La muerte de Ivan Ilich. De león Tolstoi a nuestros días. El sentir de la muerte en nuestros días

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Este ejemplo es paradigmático porque así sucede actualmente, es decir, nuestra muerte o la muerte de alguien más importa desde distintas perspectivas, en este sentido, es como ahora, a veces estamos rodeados de personas a las que realmente no les importamos, pero definitivamente a otras más que en nuestro lecho de muerte nos acompañaran hasta nuestras últimas horas.

Otra cuestión que me gustaría mencionar es la muerte como un vínculo económico, como lo vemos con Ilich, su muerte valía más por todas las riquezas que generó, a partir de su trabajo, del egoísmo de su familia y de sus colegas. Pero, ¿por qué el dinero nos acompaña hasta nuestras últimas horas? Es fácil, ya que vivimos en un mundo capitalista en donde como seres humanos valemos por lo que tenemos y no por lo que somos, esto como sabemos sucede en casi todos los funerales en donde hay de por medio una herencia, incluso en algunas ocasiones hay una fragmentación familiar a partir de las decisiones del muerto.

A partir de lo anterior podemos entender todo lo que conlleva el rito funerario, es decir el velorio, como sabemos es obligación que las personas lleven vestimenta negra, como lo podemos ver en el relato las personas que ahí se mencionan se dice que van vestidas de luto, es decir de color negro. Además de que hay una mención de qué cosas se hacen cuando están velando al muerto, por ejemplo, llorar, prender incienso y ver el cuerpo del muerto. Este último punto es de suma importancia porque el cuerpo muerto, ya no tiene vida, carece de anima e incluso carece de hermosura, la muerte degrada al cuerpo, por eso hay muchos reclamos para ella y no cabe duda de que Ilich en todo momento se los hace.

Pero un punto fundamental de este relato es el cuerpo del enfermo/ moribundo, pues en su calidad de enfermo parece no importarle cuidar su salud y aunque se sabe muerto aun así no le importa, ya que su propia familia no muestran interés, sin embargo, en su calidad de moribundo él se sabe definitivamente muerto y le da rabia que a su familia no le importe, que no haya un acercamiento como tal hacia él, en realidad es muy cruda la realidad de este personaje, ya que pareciera que la vida fuera eterna y nuestro cuerpo sólo está determinado a servir a los seres que amamos sin esperar nada a cambio para nosotros.

Tal como he titulado a este ensayo, me parece que todos los comportamientos que se encuentran en la muerte de Ilich están presentes hasta nuestros días, ya que todas estas fórmulas sociales siguen apareciendo en nuestro código de entendimiento.

No pensamos en la muerte e incluso es considerado un tabú, pues es imposible pensar en la propia muerte o en la muerte de alguien más sin que se piense que es de mal gusto tratar este tema como cualquier tema cotidiano.

LSRF