España siguió siendo una nación preindustrial, el subdesarrollo de la economía española explica el motivo de que sus exportaciones representan el 50% de las de Europa occidental.

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Países de menor dimensión

En Europa occidental, varios países de menor dimensión relativa participaron inmensamente en el proceso de industrialización y alcanzaron altos niveles de desarrollo. Bélgica, Holanda y suiza alcanzaron los ingresos más altos incluso superiores a los de las más grandes potencias continentales: Alemania y Francia.

Holanda la menor industrialización relativa era compensada por una avanzada producción agropecuaria.

Holanda, una de las naciones fundadoras del primer mundial, Bélgica, inauguro un destino imperial. Dado su alto nivel de industrialización y desarrollo, estos tres países, tuvieron una participación significativa en las redes de la globalización del periodo. En 1913, las inversiones en el exterior de Bélgica, Holanda y suiza representaba el 12% de las inversiones privadas directas mundiales.

Entre los países escandinavos, Dinamarca era el mayor ingreso per cápita, con un nivel superior al promedio de Europa occidental. Su avanzada agricultura coexistía con una base industrial considerable, noruega y Finlandia eran los países relativamente menos industrializados y con menor ingreso per cápita relativo. Sus exportaciones representaban menos del 3% de las exportaciones mundiales.

Solo Checoslovaquia alcanzo un nivel apreciable de industrialización y desarrollo.

LOS DOMINIOS BLANCOS BRITANICOS

Canadá y Oceanía fueron incorporados a la globalización del segundo orden mundial bajo la hegemonía británica. Tenían tres rasgos en común: la riqueza y diversidad de sus recursos naturales, una población nativa reducida y de bajo nivel cultural, y la inexistencia de la esclavitud.

Estos dominios fueron destinatarios importantes de las migraciones. Los dominios blancos fueron también destinatarios de alrededor de un tercio de las inversiones británicas en el exterior.

Esta transferencia masiva de recursos contribuyo a un intenso desarrollo, en los dominios blancos tuvo lugar un proceso de desarrollo auto central fundado en un amplio acceso de los inmigrantes a la propiedad de la tierra, la diversificación de la producción y liderazgos empresarios con sus propios objetivo de acumular capital e incorporar tecnología.

La distancia entre gran Bretaña y Europa genero una protección natural a la protección de Oceanía. En Australia, gran Bretaña abandono sus preferencias imperiales y cada una de las provincias mantuvo políticas comerciales autónomas. En Canadá, la vecindad con estados unidos permitió acceder a un mercado gigantesco en el marco de un desarrollo nacional diversificado y complejo.

Este desarrollo permitió una rápida expansión de las de las exportaciones de productos primarios y su industrialización (industrias textil, alimentaria, de papel la producción metalmecánica y química) de este modo en 1913, los dominios blancos británicos figuraban entre los países con mayor producción industrial.

El desarrollo de estos países se fundó en el rápido de desarrollo del mercado interno, y las exportaciones.

CONCLUCIONES

Las naciones ibéricas quedaron atrapadas en sus problemas internos, los cuales explican su declinación en el transcurso del Primer Orden Mundial. Los países mas exitosos fueron los europeos de menor dimensión, Bélgica, Holanda, suiza, Dinamarca y Suecia se incorporaron al proceso de transformación desencadenado por los ambos tecnológicos.

Los dos grandes países países europeos considerados, Italia y Rusia, presentan situaciones muy distintas. Italia al final del periodo, un país semiindustrial con grandes desequilibrios intrarregionales. Sin embargo su política y fuertes liderazgos empresarios permitieron mejorar progresivamente, con la decidida intervención del estado. La participación italiana en el reparto de África trajo un factor de retardo del desarrollo del país.

Rusia, el país más atrasado de Europa, siguió atrapado en su conflictividad interna. Su inserción subordinada en la globalización fue un aspecto marginal de una realidad signada por una dimensión gigantesca, la servidumbre de gran parte de la población y el atraso cultural y económico.

Los dominios blancos británicos, fueron dependencias coloniales, pero no económicas periféricas y subordinadas. Estos territorios generaron procesos de desarrollo auto centrado, liderados por gropos económicos de origen extranjero, así como sociedades integradas abiertas y participativas, se formaron bajo la influencia masiva de la globalización, pero lograron desarrollar sistemas de capitalismo nacional fundados en el aprovechamiento del mercado interno y del acceso al internacional. A su fin, en vísperas de la primera gran guerra del siglo XX, estos países figuraban entre los más avanzados de la tierra.