Ensayo El mito de la caverna. La banda de lunares

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En nuestro país la mayoría de las veces los delitos por avaricia o codicia son muy notorios, y no precisamente son asesinatos. Investigando un poco logre encontrar que a esto se les llama “delincuencia de cuello blanco”. ¿Pero a que se refiere esto? Son personas que usan su nivel de inteligencia para su beneficio por encima del de los demás, suelen tener un buen nivel social, son personas con mucha codicia, que los vuelve capaces de mentir, falsificar y robar documentos, sobornar, estafar, traficar influencias, evadir impuestos, fraudes, engañar a ingenuos, etcétera, es decir, múltiples formas de corrupción.

Todo esto lo encontramos en el gobierno, en las personas de alto mando por lo cual no se ve como un delito, pero todo esto es gracias a mala formación y educación que recibimos los jóvenes y niños. Sabemos que en México la educación es muy mala, mientras menos educación haya, más personas ignorantes habrá y con mayor facilidad nos pueden controlar, al ser ignorantes no estaremos en condiciones de elegir lo mejor para nuestro país. Actualmente así es nuestra organización, podría decirse que la ignorancia es algo que hace que estemos una gran crisis social que día a día empeora.

Pero esto es solo metiéndonos un poco a la avaricia de nuestros gobernantes. Por otro lado, se ha escuchado demasiado de delitos causados por esta razón, como bien son los robos que es uno de los principales, pero tampoco se quedan atrás los homicidios, ya que como se mencionaba antes, la persona cambia su comportamiento y vive en un estado de preocupación y angustia, lo cual, de un simple robo, se puede llegar a convertir en un homicidio por el simple echo de querer siempre más y más, o como en el caso del cuento por el simple hecho de no perder una herencia u obtenerla toda, se llega a cometer el homicidio, con el fin de nunca llegar a la pobreza.

Concluyendo cuando se cruza la delgada línea entre “cubrir las necesidades” y “tener cada día más a cualquier costo” aparece la avaricia que es capaz de pasar por encima de todo aquél que se pone enfrente, sean familiares o no. Muchos quieren dinero para ganar prestigio social, fama, altas posiciones, o simplemente para llenar la esa “necesidad” de acumular por “cualquier cosa que se les presente” y el lema de estos es… “si puedo obtenerlo, lo obtengo, y si no puedo obtenerlo, de cualquier manera, sin importar cual fuese, lo tengo que obtener”. Por eso es que es de suma importancia descubrir hasta dónde termina la necesidad y dónde es que comienza la codicia y/o avaricia.