Cuaderno de Lenguaje y Comunicación II
Enviado por tomas • 22 de Noviembre de 2018 • 51.011 Palabras (205 Páginas) • 444 Visitas
...
En el Imperio de Roma y en la Edad Media, los dominadores se imponían con la violencia de las espadas. No hace mucho, con el fuego de las pistolas. Hoy ya no es posible hacerlo así. ¡Qué suerte! (Bueno, solo en una parte del planeta...) Hoy muchos tenemos democracia y resolvemos nuestras diferencias con otra arma: ¡el discurso! Con discursos tan particulares como los anteriores.
Es un arma sutil, versátil, poderosa. Puede convencer, seducir, enamorar, irritar o manipular. Es tan poderosa, que todos deberíamos saber utilizarla, para poder garantizar un buen funcionamiento de la democracia. Deberíamos descubrir las intenciones con que se usa cada discurso, las artimañas que trama, las ideologías que esconde o las tergiversaciones que amaña. (Y, siguiendo entre paréntesis, está claro que en una dictadura también es necesario —todavía más— descubrir lo que pretenden los discursos.)
EXPLORANDO LA IDEOLOGÍA
Veamos otros ejemplos:
(3) El ideal de la democracia se desarrolló en Grecia a partir de... [pic 4]
Posible fragmento de ensayo.
(4) La falacia de la democracia se desarrolló en Grecia a partir de...
Posible fragmento de ensayo. [pic 5]
(5) Por qué las mujeres hablan diferente de los hombres.
El Mundo, 11-5-03, titular en portada.
[pic 6]
(6) Las acciones desde el aire (air strike) sobre Kabul han provocado daños colaterales.
CNN, EE.UU.
(7) Los bombardeos sobre Kabul han provocado víctimas civiles.
Al Jezira, Qatar [Isabel Ramos Rioja y Sergio Heredia, «Dos lenguajes para una guerra. Análisis comparativo de los conceptos clave en la crisis internacional en las cadenas CNN y Al Jezira», La Vanguardia, 20-10-2001, sobre los hechos del 11 de septiembre en Nueva York y la posterior invasión de Afganistán].
A veces, para poder descubrir lo que se esconde detrás de las líneas hay que tener mucha cultura. Así:
(8) Aplaudidos que fueron los primeros vagidos del Bambi que ya iba para presidente de la Selva, y a lo largo de la agotadora sesión de investidura, algo pudimos sacar en claro de las intenciones concretas del candidato. Dentro de la ambigüedad de la promesa de diálogo, de acuerdo, de consenso, de traer la liberté, la egalité y la fraternité, de convertir en País de las Maravillas los páramos por donde andaba errante la sombra del Caín pepero, algún compromiso concreto se deslizaba por entre las cautas palabras de Rodríguez Zapatero. Jaime Campmany, ABC, 17-4-04, primer párrafo de una columna de opinión.
Hay que conocer muchos datos sobre cultura general y política española. Solo así se comprende el sarcasmo corrosivo que formula Jaime Campmany contra el presidente del gobierno español. El lector debe saber que:
- Bambi es el apodo —entre cariñoso e irónico— que recibe el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, político del PSOE;
- pepero se refiere al PP (Partido Popular), que gobernó durante el periodo previo a las elecciones del 14 de marzo de 2004, que provocaron un cambio político en el Estado español;
- que el texto comenta el discurso de candidato a presidente del gobierno en la sesión de investidura en el Parlamento español;
- que la liberté, la egalité y la fraternité (en francés) resumió el ideario de la Revolución francesa y también de los derechos humanos, de la izquierda política, etc.;
- que andaba errante la sombra del Caín pepero se refiere al relato bíblico, con las connotaciones que aporta de personaje malo, responsable de todos nuestros males, etc.;
- que País de las Maravillas se refiere a la novela de Lewis Carroll, con las consiguientes connotaciones de fantasía y utopía aplicadas al discurso de Bambi.
Sin saber esto es imposible establecer la comparación de Bambi y Selva con Zapatero y España y comprender la auténtica ironía de la columna de opinión. ¡Qué difícil resulta!
La lingüística ha analizado los fenómenos implicados en este tipo de significación: la modalización o la emergencia de la subjetividad del autor (ideal/falacia), la reproducción de estereotipos culturales (hablar diferente de), la categorización léxica (daños colaterales / víctimas civiles) o la polifonía (egalité, fraternité, etc.) y la citación de voces previas, sea de modo explícito (Caín, País de las Maravillas) o encubierto (aplaudidos que fueron los primeros vagidos). Pero la ciudadanía no tiene estos conocimientos. No somos científicos del lenguaje. Entonces, ¿cómo podemos comprender textos como estos?, ¿cómo podemos defendernos en democracia?
DETRÁS DE LAS LÍNEAS
Algunos autores denominan metafóricamente a este tipo de comprensión como lo que hay detrás de las líneas (Gray 1960, citado por Alderson 2000). Así, distinguiríamos tres planos: las líneas, entre líneas y detrás de las líneas. Comprender las líneas de un texto se refiere a comprender el significado literal, la suma del significado semántico de todas sus palabras. Con entre líneas, a todo lo que se deduce de las palabras, aunque no se haya dicho explícitamente: las inferencias, las presuposiciones, la ironía, los dobles sentidos, etc. Y lo que hay detrás de las líneas es la ideología, el punto de vista, la intención y la argumentación que apunta el autor.
No es nueva la idea de que se puede leer entre líneas o detrás de ellas, como muestra esta viñeta de Chumy Chúmez (1972), en la que un anciano machista quiere leer el periódico del final de la dictadura con gafas para leer entre líneas, puesto que lo más importante no es lo literal.
[pic 7]
Por supuesto, las fronteras entre estos tres tipos de comprensión son difusas. No siempre es fácil distinguir los tres planos, ¡y tampoco importa! La metáfora de hablar de lo que hay detrás del discurso es útil para mostrar que existe contenido escondido, que a veces es el más importante... Por ejemplo, el 29-6-04 los diputados del Partido Popular mostraron una pancarta con este lema en el Parlamento español:
(9) Agua para todos.
Aquel día se derogó
...