mayores niveles de pobreza que tienen como resultado a que en muchas ocasiones al ser detenidos no cuenten con un abogado bilingüe que los apoye durante el debido proceso. La detención arbitraria, la violación a los derechos humanos a la seguridad jurídica, a la libertad personal y de transito fueron el resultado de movimientos sociales que se han dado en el estado, 2006 con el movimiento de la APPO, la lucha constante de la etnia triqui y el reclamo de la sociedad civil en general, todos teniendo el abuso de autoridad que se da en los municipios de Oaxaca. De acuerdo a una nota del periodista Pedro Matías, en el año 2013 y según datos de la COTAIPO se registraron en Oaxaca 2375 manifestaciones y marchas en nuestro estado. Manifestaciones que han venido acrecentándose en la entidad y que muestran el hartazgo de la ciudadanía.

La élite que ocupa el poder en Oaxaca ha mantenido el control sobre los procesos políticos y económicos bajo mediante una cultura regional demagógica que habla de igualdad mientras que le niega los derechos a las personas a quienes la Constitución supuestamente protege—las mujeres, los indígenas, los pobres y otros grupos marginalizados—también niega el acceso a los recursos, espacios públicos y la legitimidad que tales grupos necesitarían para ejercer tales derechos.

Debemos empezar por los municipios, debido a que es la forma de gobierno más cercana a la gente, es entonces que los funcionarios municipales deben mostrar una mayor preparación para poder ocupar un cargo. Si bien es cierto que el municipio libre debe cumplir sus funciones, realmente queda muy lejos de lograrlo. La función pública debe garantizar el goce y respeto de los derechos humanos en cada ciudadano.

Tenemos que pensar también en modelos de desarrollo que logren crecimiento económico, pero que se redistribuya el ingreso y se respete la naturaleza, porque el sur sureste tiene un potencial muy importante, por ejemplo hídrico, de bosques, de costas, de lagos.