Desplazamiento y probreza.

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Lo anteriormente mencionado por el ministerio de educación resulta ilógico en el contexto descrito anteriormente en donde se expresan las condiciones tan lamentables por las que están pasando estos niños, porque es bien sabido que el entorno y la protección, salud y nutrición además de la educación, son fundamentales para un sano crecimiento, entonces, ¿Qué hace el ministerio para hacer valer estas palabras en la zona bananera? ¿Ha elaborado un plan rescate, por decirlo de algún modo, para ayudar a estas criaturas?, es necesario analizar .esta cara de la moneda.

Para enfatizar más en la problemática a investigar, es preciso detallar de un modo más puntual cada uno de los sectores y características que de él surgen.

Invasión 4 caminos

Algo que es muy importante para cada ser humano es la vivienda en la cual ha de habitar, en la invasión CUATRO CAMINOS se encuentran alrededor de 35 casas, cuya infraestructura, en su totalidad, se está en pésimas condiciones; las casas o ranchos están construidos con bambú y barro y como techo tienen unas palmas que los protegen solamente del sol pues en invierno las lluvias se convierten en una pesadilla para estas familias. Algunos de los ranchos que se encuentran en esta zona incluso no cuentan ni con cuatro paredes algunos de estos tienen una pared hecha de barro y lo que las rodea son solo palmas.

Es deprimente ver esta situación en un país como Colombia que proclama igualdad y equidad para todos, que tiene como objetivo ser el país más desarrollado en materia educativa de américa latina y que “lucha” por eliminar la pobreza que empaña el buen nombre de la nación, mientras niños no solo en la zona bananera pues esto es algo que también sufre la guajira, se mueren de hambre y que de igual manera no tienen la oportunidad de entrar a una institución educativa que por ley debería brindarles la educación de calidad y pertinente que necesitan para superar la pobreza de la que llevan sufriendo incluso desde el vientre

Estas viviendas no cuentan con baños, ni cocinas ni camas, las familias duermen en colchonetas en mal estado, las cuales las colocan en el suelo, el nivel de hacinamiento también es alto, cada familia está compuesta entre cinco y seis personas que deben compartir el poco espacio que el rancho improvisado les ofrece.

En cuanto a la economía, notoriamente baja por la descripción hecha líneas arriba, depende del ingreso diario que los padres lleven a el hogar, estas personas trabajan en oficios varios sin tener un ingreso superior a los diez mil pesos por día, incluso, hay ocasiones en que no se genera ingreso afectando aún más esta condición.

La escasa economía de estas familias influye en el empeoramiento de otros factores como lo alimentación, además, en el cubrimiento de gastos de productos necesarios para el cuidado del cuerpo y prevención de enfermedades que vienen relacionadas por la falta de ellos; como el ingreso no supera los 10 mil pesos por día, esto por lo mucho le alcanza para alimentarse un poco solo dos veces al día, pero como también hay momentos en los que no se gana dinero, los niños y demás de la familia están acostumbrados a dormir sin haber comido nada en todo el día, por lo que estos niños presentan bajo grado de peso, siendo casi imposible el buen desarrollo físico y cognitivo de ellos

“La desnutrición durante la infancia todavía constituye un gran problema de salud en entornos de bajos recursos. Aproximadamente una tercera parte de los niños menores de cinco años residentes en países en vías de desarrollo padecen retraso en el crecimiento (baja estatura respecto de su edad) y también grandes proporciones de niños carecen de uno o más micronutrientes.” (UNICEF, 2016)

Esto demuestra que el estado por el cual pasan niños y niñas de este territorio, la padecen de igual forma muchos más alrededor del mundo, en el caso que nos interesa investigar, de nada vale que se tenga información de la falta de alimento de los infantes si no hace nada al respecto. Para el desarrollo íntegro del niño es fundamental una alimentación adecuada que le permita tener un sano crecimiento, el estado debe implementar estrategias urgentes para darle solución a esto y poder salvar la vida de todos ellos, pues pueden llegar a tener alto grado de desnutrición poniendo en riesgo sus vidas.

Continuado con la descripción de esta invasión, se encuentra que no cuentan con ninguna clase de servicios (electricidad, gas, agua potable), en cuanto a la electricidad, para poder iluminar los ranchos y el terreno donde habitan, utilizan velas y mechones, como no tienen este servicio por ende no cuentan con una ventilación dentro de las viviendas, lo que genera que los sancudos ese lugar se concentren más en ellas y los niños sufran de múltiples picaduras afectando su salud.

Con respecto al gas natural, tampoco son beneficiarios de este servicio lo cual los obliga a cocinar en leña, utilizando también enseres domésticos en mal estado y exponiéndose a riesgos como quemaduras a los que son más propensos los niños por el carácter exploratorio característico de esta etapa de la vida que los conduce a querer analizar todo cuanto ven.

El agua que consumen no es apta, trayendo consigo enfermedades como EDA ( enfermedad diarreico aguda) que principalmente se transmiten por el agua contaminada y alimentos mal lavados. El suministro de esta agua proviene de caños y la utilizan para todo lo necesario.

Todo lo anterior muestra el abandono que sufren los habitantes de esta invasión, pero no es a lo único que están expuestos, otros peligros los envuelven, como el que surge al no tener baños donde hacer sus necesidades lo que los obliga a realizarlas en el monte, exponiéndose a picaduras de culebras ( Que son comunes en el terreno) o incluso violaciones por parte de los drogadictos que también conviven con ellos.

A lo anterior se suma la distancia que existe entre esta invasión y el puesto de salud, que queda a una hora en moto, pero como no cuentan con dinero suficiente para transportarse hasta allí, complica más el desplazamiento, por lo cual muchas veces prefieren no ir hasta el centro de salud y lo hacen solo en situaciones ya de extrema emergencia.

En cuanto al ámbito educativo el 90% de niños y niñas no van a la escuela por razones económicas y porque éstas también se encuentran a distancias considerablemente largas, las condiciones de marginidad tan altas en esta invasión no permiten a los niños saber si quiera que es un año de estudios, lo que imposibilita una visión de superación de pobreza en ellos, por ende, no permitirá el avance de ellos ni de las