El ferrocarril como un medio de transporte requería la explotación de quebracho colorado, abundante en Santiago del Estero, su madera tan dura como un metal

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FORMACION DE LOS PUEBLOS DEL CHACO: El latifundio, la explotación forestal y los ferrocarriles formaron una unidad inescindible. El obraje necesito que en cada de estación del ferrocarril, lugar de embarque de los productos forestales, y donde la prostitución, las fondas, el juego terminaban con la salud moral y física de los hacheros, que luego de meses de trabajo bajaban a los pueblos.

LOS PLACERES EN EL CHACO: Suncho Corral, QUimili, Tintina,etc son o han sido, en el apogeo de los trabajos forestales, el lugar de disipación de la población maderera. Los modernos señores feudales de la industria forestal que vivían en sus mansiones, no les interesaba la form

acion de pueblos estables con viviendas dignas para sus empleados, comerciantes honestos, y autoridades pagadas por el Estado que velaran por el cumplimiento de las leyes. Por el contrario tenían lotes para evitar la competencia a las proveedurias de los obrajes. Eran preferibles las fondas y prostíbulos que las escuelas en los pueblos.

MISION SOCIAL DE LOS GRANDES PROPIETARIOS: Los obrajes fueron alejándose de las vías. El bosque fue de a poco extinguiéndose, los trenes siguieron a los obrajes extendiendo sus vías, en ramales secundarios. Los pueblos que se habían formado, poco a poco se fueron despoblando. Solo quedaron mujeres, viejos y niños, que se tendían al paso del tren pidiendo agua. Ni la nación ni la provincia se movieron a resolver el problema único del Chaco, la falta de agua. De esta manera con las dos expropiaciones realizadas por los dos gobiernos radicales y las ventas de los lotes por parte de los propios latifundistas, que comprendieron su misión social recién cuando el bosque estaba extinto, se formaron los pueblos del Chaco Santiagueño al lado de las estaciones de los ferrocarriles. Se reemplazaron los boliches y prostíbulos por humildes casas para aquellos que no partieron en búsqueda de bosques vírgenes, pero los habitos agrícolas pastoriles, (al convertirse en hacheros) se habían perdido.

EL DEBER PRIMERO, EL DERECHO DESPUES: AUSENCIA DE PROTECCION LEGAL: En los obrajes no se aplicaron las leyes laboras, sino mas bien las leyes que dictaban sus dueños y sus subordinados. El trabajo era a destajo, por ende no existía ni la jornada laboral ni descanso obligatorio. Las mujeres y niños también trabajaban y por lo general no recibían paga por su labor. Según Olmos Castro, haciendo referencia a la ley de accidentes laborales que no resultaba efectiva en la provincia, debido a que solo se habían registrado 6 denuncias, a pesar de los altos índices de accidentes, fallecimientos en los obrajes. Esto se debía a que en quien debía indemnizar a los trabajadores, o pagaban un porcentaje menor o directamente no lo hacia, apoyados desde luego por sus influencias políticas. La falta de control del estado, permitía la existencia de estos abusos. El comisario y el juez de paz, por lo general realizaban tareas para el patrón. Las pocas denuncias eran automáticamente archivadas.

Durante el gobierno de Santiago Maradona (1928-1930) se reglamentaron las siguientes leyes:

- Ley de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales,

- Ley 11273 referida al pago del sueldo en moneda nacional.

- Ley sobre el trabajo de Mujeres y Menores

- Ley sobre el trabajo nocturno en las panaderías

- Ley sobre las jubilación de obreros… Entre otras leyes.

También se crearon las bases para el cumplimiento de las leyes, al crearse el Departamento Provincial del Trabajo.

La paz para los trabajadores duro poco tiempo, con la caída del Yrigoyenismo, se volvió a la época tortuosa del sector obrero. Es así que entre los dueños de los obrajes y el estado provincial, se tejieron acuerdos por los que se beneficiaban mutuamente, siempre a costas de los pobres trabajadores.

El peronismo, aparte de llegar con su fiscalización estricta del cumplimiento de las leyes al rincón más apartado del bosque, realizo lo que el Yrigoyenismo no pudo hacer: la sindicalización de los hacheros. A partir de 1945, comenzaron a organizarse los sindicatos forestales por toda la provincia. En 1947, nació la Federación de Obreros Santiagueños de la Industria Forestal (F.O.S.I.F) que en 1948, firmara el primer convenio colectivo de trabajo para el obrero del bosque.

De los 136 obrajes con mas de 40.000 obreros que existían en la provincia a comienzo del siglo hoy casi no queda nada.

ESTADISTICAS: Santiago contaba a comienzos de la explotación forestal con una extencion de 10.792.200 ha. De las que solo quedaron unas 700 mil ha. Mas de 9millones de ha fueron irracionalmente explotadas. A parte de los que representa la destrucción del quebracho blanco, el agarrobo negro y blanco y otras especies se exterminaron.

Los durientes elaborados en Sgo, han sostenido la totalidad de la red ferroviaria de todo el país, durante 30 años. Los postes de quebrachos que fueron utilizados para alambrar las grandes estancias de la pampa, es más difícil de medir, pero los registros hablan de 64 millones de piezas.

La enorme riqueza no reinvertida en la provincia, consistió en la prueba más acabada del empobrecimiento de la provincia.