Revoluciones industriales.

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A pesar de que a la edad media se le denominó “era del oscurantismo” si existieron inventos importantes como el reloj en 1286 y el mejoramiento de la imprenta por Johann Gutenberg en 1450 inventada originalmente por los chinos.

Personajes como Adam Smith que creó los factores determinantes en la formación del capital, desarrollo de la industria, división del trabajo y que propuso la doctrina de laissez-faire donde impide la intervención del Estado y asegura que una “mano invisible” lleva al individuo a hacer lo mejor para la sociedad, Eli Whitney quién con su máquina desmontadora de algodón revolucionó la industria textil de esa época y por supuesto a James Watt que perfeccionó la máquina de vapor con la creación del motor rotatorio y de precisión propiciaron la energía mecánica y los métodos necesarios para la aparición de una nueva era mecanizada a la que se llamó “Revolución industrial”.

Primeramente debemos de definir lo que es una revolución industrial, se denominó revolución industrial a la serie de cambios políticos, económicos, social y espiritual que se produjeron a finales del siglo XVIII y que iniciaron en Inglaterra y que fueron un verdadero cambio y no una continuación del sistema anterior. A las revoluciones industriales también se les denominó “Revoluciones científico tecnológico (RCT)”.

La primera revolución industrial inicia en el siglo XVIII (1750-1848), esta inicia principalmente por la caída del sistema feudal, el capitalismo comercial, comercio marítimo y el progreso de la industria minera y metalúrgica, en la revolución industrial se cambia el sistema de trabajo artesanal por las máquinas de vapor que requieren personal más calificado y menos obrero creando productos más baratos y que junto con el mejoramiento del transporte y nuevas rutas marítimas ocasionaron un aumento de los mercados extranjeros y una división internacional del trabajo. Los antecedentes de la revolución son: la creación de nuevas escuelas con la impartición de materias como física y química, nuevas máquinas que facilitaron la vida del hombre y que requirieron nuevas fuentes de energía, crecimiento demográfico con migración de la gente de los campos a la ciudades aunado con una alta natalidad y baja mortalidad, matrimonios más jóvenes sustentados por un salario, mejoramiento de las condiciones de higiene, un nuevo sistema el capitalista donde el salario es el elemento del sistema de producción, la revolución agrícola y la formación de colonias que proporcionaron la materia prima para la industrias y el comercio.

La revolución industrial inicia en Inglaterra debido a sus medios de trabajo, comercio, su apoyo institucional y cambios económicos que ocasionaron que se enriqueciera la clase media del siglo XVIII llegando a ser la clase social comercial más importante de Europa. De hecho en Inglaterra se llegaron a establecer hasta 100,000 telares mecánicos convirtiéndose en la gran potencia textil del mundo. Inglaterra no sólo contaba con un sistema económico y militar idóneo para la aparición de la industria sino que poseía una gran marina comerciante y recursos naturales importantes especialmente de hierro y carbón que eran la base para la producción de aquél entonces. Por otro lado no se vio afectada por las guerras napoleónicas que devastaron a Europa.

Estados Unidos fue y es uno de los países más industrializados. Aunque después de la independencia el 90% de la población estaba dedicada al campo sin embargo llegó a ser uno de los países más industrializados ya que se instalan industrias de tipo textil, metalúrgica y de calzado gracias a que poseía grandes recursos naturales como una gran fuerza hidráulica para las máquinas, madera, hierro, carbón entre otros recursos naturales, así como un creciente capital e inversiones de otros países, creación de tarifas protectoras para la industrias, introducción de maquinaria e inventos americanos como la máquina de cardar y el acero. Por último el gran desarrollo ferroviario que conectaba la costa del atlántico con el interior del país provoca un gran avance en la industria, comercio y transporte del país.

La segunda revolución industrial inicia a finales del siglo XIX (1880-1945) y es simplemente una continuación de la primera, sin embargo ésta se caracteriza porque va acompañada del desarrollo del capitalismo con sus periodos de auge y de crisis.

Por otra parte el crecimiento poblacional de Europa en el siglo XIX los obligó a importar alimento y materias primas principalmente de Rusia y Estados Unidos lo que ocasionó un gran avance agrícola y de los medios de transporte. El crecimiento de la población fue en gran medida gracias a los avances en la medicina descubriendo al agente causal de las enfermedades y la mejora de higiene.

Durante la segunda revolución industrial aparecen 2 nuevas fuentes de energía que fueron la electricidad que sustituye al vapor gracias a la creación del dínamo por Gramne, Edison y Deprez creador de la alta tensión y el petróleo que aunque ya se conocía sus aplicaciones sólo se descubren a partir de la segunda mitad del siglo XIX como consecuencia del desarrollo de nuevas máquinas especialmente el motor de combustión interna por Daimler-Benz y el motor de diesel por Diesel. Paralelamente a la creación de nuevas fuentes aparecieron nuevas industrias: la industria eléctrica, la petrolífera, la química la cual favorece a la agricultura gracias a los abonos, a la alimentaria con los conservadores, a la textil con los colorantes, a la militar con los explosivos entre otras, otra industria que proliferó fue la industria metalúrgica la cual produce grandes cantidades de acero a bajo costo y por último está la industria alimentaria que floreció gracias a al capacidad de congelar y conservar los alimentos. Sin embargo las industrias tradicionales siguieron en pie como la siderúrgica, la textil y la papelera que florece gracias a las máquinas y a la industria química.

Para ese entonces las potencias más industrializadas son: Gran Bretaña, Alemania, Francia, Estados Unidos, Japón, España y Rusia.

La tercera revolución industrial inicia en 1945 y se extiende hasta nuestros días. Ésta revolución se dice que es una verdadera revolución de inteligencia ya que el 85% de los científicos de la historia están vivos en la actualidad y de hecho el conocimiento científico se dice que se duplica cada 5 años. Las principales innovaciones tecnológicas en ésta era se dan en la energía nuclear, informática, robótica, biotecnología, telecomunicaciones y ciencias del espacio.

Junto con la revolución industrial tuvieron que surgir nuevos métodos de administración.