´MARCHANDO AL DESTINO´

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- ¿Por qué no hablamos de cosmovisión andina, en vez de la religión católica?

- ¿Por qué creemos en el alma, cuando somos nosotros, la verdadera existencia?

- ¿Por qué somos bautizados, cuando fuimos bendecidos con la vida?

- ¿Por qué nuestra vestimenta ha cambiado tanto que preferimos usar “ropa de marca”, en vez de “alpargatas”?

- ¿Por qué no nos damos cuenta que los españoles, nos impusieron una idea de supremacía?

- ¿Por qué creemos en un Dios único, en vez de valorar lo que afortunadamente está a nuestro alrededor?

América fue obligada a borrar su propia historia. Con esto, acabaron con una parte fundamental para nosotros, se borró nuestro pasado y nuestras creencias ancestrales.

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“La despedida nos muestra, nuestro verdadero ser”.[3]

Cuando los guerreros se alejan, nuestro corazón se rompe por la agonía y lo único que encontramos es: sufrimiento y dolor.

- En Troya, se desató una gran guerra, la cual duró diez años llenos de: furia, histeria y venganza.

- En Europa, los corazones explotaban por angustia y por soledad, al no conocer el destino de sus seres queridos.

- En Vietnam, mucha sangre fue derramada por las calles y se vivía un infierno terrenal, causada por: “agentes externos”, potencias mundiales.

No conocemos exactamente porque, la historia se complementa. Todos los conflictos nacieron en la mente de personas, héroes, soldados y dioses, que querían exigir algo absurdo y muchas veces incomprensible.

Imponer sus ideologías y sentirse realizados, se lo logra a través de la destrucción de pueblos, e incluso de: personas que no tienen interés alguno en conseguir la victoria o proclamar su grandeza.

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“El amor desaparece con la distancia, cuando no se lo siente, cuando no se lo vive y cuando, los sentimientos son tan solo un recuerdo”.[4]

El llamado celestial, pronuncia el nombre de cada uno de estos guerreros y ellos se preparan para la infame realidad.

Los soldados salen de sus casas y se dirigen a la guerra, miles de voces imploran a gritos, por su regreso. Niños y mujeres, corren despavoridos al observar que sus seres queridos se encaminan hacia la muerte.

No importa la edad ni la condición social, todos vamos por el mismo camino, pero no somos consientes de nuestro propio destino.

No sabemos si estos guerreros regresarán, pero vemos que su vida se convierte en un recuerdo solamente, pierde su vialidad y sus recuerdos son borrados de sus mentes para acabar con la amargura.

Según un artículo publicado en la Revista de Psiquiatría y Neurología por Sigmund Freud, en 1899. Los recuerdos indiferentes y secundarios de nuestra niñez, son recordados casi en su totalidad cuando somos adultos. Mientras que los recuerdos importantes, intensos y llenos de afecto, desaparecen sin dejar huella alguna. Se pueden producir recuerdos encubridores (distorsión en los recuerdos).

Se entiende que este estudio nos sirve para comprender la psicología en un aspecto muy general de los recuerdos infantiles, y claro, esto dependerá de cada una de las personas: de su mente y de su memoria.

Esto, nos sirve para entender: la realidad de los hijos de los guerreros. Es decir, todos aquellos recuerdos como: la despedida de sus padres y familiares antes del viaje, los abrazos y el afecto proporcionado. En su gran mayoría, serán borrados de la mente de estos niños, que sin entender las acciones de sus padres, olvidarán con facilidad lo sucedido.

Sus mujeres, cansadas de esperar su regreso, buscarán un nuevo amor, que reemplace a “sus esposos”, quienes salieron a batallar