El efecto de la caída de remesas en el consumo de las familias salvadoreñas en el marco del COVID19

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UNIVERSIDAD FRANCISCO GAVIDIA

MAESTRIA EN ADMINISTRACION DE NEGOCIOS CON ESPECIALIDAD EN COMERCIO ELECTRONICO SEMIPRESENCIAL - MANECESP-XIII

ECONOMÍA NACIONAL E INTERNACIONAL

CATEDRATICO: ERICK MENJÍVAR. PH.D. ABD

Fecha 30 de mayo de 2020

Cuerpo del ensayo.

El efecto de la caída de remesas en el consumo de las familias salvadoreñas en el marco del COVID19

Efecto de la pandemia en un contexto económico latinoamericano

La pandemia del COVID-19 ha logrado propagarse globalmente logrando afectar muy bruscamente las grandes economías, provocando altos números en costos económicos y sociales. Los gobiernos se han visto en la obligación de enfocar todos sus recursos en proteger las vidas de sus ciudadanos y poniendo en primera fila los sistemas de salud para que puedan hacerle frente a la pandemia esto ha implicado políticas de aislamiento, restricciones a la movilidad de cada uno de los ciudadanos a esto hay que incluirle la decisión del cierre de las fronteras para poder minimizar la curva de contagios.

Desde una óptica de macroeconomía, se puede proponer un modelo de análisis de la relación Remesas–Consumo que permite entender y evaluar los distintos impactos de las remesas familiares en función del carácter y modalidad que ellas asuman, así como de su significado y comportamiento específico como categoría económica. El efecto de las remesas depende directamente de cómo ellas se incorporan a la estructura económica de cada sociedad de América Latina; la dinámica y comportamiento macroeconómico de las remesas no se corresponde con el de un fondo de ahorro o inversión, sino más bien al de un ingreso salarial, que bajo la forma de transferencia familiar externa, contribuye a compensar los efectos negativos que las crisis recurrentes y los ciclos recesivos de la economía de algunos países de América Latina provocan sobre las economías familiares. Se conoce que, en algunos países el ingreso de las remesas familiares representa una buena parte del PIB, tal como lo plantea la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (CEPAL) en su Informe Especial COVID-19, N°2, del día 21 de abril de 2020, Flujo de remesas familiares como porcentaje del PIB, 2018.

Inmersos en el escenario actual del COVID-19, estas transferencias salariales suelen ser importantes en aquellos países con mayores niveles de pobreza y menor nivel de desarrollo. Por lo general, en la mayoría de los países con más altos índices de ingresos por remesas; es para consumo, por lo que, la inversión productiva financiada con remesas no sólo no llega a los montos necesarios para impulsar un proceso de desarrollo, sino que además se da en ambientes macroeconómicos muy desfavorables que limitan y restringen sus efectos reales.

La CEPAL (abril 2020) estima que solo en América Latina y el Caribe el número de desempleados aumentará en 11.6 millones, en relación con los empleados de 2019, lo que impactaría en la disminución de ingresos de los hogares, su capacidad adquisitiva y, por tanto, un aumento en la pobreza (se estima un aumento de 30 millones más de pobres en la región). Por tanto, la magnitud del impacto dependerá de la duración de la pandemia, su propagación, así como de las medidas de contención y de recuperación económica adoptadas por los países (BID).^[1]

Por lo cual las economías que tenía una dependencia dentro de su PIB basada en las remesas se vera afectadas, esperando que las primicias de toma de decisiones de restauración de una nueva realidad, no implique una repatriación de estas personas a sus países de orígenes como lo había estado pronunciado EE. UU al cierre del 2019.

Efecto previsto en la economía nacional

Para entender los efectos de la pandemia del COVID19 sobre la economía del El Salvador, es indispensable saber alguna información sobre las remesas en el país.

País de origen de las remesas.

Si bien existen múltiples países que efectúan remesas a El Salvador, Estados Unidos es el país de origen que concentra el  95.4% las remesas que ingresan al país^[2]:

Características  y destino de las remesas familiares en los hogares

De acuerdo con el reporte del Banco Interamericano de Desarrollo^[3], las características de los destinatarios de las remesas son:

• 1 de cada 5 salvadoreños es beneficiario de remesas
• 70 % son mujeres
• El 32% de los hogares con encabezados por mujeres
• 79% de los hogares son pobres o en riesgo de caer en pobreza
• Las remesas en promedio representan el 50% del ingreso de los hogares, en los hogares urbanos las remesas representan el 42% y en los rurales hasta el 60% de los ingresos
• Los receptores de remesas están distribuidos en clases sociales así: 0.3% clase alta, 20.8% clase media, 32.6% pobres y 46.3% vulnerables.
• El 94% de los hogares indica que las remesas son utilizadas para cubrir gastos diarios de consumo, el 10% también indica cubrir gastos de educación, un 5% gastos de saludo, solo un 4% efectúa ahorros y 2% en otro tipo de usos.

Relación de las remesas comerciales con la economía de El Salvador.

Importancia relativa de las remesas

De acuerdo con Resultados de la Sexta Encuesta de Remesas Familiares ^[4], el monto de las remesas familiares representa el equivalente al 20.3% del PIB, el 85.7 del gasto público, el 90.8% del déficit comercial, el 92.7% de las exportaciones o el 77.7% de los salarios, es decir la cantidad de dinero que proviene de las remesas juega un importante papel dentro de la economía del país.

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