LA CRISIS AMBIENTAL, EL CRECIMIENTO ECONÓMICO, Y EL MARXISMO

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producción de mercancías con altas tasas entrópicas, sino que también acelerando los procesos de proletarización, de desigualdad social y de la separación del productor directo de sus medios de subsistencia. Frente a esta situación ¿qué diría Marx sobre la posibilidad de contar con un modelo de desarrollo sustentable? Que se entiende, por satisfacer las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las futuras generaciones, este señalamiento se explica, en parte, por las dinámicas que relaciona, por un lado, la necesidad de detener el despilfarro, por otro, acabar con la pobreza y, así, parar de golpe la destrucción de la corrupción y las actividades económicas, generando al mismo tiempo las condiciones para alcanzar una vida humana plena. Sin embargo, la interpretación consumista se combina, junto a la preocupación por erradicar la pobreza, como en los organismos internacionales, es continuar impulsando el crecimiento económico, sobre el desarrollo sustentable.

Según se expuso en el debate de la ayudantía, y en base a los 3 casos, la necesidad del capitalismo, es permanente de crecimiento y expansión. Es una de sus características centrales, pues es la única manera de ampliar el ciclo de acumulación para valorizar el capital y realizar niveles cada vez mayores de ganancia que, al reinvertirse, asegurarán un crecimiento sostenido de la rentabilidad, lo que supone ciertas garantías para sobrevivir frente a la feroz competitividad que se da entre los capitales. Lo que ha generado y profundizando cada vez más los problemas de contaminación, erosión, desertización, calentamiento, sobre-explotación, despojo, depredación y extinción de recursos naturales y humanos.

Ejemplo de ello, es el caso de la quema del gas residual producido en el proceso de extracción y procesamiento del petróleo, que conlleva grandes daños ambientales y a la salud o el caso de Vertidos mineros tóxicos que exterminó con la biodiversidad acuática y extensas áreas de valor natural. Estos elementos nos aproximan para sumergirnos en el terreno de lo real y concreto de los problemas ambientales, que expresa que reconocer el papel de la naturaleza en el capitalismo, esto quiere decir, su proceso se expande y modifica los referentes temporales y geográficos que enmarcan las narrativas dominantes de la modernidad.

Por otro lado, el comunismo, donde su orientación no está enfocada al estudio que favorezca el crecimiento económico ilimitado bajo la tutela de la propiedad privada y el individualismo metodológico, sino a su crítica y transformación. Su objetivo no está enfocado, a la generación de mayor riqueza, sino al cuestionamiento de que la mayor generación de riqueza, es a la vez un acto de relaciones de poder y de explotación. No solo del trabajo, sino de la naturaleza.

REFERENCIAS

Hobsbawm, E. (1998). El Manifiesto Comunista (ejemplar especial). Centro de Estudios del Movimiento Obrero y Socialista, (113).

Ediciones elaleph.com. (2000). Manifiesto Comunista, (s, ed.). Toronto, Canadá: elaleph.