Trainspotting review - Crítica

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A lo largo de la historia, los jóvenes cineastas se han manifestado en contra del organismo de muchas maneras. Muchos movimientos y grupos de jóvenes con una idea cultural a transmitir han salido en base a la crítica social. El Free Cinema, El anti-heimat film, El núcleo intelectual de New York y sus cines de arte y ensayo…

Trainspotting es una de esas obras. Una obra crítica con la sociedad. Una representación a gran escala de realidades que no deberían esconderse.

La película mezcla movimientos de cámara bastante sucios (sobretodo cuando se trata de visiones o efectos de la droga) con grabaciones casi documentalistas que ocupan casi todo el metraje. La crítica y el discurso también están presentes. ¿No nos recuerda esto a un pasado reciente? De hecho muchos historiadores han calificado a Trainspotting como un hijo del Free Cinema de los años 90’.

Tanto los personajes, las localizaciones, la música o el vestuario remiten a una época, y muchas de las características de esta se ven reflejadas en los elementos. Es cierto, que dentro de cada época hay millones de puntos de vista. En este caso tratamos con clase baja, suburbios, familias irresponsables y turbias y gente descarriada. Jóvenes revolucionarios y a la vez faltos de iniciativa, un mix de caos y cúmulo de casualidades que los llevan a vivir bajo sus ideales, pero de una manera muy precaria.

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Representativos de su nación, el paisaje verde y extenso de luces tenues y ambiente húmedo abundan a lo largo de la película, de hecho marcan el cambio entre el pueblo y la ciudad. Dentro de la película la heroína se ancla a los suburbios, a la descentralización. Vivir en el centro tenía más caché, más oportunidades, etc. La gente rica, y los hijos de la gente rica eran aquellos que estudiaban en grandes universidades, tenían grandes propiedades, grandes coches y grandes sueños y aspiraciones. La gente pobre vivía en los suburbios y consumía drogas.

Renton, cegado por esta clase de vida se da cuenta de que quizás la droga no es el camino que necesita. El personaje principal de la novela, la película y la mentalidad de todos aquellos que le rodean decide tener sueños, estabilidad y un trabajo. Es así como llega a la conclusión de que debe mudarse a la ciudad.

Se autodefine como "lo más bajo de entre lo más bajo, la escoria de la puta tierra, la basura más servil, miserable y más patética jamás salida del culo de la civilización" – Mark Renton

De la mano del boom económico también iba la gran burbuja inmobiliaria. Marc Renton, en búsqueda de su nuevo destino acaba trabajando en una de ellas. La entidad le proporciona una gran oportunidad en el momento en el que le cede un piso que aunque precario no supera los desperfectos de su vida anterior. Marc vive tranquilamente en ese piso, mientras que sus amigos se estancan en lo que conocen. Todo parece ir demasiado bien hasta que uno de los amigos de Renton le hace una visita bastante indefinida. La experiencia termina en una recaída.

De alguna manera el pasado ha venido a perseguirlo y le ha atrapado. Huir de la escena del crimen ha sido una solución fácil. Taparse los ojos con vendas ha sido otra, pero cuando todo se junta delante del protagonista nos damos cuenta de que no ha cambiado, sigue siendo el mismo. Una idea bastante modernista que deja de lado los finales felices y los cuentos de hadas para volver a esta realidad del Free Cinema de la que hablábamos.

La música, los músicos minuciosamente escogidos para dar ambiente a estas escenas en todo caso son personajes cliché del mundo de las drogas. Son personas que en sus discursos también difundían su adoración hacia ellas y como la heroína, entre otras sustancias, no era tan mala. Y es que en eso reside la película. Consiste en la aceptación de todas las sustancias que te provoquen libertad y en tratar este tema como cualquier otro, no como tabú. Entran en los diálogos y se explican con detalle, tanto verbal como audiovisual. De hecho, muchas de las escenas famosas de esta película son aquellas que, con metáforas, intentan explicar al público las sensaciones que la heroína provoca.

Hay una anécdota graciosa y a la vez contradictoria que trata de cómo Ewan McGregor le hizo una propuesta al director que consistía en probar la heroína antes de empezar el rodaje para saber que es lo que realmente se siente y poder interpretar mejor su papel. Ewan aseguró que nunca hizo tal prueba ya que el director se negó por completo. La parte contradictoria de todo esto es que Ewan, como actor famoso y por lo cual representante de una sociedad capitalista no había entrado ni tenía contacto con substancias que se alejan de su clase social. Aun así su interpretación es impoluta.[pic 2]

Conclusiones hasta ahora: Trainspotting fue un puente entre una época de censura y el hoy en día. Destacó por ser atrevida y directa y por poner en la gran pantalla todos aquellos temas que gran parte del público aun no estaba preparado para ver. Por ello recibió muchas críticas destructivas pero con el paso del tiempo se ha reconocido su grandeza. Ha sobrevivido al paso del tiempo como una película de culto por su trasfondo y autoría.

Entramos a hablar de T2 Trainspotting con la pregunta que todos nos hicimos al ver sus primeros anuncios, ¿porqué después de 20 años?

No está muy clara cual es la respuesta ya que en cierto modo 20 años no es ni tanto ni tan poco. Aunque justificado (mas o menos) por guión, la realidad es que las críticas apuntan a una visión muy pesimista de los motivos. Una petición monetaria, alejada del honor que pueda rendir a las bases del film.

Podríamos definir los valores añadidos de Trainspotting como el tratamiento abierto de las drogas, la representación de los jóvenes rebeldes, la realidad sin filtros en gran pantalla y el salto a la fama de Ewan Mcgregor. Por otro lado los contras residirían en las críticas en contra de estos tres primeros puntos por parte de una sociedad muy clasista. En este caso, los valores añadidos de T2 Trainspotting serían escasos: la segunda parte de un film de culto y la reputación del director y los actores. Los contras completan una lista bastante larga.

Cuando aspiras a tales expectativas y debes complacer a distintas clases de públicos es muy difícil acertar con el producto que quieres producir. Las posibilidades de triunfo de este film se basaban en la reputación que ya le venía dada por la anterior. Aun duplicando su coste en beneficios, la película no llegó a triunfar del todo por no ser fiel a lo que habían vendido.