La construcción de una esperanza.

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A pesar de todo lo que vivimos, nuestros antepasados, nosotros y quizás lo que vivan nuestros predecesores aún hay unas cuantas personas, unas pequeñas sociedades preocupadas por el medio en el que viven.

Tal vez solo lo hacen por ellos, si solemos ser muy egoístas, pero ese sentimiento de pertenencia a un lugar, a tu hogar, ha sido de gran ayuda para resguardar un poco de esperanza en el país.

Esa capacidad de sacrificar los beneficios personales por un bien social a largo plazo es admirable, esas personas son las que en verdad pueden marcar un efecto positivo en el ambiente, nosotros igual, pero somos activistas de clics…

Conclusión:

Para poder finalizar esto, me gustaría poder mencionar la segunda hipótesis del autor. La sustentabilidad ambiental y la crisis social son facetas de un mismo conflicto.

No habrá un futuro viable, o al menos habitable, sin un ambiente saludable. Sin embargo tampoco lo habrá sin respeto por los que ya hacen algo para preservar su hogar. La modernidad no es un asunto de consumo desmedido y ganancias a corto plazo. Nos costara, si quizás demasiado, pero ¿Quién no quiere ver a sus hijos en un lugar limpio? (Hay excepciones) y poder ser parte de algo grande llamado futuro.

Comencemos por proteger nuestros bosques, nuestros mares, nuestras costas, nuestro hogar. Bueno quizás no consumiendo en exceso, está bien, consumiendo inteligentemente… Es más complicado de lo que parece, demasiado, (depende de ti, claro) pero vale la pena.

Al menos da like en la fanpage de los activistas, para que se vean más.