LAS ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL (ETS)

...

tricomoniasis es responsable de la infección de 2 a 3 millones de mujeres anualmente en Estados Unidos (Am J. Obst. Gynec 2004, 191: 1103-12). La incidencia en Chile de estas enfermedades sigue el mismo patrón de frecuencia. La incidencia por sexo corresponde a 61 por ciento en hombres, con un 91 por ciento correspondiente al rango entre 15 y 39 años. Las ETS más frecuentes en varones corresponden a sífilis, condilomas, gonorrea y uretritis no gonocócica. En las mujeres la incidencia es de un 39 por ciento, con una mayor frecuencia entre los 20 y 24 años. Las ETS más frecuentes en mujeres son condilomas, sífilis, candidiasis y vaginosis bacteriana.

Características específicas de ETS más frecuentes A continuación se describen en forma muy breve y simplificada las características clínicas y complicaciones de algunas de las ETS frecuentes en la población chilena y a las que están expuestos nuestros(as) adolescentes.

Tipos de enfermedades de transmisión sexual

Gonorrea La gonorrea es producida por una bacteria llamada Neisseria gonorrhoeae, cuyo único reservorio es el ser humano. Su periodo de incubación, una vez producido el contagio, es de dos a ocho días. Se localiza en el cuerpo en superficies de mucosas como cuello uterino, uretra, el recto y la faringe. La presentación clínica de la gonorrea es diferencial según sexo: en hombres, sólo el 10 por ciento es asintomática y el 90 por ciento restante presenta uretritis con secreción purulenta y/o disuria (dolor al orinar). En las mujeres, en cambio, en el 80 por ciento de los casos es asintomática. El restante 20 por ciento puede presentarse como infección del cuello uterino y leucorrea (secreción vaginal) inespecífica, existiendo también una manifestación más grave y diseminada en un 2 por ciento, caracterizada por fiebre, malestar general, petequias y pústulas, artralgias y artritis séptica. También puede presentar infección de las distintas zonas donde se aloje: infección rectal (sexo anal) y orofaríngea (sexo oral). Se trata con antibióticos y es de extrema importancia localizar y tratar a los contactos sexuales del (la) paciente. Las complicaciones asociadas a la infección por Neisseria gonorrhoeae incluyen en: Hombres: epididimitis, prostatitis, estenosis uretral, uretritis irritativa, endocarditis, meningitis y artritis séptica. Mujeres: dolor pélvico crónico, proceso inflamatorio pelviano (PIP), embarazo ectópico, infertilidad, uretritis, endometritis, infecciones perinatales.

Uretritis no gonocócica (UNG) Corresponde a la infección uretral de cualquier etiología, con excepción de la gonocócica. La más frecuente incluye infecciones por Chlamydia trachomatis, Ureaplasma urealyticum, Trichomonas vaginalis y Herpes simplex. La presentación clínica de los distintos agentes es similar a la gonorrea aguda, con descarga uretral (hombres) o cervical (mujeres), pero de menor intensidad y de aspecto más claro. También puede ser asintomática en muchos casos. La UNG tiene un período de incubación de 10 a 20 días y su inicio es más gradual que la uretritis gonocócica, presentando disuria con menor frecuencia. El tratamiento también incluye antibióticos o antifúngicos, dependiendo del germen involucrado. Las complicaciones incluyen: Hombres: epididimitis, estenosis uretral, prostatitis, infertilidad, entre otros. Mujeres: cervicitis, PIP, infertilidad y salpingitis (infección trompas de falopio). Además, aumenta el riesgo de adquirir VIH y VHS por inflamación de la mucosa. Neumonia, meningitis y conjuntivitis neonatal.

Sífilis Corresponde a una enfermedad infecciosa crónica, producida por un microorganismo llamado Treponema pallidum (espiroqueta). Esta enfermedad se caracteriza por alternar períodos de actividad con períodos de latencia: la primera manifestación es la sífilis primaria; luego de un período sin síntomas aparece la sífilis secundaria y, finalmente, la secuela crónica es la terciaria. Por lo mismo anterior, las manifestaciones clínicas son muy variadas y complejas. La tasa de frecuencia es de 25/100.000 habitante en Chile y es causa de muerte en 3.500 casos anuales en el mundo. La sífilis primaria se caracteriza por la aparición de una lesión o herida, llamada chancro, que es redonda, de superficie limpia, lisa, húmeda e indurada en el surco balanoprepucial del pene o en la vulva. También puede estar en otras localizaciones (glande, prepucio, cuello uterino o ano). La ubicación es en un 90 por ciento en los genitales y 10 por ciento extragenital (ano, boca). Esta lesión desaparece espontáneamente entre las tres a seis semanas. La sífilis secundaria presenta sus manifestaciones en dos a ocho semanas tras la aparición del chancro. Corresponde al período en que el microorganismo se disemina por la sangre a varias partes del cuerpo y da una gran cantidad de síntomas, que pueden afectar los ojos, huesos, articulaciones, cerebro, y piel y mucosas. Por esta razón, cuesta reconocer que se trata de una enfermedad de transmisión sexual. La sífilis terciaria corresponde al daño secuelar que queda en dos órganos principales (corazón y cerebro) y que permanece crónicamente en el individuo, pudiendo ocasionarle muchas complicaciones e, incluso, la muerte.

Herpes genital Es producido por un virus llamado Herpes simplex, que pertenece a la misma familia del virus herpes simple que produce el herpes labial. Tiene la misma capacidad de mantenerse en estado de latencia, y frente a cualquier condición de estrés o enfermedad, se reactiva. Al igual que el herpes peribucal, la transmisión ocurre por contacto directo y la lesión genital es muy parecida a la bucal. Lo más importante es que una vez producido el contagio con herpes genital, la infección es crónica y puede reactivarse en cualquier momento. Además del contacto sexual, el herpes genital puede transmitirse al recién nacido, cuando éste pasa por el canal de parto.

Virus papiloma humano (VPH) Este virus es motivo de mucha investigación y estudio en la actualidad. Causa una infección crónica que se presenta con verrugas genitales o condilomas. Estas lesiones aparecen hasta dos años tras la infección. Lo que más preocupa de la infección por VPH es que, a largo plazo, el virus es productor de cáncer ano-genital, constituyendo una de las mayores causas de cáncer uterino en las mujeres en Chile. Puede ser prácticamente asintomático hasta que se manifieste el cáncer. No tiene tratamiento específico, pero se encuentra en desarrollo una vacuna para este virus.

VIH – sida Como ya es conocido, la infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) produce un amplio espectro de afecciones, de las cuales el sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) constituye la etapa final