Sistema Inquisitivo.

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Según el Derecho Civil Los criminales acusados de traición eran castigados con la muerte y sus bienes eran confiscados

Papa Inocencio III

A pesar que es un delito, los grupos de pensamientos libres seguían emergiendo interpretaban a Dios a su manera entre ellos se encontraban los Valdenses, eran Predicadores Errantes que predicaban entre Francia y el Norte de Italia vivían en apostólica pobreza, su doctrina se basaban en una sucesión del cristianismo simplificado, de la habilidad de todos para predicar si se poseía la inspiración del espíritu si se era clérigo o no.

La iglesia insistía que cualquiera que quisiera dedicarse a la predicación pública debía ser acreditado por su obispo de su dosis.

Cuando ellos se negaron a dejar de predicar el Papa Inocencia III emitió un edicto llamado Cura Papal, tachando al movimiento como hereje y excomulgándolo a todos sus seguidores. La herejía se consideraba una amenaza a la sociedad de la fe, por eso era importante luchar contra ella, a los rebeldes se les trato de una forma suave en comparación con los Cataros.

Cataros

Europa era un foco de herejía al sur de Francia nació el Catarismo. Cataros proviene de la palabra griega significa puro también llamados albigenses. Vivian su fe como la única verdadera, se mostraban completamente hostiles a la iglesia la consideraban perniciosa, desordenada pues en su inicios los primeros cristianos vivían en su Fe, con sencillez, pobreza, y humanismo, convirtiéndose en una religión prepotente donde sus fieles vivían en continuo temor al castigo divino por cualquier falta o desvió de sus actos y bajo pena de excomunión la obediencia ciega hacia los dogmas de la iglesia. Los Cataros llamaban a sus sacerdotes perfectis comprometidos a una estricta abstinencia ellos no podían mentir, blasfemar, comer carnes, mantener relaciones sexuales, acusaban a la iglesia de abusar cada vez mas de su poder, la autoridad de los perfectis era una vergüenza para la iglesia que existiere un grupo capaz de vivir realmente, con la fe de Cristo y sus Apóstoles, mientras que la Iglesia vivía en opulencia.

En 1208 el papa reclama una nueva cruzada ALBAJENCE las atrocidades que cometieron, se convirtieron en legendaria los perfectis eran fácilmente reconocibles por sus atuendos negro, eran acechados al acto, no intentaron esconderse en parte porque la muerte les liberaba de este terrible mundo material en el que dios les había sumergido. Le tenía profundo miedo al martirio, si embargo después de tres años de matanzas los astutos perectis decidieron desprenderse de sus atuendos distintivos y camuflajearse, gradualmente a pesar del celibato empezaron a viajar con mujeres afirmando que eran sus esposas.

El Papa Inocencio III volvía a enfrentarse al mismo rompe cabeza del principio El Objetivo de la iglesia era esparcir la salvación y un hereje muerto solo era bueno para el diablo.

El Pontificio en apuro considero el sistema dual el procedimiento habitual acusatorio forzaba a la parte a hacer una acusación pública, si la parte acusadora no conseguía probar caso esta era castigada del mismo modo que habrían castigado al acusado. Este proceso hacia qué incluso que los que tenían una queja real reconsideraba presentar una queja real. Inocencio III, se dio cuenta que esas reglas no servirían para sus objetivos a largo plazo, 1215 El papa congrego a todos los laudos cristianos en el Cuarto Concilio de Letrán, o celebrado en Roma, aquí anuncia sus nuevas normas para la persecución de la herejía El Concilio IV de Letrán de 1215, convocado por el papa Inocencio III, dictó un reglamento que dio forma a la Inquisición pontificia, reagrupando disposiciones de los papas que lo precedieron en concilios anteriores.

Los puntos principales eran:

- Toda herejía debía ser perseguida concertadamente por las autoridades civiles y eclesiásticas.

- Los procesos deberán ser iniciados de oficio —sin instancia de parte—.

- Los obispos deberán disponer la realización de inquisición en cada parroquia de su diócesis.

- Las propiedades de los herejes deberán ser confiscadas.

- Los recalcitrantes deberán ser relajados al brazo secular para ser sancionados.

Inicio de la Santa Inquisición

El sistema de la Inquisición suponía, una innovación maravillosa, la acusación no tenía que demostrar nada, solo tenía que tener muy claro, tener suficiente evidencias para que surgiera la culpabilidad del acusado.

El proceso Inquisitivo de Inocencio III daba la potestad al investigador, de construir un caso completo recogiendo a escondidas las opiniones de la gente de la comunidad, la iglesia prohibía la tortura pero tras el asesinato del inquisidor En Lombardía, el papa tercero hizo legal los métodos antiquísimos de la tortura que entraron contra la lucha de la herejía, se bebe obtener de los herejes una confesión mediante la tortura, la tortura no fue algo inventado por los inquisidores solo siguieron los dictamen de la ley.

la tortura se destinaba a dos tipos de prisioneros los que no se retractaban y los que parecían saber algo más de lo que contaban, los inquisidores recurrían a la técnica de la tortura, pero dejaban el trabajo a los torturadores profesionales, expertos en causar dolor, estos para empezar debían describir la tortura al acusado, luego debían mostrar los instrumentos de la tortura, el acusado sufría unos de esos métodos de tortura, sin embargo el acusado podía decir en cualquier momento que tenía suficiente.

El clero justificaba todo esto como acto de benevolencia al fin y al cabo la tortura llevaba a la confesión, el injuriador podía reconciliarse con Dios y recibir la salvación. Si la Confesión se realizaba durante la tortura el proceso consistía en librar al acusado de los instrumentos de tortura y permitir que se recuperara luego se le repetía la pregunta para comprobar si el acusado solo se había dejado llevar por el miedo al dolor o realmente había dicho la verdad.

Con todas esas técnicas a su disposición, el inquisidor podía obtener confesiones falsas, porque si quería podía hacer confesar casi lo que quería, el más temido era el día del juicio no podía hacer nada para defenderse. Durante los siglos 13 los Inquisidores Papales, siguieron su camino recogiendo acusaciones e investigando acusaciones de herejías.

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