Una deuda eterna, llamada “deuda externa”.

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la falta de recursos a facilitar el acceso a los bosques amazónicos a transnacionales extranjeras, quienes encontraron gran riqueza petrolera. El Ecuador adquiría una enorme deuda más los intereses, lo que originaba injustamente ser un país sirviente del estado americano, esto se consiguió a través de la aceptación de importantes créditos que tendrían como objetivo el financiamiento de sus infraestructuras, además estos proyectos serían realizados por contratistas estadounidenses, por lo tanto, el dinero se quedaba en los estados unidos.

La época de los 90, años de notable inestabilidad política y principalmente económica, sería una década perdida en la que durante ocho años estuvieron cinco diferentes presidentes al mando del país, con propuestas muy descabelladas y distintas que no favorecieron en nada a la solución de la deuda internacional, a pesar de diversas rondas de negociaciones en la que la participación del país se vio involucrada. Diversas medidas se tomaron como los bonos Brady, que se realizaba un canje de la deuda comercial por bonos de dicho nombre, esto consistían en “un fuerte impulso a la titulizacion de la deuda privada y a su posterior negociación en los mercados financieros, la característica distintiva de los bonos Brady era la inclusión de principal e intereses en el bono, produciéndose una capitalización de facto de interés de la misma” (Jaime Atienza, 2002:111) esto supondría solvencia que lo convertiría en un modo de negociación adecuado en los mercados financieros. Al parecer esto traería un ambiente de estabilidad, pero no lo fue, ya que una severa crisis económica se presenció en el Ecuador y estos bonos pasaron a tener poca importancia y una deuda que empezaba a tener un crecimiento insostenible.

Los hechos más actuales sobre esta deuda nos llevan al gobierno de Rafael Correa, quien en el año 2008, determinó cancelar la deuda argumentando como ilegítima e inconstitucional, creando un comité de auditoría que ratificó su denominación de ilegítima, por esta razón el estado tuvo un considerable ahorro económico. Este suceso es digno de reconocer por parte del gobierno que fue rígido en sus decisiones y puso un alto a décadas de injusticia que ha sido víctima el país, producto de agobiantes problemas que han desencadenado la deuda. Es importante que los países de la región adquiriesen decisiones como la del Ecuador, de manera que sirva para un analices sobre la deuda externa y exista cooperación en la calidad y exhaustividad de la información, con el objetivo de adquirir una propicia administración para tomar políticas oportunas por el bien de cada nación.

Finalmente, ¿Se puede considerar a la deuda externa como el principal problema de la historia del país? Considerablemente si, como los sucesos históricos lo demuestran, la deuda externa en sus inicios tuvo un papel muy importante en países desarrollados en la época, ya que eran los precursores de las finanzas mundiales y ataron a países subdesarrollados de la región latinoamericana como Ecuador a vivir en años de inestabilidades económica, política y sociales que impedían un crecimiento armonioso del país, a través de incesantes medidas que se tomaban por parte de los gobiernos lo que representaba importantes trabas para el país. “Hay dos formas de conquistar y esclavizar una nación. Una es a través de la espada y otra es a través de la deuda” (John Adams)

Referencias

Acosta, A. (2012). Breve historia economica del Ecuador . Quito: Corporacion editora nacional.

Azcona, J. A. (2002). La deuda externa del mundo en desarrollo: teoria, realidad y alternativas. Madrid: editorial AKAL.

Buitrón, P. S. (2003). Deuda extrema: juego de intereses lecciones del acuerdo de Londres. QUITO : editorial ABYA YALA.