Química secreta Por TIM VICARY

...

'¿Tuviste un buen día en la escuela Christine?' pregunté.

'Oh, bien, supongo,' ella dijo. Ella no parecía muy feliz. 'Tengo una carta para ti'.

Ella empujó la carta sobre la mesa y lo abrió. Era de su escuela. Uno de los maestros tomaba a los niños en unas vacaciones de esquí en las montañas de Suiza. Costó 400 libras durante diez días. Los padres que querían que sus hijos a ir tenían que enviar el dinero a la escuela antes del 25 de febreroth.

Sonrisa de John creció más grande. ¿Quieres ir en estas vacaciones, Christine?' preguntó.

Ella le miró extrañamente. 'Por supuesto hago, papá,' dijo ella. ¿' Pero no puedo, puedo yo? No hemos conseguido 400 libras.'

'No, supongo que no.' Miró cuidadosamente a través de sus gruesas gafas. Ella era una buena chica inteligente, fuerte en su trabajo escolar, buena en deportes. Pero ella nunca había sido esquí. Juan no tenía suficiente dinero.

'Son tus amigos va?' pregunté.

' Algunos de ellos, sí, Miranda, Jane, Nigel-el rico, Sabe usted. Pero ellos a menudo ir a esquiar; es fácil para ellos. Sé que no puedo ir, papá. Tirar la carta.'

Juan la miró y sintió su corazón latiendo rápidamente. ' No, no lo hacen, Christine,' él dijo. ' Tal vez se puede ir, si quiere. ¿Por qué no?'

Christine se echó a reír. ¿Lo que ha sucedido, papá? Ha robado un banco o algo?'

John se puso de pie. Entró en la cocina y metió una copa. 'No,' dijo, cuando regresó. ' Pero hoy sucedió algo interesante. Poner tu tarea, Christine - y enciende ese televisor apagado, Andrew. Tengo algo que decirte.»

' Oh, ahora no, papá!' dijo Andrew. 'Esto es una historia apasionante'.

John sonrió. ' Tengo una historia interesante, también, Andrew. Ven y escucha.'

Los niños de John Duncan vivieron en un viejo piso desordenado, no tenían dinero y a menudo comían comida horrible. Pero todavía podía hablar a su padre. Así que Andrew apaga el televisor y se sentó en un sillón grande al lado de su padre y Christine.

La historia no suena muy emocionante al principio. "Fui a una fábrica de hoy," dijo John. ' Eso fábrica de la pintura por el río. No, espera, Andrew. Fábricas de pintura pueden ser muy emocionantes. Me dieron un trabajo allí. Voy a tener mi propia oficina, un coche grande, un montón de dinero-de hecho, vamos a ser ricos...!'

3 Hombre rico

John Duncan comenzó a trabajar el lunes, y Mary Carter le mostró alrededor de la fábrica. Lo más importante que la empresa produjo fue una nueva pintura para coches. Era una pintura muy fuerte, dura, que nada podría dañar. María y sus químicos desarrollaron, y habían probado en todo el mundo. Agua ni ácido ni sal puede dañarlo, y coches regresaron desde el Ártico y el Sahara como nuevo.

La empresa estaba empezando a hacer un montón de dinero de esta pintura, y habían llevado cuatrocientos nuevos puestos de trabajo a la ciudad.

Un día, cuando estaba trabajando con la pintura, John algunos de los productos de desechos vertidas sobre su pierna. Él limpió rápidamente, pero dejó un lugar rojo y doloroso en su piel, que no iría. Lo mantuvo despierto por la noche. Le dijo a su médico lo que él había derramado en él, y el doctor le miró de forma extraña.

'Así que estos productos químicos tenían algo que ver con la nueva pintura, hicieron?' le preguntó el doctor cuidadosamente.

' Sí, te dije. Era una botella de los productos de desecho. Estaba frente a ellos en mi oficina.'

'Veo'. El doctor miró por la ventana cuidadosamente. Sus dedos se movió silenciosamente en su escritorio. Y su empresa ahora está produciendo muchos de estos productos de desecho, supongo.

'Sí, por supuesto. Juan fue a toda prisa. Tenía que conocer a alguien importante en diez minutos. ? Mira, puedes dar algo para poner en él, o no?'

' Oh, sí.' El médico comenzó a escribir algo en un pedazo de papel. ' Poner esto en la noche y mañana, y el dolor irá en un día o dos. Pero me temo que la piel se mantendrá roja durante un año o dos. Son productos químicos desagradables, Señor Duncan, Sabe usted.'

Sí, sé. John le sonrió. ' Pero no se preocupe, Doctor, somos muy cuidadosos con ellos en la fábrica. Nadie puede pasar cerca de ellos sin ropa seguro especial. Usted puede venir y ver si os gustan.'

Estoy muy contento al oírlo, dijo el doctor. Dio el pedazo de papel a John.

'Gracias', dijo John. Se dirigió hacia la puerta.

'Señor Duncan?'

¿' Sí'? John miró hacia atrás, sorprendido.

' ¿Dónde estos productos de desecho van, cuando la fábrica haya terminado con ellos? En el río?»

' Bien, sí, por supuesto, dijo John. 'Pero está bien, usted sabe,' añadió rápidamente. ', Es revisar muy cuidadosamente, todo el tiempo. Es un gran río, y sólo producimos unos cien litros de residuos al día. Y estamos sólo a dos kilómetros del mar, después de todo.'

'Bueno,' dijo al doctor. 'No gusta nadie a tomar los productos de desecho, eso es todo'.

No, Doctor,"dijo John. ' Toda el agua potable sale el río cinco kilómetros aguas arriba, sabes que. ¿Quién va a beber agua salada de la boca del río, por Dios? Químicos de Londres han comprobado, también, Sabe usted, y nuestros abogados empresa saben todo acerca de él. Así que no es peligroso y no estamos haciendo nada malo. Don' t preocuparse por él.'

Él salió de la puerta, y después de media hora había olvidado la conversación...

Era un hombre muy ocupado ahora. Todo el día tenía que probar diferentes tipos de pinturas y asegurarse de que estaban seguros. También fue ocupado de comprar una casa