Jesús: biografía revolucionaria.

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En la portada se puede mirar Dos escenas de curación que resaltan una imagen de un buffet de la época, estos son motivos para decir que concuerdan con la tesis de obra, siendo este el núcleo de la visión y el programa original de Jesús. A la izquierda, aparece Jesús curando al paralítico, que lleva a hombros su litera, colocando esto en contexto la litera es donde el cuerpo después de muerto es llevado a su lugar de estado final; “la tumba”, según el texto de Marcos 2,1-12. Jesús aparece representado en el extremo izquierdo, lamentablemente roto; probablemente apareciera también su figura en el extremo derecho, que falta por completo.

En la parte inferior, pueden apreciarse en el centro cuatro personajes con la postura típica del banquete pagano. Las dos figuras centrales aparecen “reclinadas” tras una tabla curva apenas perceptible, mientras que la pareja que las rodea da la impresión de estar sirviéndoles. Tienen ante ellos seis cestos de comida, y se ve que están disfrutando comiendo y bebiendo. La escena clásica de la parte inferior se ha convertido en una representación de la multiplicación de los panes, según los relatos de Marcos 6,35-44 o Juan 6,5-13, al combinarse con la escena de la parte superior, en la que aparecen tres discípulos, a la izquierda, que se dirigen hacia Jesús, situado a la derecha.

Lo último y clave a resaltar es la forma como se representa a Jesús, ya que da la esencia de maestro o filósofo, pero también de cínico en contexto de la época como un “seguidor”; El relieve nos muestra, por consiguiente, a Jesús realizando curaciones, asistiendo a una comida, impartiendo sus enseñanzas y con el aspecto propio de un filósofo cínico: en otras palabras, estamos ante una miniatura iconográfica de la presente obra.

Siguiendo con los aspectos estéticos; la forma en que está escrito el libro es esencial para el entendimiento de este; tiene introducción en cada capítulo o fracción importante que ayuda a entender y prepara al lector de lo que se va a leer a continuación. La letra no es demasiado pequeña, pero tampoco muy grande y en si no es cansón para leer en una vista común, lo que sí se puede criticar a este libro es la falta de imágenes ilustrativas alrededor del libro, pues siendo honestos, aunque se tiene una excelente portada hay que hacer una detallada investigación para poder entenderla y alrededor de la lectura no hay imágenes complementarias para poder hacer inferencias con mayor calidad y efectividad de lo que el autor se quiera referir.

OPINIÓN:

Lo que se puede extraer a través de la lectura es que hay muchos datos posibles y hasta creíbles en palabras y argumentos de Crossan; así como hay muchos otros que para poder justificarlos hay que hacer fuerza mayor para poder tomar fe en que por suposiciones sin

fundamentos buenos algunas acciones no son ciertas, acciones escritas en la Biblia. En conclusión, la reacciones antes los argumentos de Crossan es mixta.

Los argumentos que impactan de Crossan es que se fundamenta en documentaciones extra religiosas o extra canónicas, para juzgar la verdad en los relatos sobre Jesús, aunque ya dicho en ocasiones sus inferencias suelen ser radicales. Uno de los argumentos que, aunque buenos chocan con la fe del creyente es juzgar como los actos realizados por Jesús pueden romper las leyes de la naturaleza; ya que estas no pueden ser violadas. Dando a entender que los milagros son alegorías de curaciones sociales cuyo objetivo es impactar y chocar contra las convenciones de la sociedad judía del siglo I. Algo que también intentar desmentir es todos los relatos sobre la infancia de Jesús ya que son llenos de suposición o “inventos” para poder colocar a Jesús con la idea de enviado de Dios desde un inicio. Otro factor es el hecho de que Jesús inicio como seguidor (cínico), de Juan Bautista, aunque las tesis que le pone a Juan Bautista no son tan demostrables, ya que le implanta a su filosofía la idea apocalíptica de una tierra envuelta en pecado.

Algo que choca con la realidad sociocultural de la época es que si Jesús siendo un campesino posiblemente analfabeto como lo era común en la época pueda para a ser un continuador de una escuela filosófica como la de Juan Bautista.

Las partes finales como era de esperarse nos hablan sobre los últimos momentos de Jesús, sus acciones, su muerte y su “cuestionable” resurrección. Cuando se refiere que si Jesús tuvo una digna sepultura cuando fue condenado a muerte por crucifixión suena casi increíble y como lo que lo desmiente es la existencia de personajes como José de Arimatea o Nicodemo; para esto lo único que dice es que es probable que la existencia de José de Arimatea o Nicodemo haya sido un invento para justificar la sepultura de Jesús.

Por último, cuestiona la resurrección basándose en el testimonio de Pablo, un apóstol seguidor de Jesús, lo culpa de que puedo haber sido un intruso que quería legitimarse a toda costa entre los primeros seguidores de Jesús, no creo que conscientemente hubiese inventado la historia de la resurrección para afianzar su estatuto y distinción como apóstol. Otro elemento que utiliza es que las apariciones fueron ante poca gente y que dichas gentes fueran grandes líderes referentes del cristianismo.

Además, no toma o aprecia otras teorías como la de Gerg Ludemann que afirma que habría sido una alucinación producto del gran trauma emocional surgido en Pablo tras la culpa sentida por haber perseguido a los primeros cristianos.