“Colorín Colorado, este cuento aún no ha terminado”

...

A la mañana siguiente, siguieron caminando por todo el bosque, la princesa ya tenía nuevas ilusiones, cuando de repente se encontraron con una pequeña choza humilde, hecha de paja y madera, en el pórtico había un hombre sentado leyendo un libro y la princesa se acercó a él. La princesa le preguntó por el hombre más rico y este le dijo que el hombre más rico del mundo no le daría ningún centavo y le preguntó que para qué lo estaba buscando, la princesa le dijo que Bonsaí la había mandado y el hombre le dijo que se llamaba tiempo y le preguntó que si estaba lista para recibir su riqueza y se sumergió en un baúl, cuando salió le dio un sobre a Odái y le dijo que eso era su riqueza, cuando abrió el sobre pudo leer diferentes frases y el hombre más rico del mundo le dijo que en la vida, sólo se es verdaderamente rico en experiencia.

La princesa y el dragón siguieron caminando hasta atravesar unos grandes arcos que señalaban una propiedad privada, con miedo cruzaron los arcos y se encontraron con un sembradío de fresas y comenzaron a comerlas, al poco rato se escuchó un perro que venía corriendo y se espantaron, después se escuchó una voz de un hombre que le hablaba al perro y se dieron cuenta que era la voz de un apuesto caballero que venía montado en un majestuoso caballo, al llegar a donde estaba la princesa y el dragón el caballero se presentó como el Príncipe Azul, la princesa quedó sorprendida al instante ya que el príncipe era muy guapo, el príncipe invitó a la Odái a su castillo y aceptó de inmediato, dejando atrás al dragón y al escritor. Pasando tiempo después de haber estado ahí en el castillo, el príncipe le pidió matrimonio a Odái y esta aceptó, se fueron de luna de miel y fueron felices.

Pasó el tiempo y poco después tuvieron tres hijos, llamados Yára, Bono y Gotz, la princesa había cambiado, ahora era madre, y se preocupaba por el bienestar de sus hijos, su dragón como siempre, seguía a lado de ella, el escritor había quedado sorprendido de todo lo que había ocurrido, cuando vio a la princesa, esta le dijo que volviera a buscarla en 10 años para poder platicar.

El escritor decidió esperar 15 años y cuando regresó al castillo a buscar a la princesa, le dijeron que ella ya no vivía ahí y que vivía en el pueblo, así que decidió ir a buscarla, de repente se encontró con Bonsaí, quien le dio las instrucciones para poder llegar hasta donde estaba la princesa, al llegar a donde Bonsaí le había dicho, se encontró con una pequeña y humilde casa alejada del bosque, el dragón estaba afuera y le contó todo lo que había ocurrido en esos años, los hijos de la princesa se habían ido a estudiar, se habían casado y habían hecho su vida, Odái había tenido problemas con el príncipe, un día se dio cuenta que él había escondido su sobre con sus riquezas, había descubierto que el príncipe se estaba apoderando de sus miedo, y agarrándose de valor, un día decidió dejarlo y se fue a vivir a esa casita humilde, cuando el escritor escucho todo eso no lo pudo creer y entró a ver cómo estaba la princesa, ella estaba triste, sin ganas de vivir y desconsolada, el escritor habló con ella y le recordó el por qué estaba donde estaba, así que la princesa volvió a recobrar el sentido y las ganas de volver a vivir, de repente apareció una tortuga, la tortuga de la prudencia, quien le dijo que estaba cuidando que no fuera a adelantarse a nada, que dejara que la vida fluyera como tuviera que fluir, y que tratara de llevar las cosas con calma. Poco después se encontró con un hombre llamado Yeva, con el cual estuvo charlando un largo rato hasta que les cayó la noche y ambos se despidieron.

A la mañana siguiente, la princesa se despertó de un sueño que había tenido con una señora, y sin pensarlo dos veces, decidió ir en busca de esa señora, cuando por fin la encontró, la señora se presentó como Zoé, era una hechicera, Odái decidió preguntarle acerca de lo que iba a suceder con ella, de lo que iba a pasar con su vida, y Zoé le dijo que todo estaba en su poder, que su vida estaba bajo su control, le dijo que ella no puede controlar los sucesos que ocurren en la vida, como la lluvia o el salir del sol, pero que lo que si podía controlar era la actitud con la enfrentaba las cosas, y que las actitudes ante las cosas lo son todo, al decirle esto, Odái entendió claramente el mensaje y decidió ir a buscar el nuevo sentido de la vida y lo que tenía la vida deparada para ella, aquí terminó el cuento, la princesa siendo muy feliz y viviendo su propia aventura de vida, se casó con Yeva, dándose cuenta que realmente este era el amor de su vida, su verdadero príncipe azul, tuvo más hijos, y al murió, pero murió habiendo disfrutado de su vida, y estando realmente agradecida por todas las experiencias que había aprendido, murió siendo feliz.

---------------------------------------------------------------

6. Ensayo

Este libro me ha dejado muchas enseñanzas, creo que la manera en que representa lo que realmente es la vida, es muy buena, me ha dejado reflexionando acerca de lo que realmente quiero y el por qué estoy donde estoy, Odái es una princesa que como muchos está encerrada esperando a que suceda una señal que la ayude a hacer lo que realmente quiere, sin embargo muchas veces como ella, esperamos a que llegue una señal que realmente no existe, más bien nosotros mismos tenemos que decidir si queremos o no hacer las cosas, otra cosa que es importante es el dragón del miedo, lo que le dice Bonsaí de que no se puede deshacer de él, creo que es muy cierto ya que los miedos siempre los vamos a tener, está en nuestra naturaleza tener miedo de las cosas nuevas, tener miedo de los riesgos, a veces el miedo nos ayuda, como decían en el cuento, a estar alertas de posibles peligros, pero muchas veces lo único que hacen es retenernos y mantenernos estancados en ellos, dicen que por miedo dejamos de hacer muchas cosas y creo que es cierto. En esta historia se cruzan muchos personajes y cada uno te deja una enseñanza positiva, como decía el Abejorro, deberíamos imaginar cómo sería nuestra vida si realmente nos atreviéramos a cambiar, a intentar cosas nuevas, a perder ese miedo de saber qué es lo que pasara y solo arriesgarnos. Creo que uno de los personajes que más me marcaron en cierto modo, fue Pía, el hada del recuerdo, ella dice que siempre es bueno dar una vuelta al pasado para poder recordar de dónde venimos para saber hacía donde queremos ir, creo que tiene mucha razón ya que muchas veces olvidamos porque estamos donde estamos y porque estamos haciendo lo que hacemos, y realmente lo mejor que podemos hacer es eso, dar una vuelta al pasado para volver a recordarlo, también