Sintaxis. Construcción partitiva
Enviado por tomas • 8 de Noviembre de 2018 • 13.994 Palabras (56 Páginas) • 385 Visitas
...
TEMA 3 – LA ORACIÓN SIMPLE
La oración simple es aquella que tiene un solo verbo dotado de los morfemas de persona, número, tiempo, modo…y que constituye siempre el núcleo de la oración.
-Las funciones del sujeto
Un verbo en forma personal contiene en sí mismo los dos términos esenciales de una oración gramatical (sujeto y predicado). Por ejemplo, hay oraciones que constan únicamente del verbo sin más especificación (pasaron, estudian…). Es evidente que, si la situación comunicativa no aclara a quién se refiere la persona del verbo, en cualquier momento podemos añadir un sintagma que aporte información acerca de esa persona gramatical. El verbo pasaron podría, por ejemplo, concretar su tercera persona con sustantivos referentes a cosas muy distintas como Pasaron los niños o Pasaron los años. Ese sintagma nominal se dice que ejerce la función de sujeto léxico, porque añade un contenido léxico y una significación al sujeto puramente gramatical o morfológico. Tenemos ya dos sujetos: el morfológico, extraído implícitamente del sintagma verbal (y obligatorio), y el léxico, que es potestativo (se puede expresar o no). La relación entre lo que expresa el sujeto y el verbo es de subordinación. El sujeto es un término adyacente al verbo, que es lo más importante dela oración.
-Una característica sintáctica de la función del sujeto es que es una función categorialmente sustantiva, ya que solo puede ser realizada por los sustantivos o por elementos sustantivados.
-Otra característica es que ese sustantivo debe mantener concordancia con la persona y número del verbo. Por lo tanto, un rasgo definitorio del sujeto léxico es la concordancia en persona y número en cuanto al verbo.
-Otra característica del sujeto léxico es que no admite una preposición, por lo que es fácil de identificar. Suelen señalarse como excepción a esta regla las preposiciones hasta y entre en casos como por ejemplo Esto es muy fácil, hasta tú lo entenderías o Entre tú y yo subiremos el equipaje. Pero, en realidad, vamos a ver que no se trata de ninguna excepción, ya que el sujeto nunca lleva preposición.
En el ejemplo anterior hasta no funciona como preposición a pesar de su forma y de su concordancia, sino es más bien una partícula intensiva que viene a enfatizar una totalidad implícita que se puede eliminar fácilmente (Esto es muy fácil, tú lo entenderías). Cuando hasta funciona como preposición tiene otro significado, el de límite en un espacio o en el tiempo.
Por lo que se refiere a entre, a pesar de la concordancia, en este caso el sintagma no funciona como sujeto, sino que hay una preposición real. En este caso nos encontramos con la función de complemento predicativo. Podría introducirse el verdadero sujeto, ya que Entre tú y yo es una expresión adverbial que se puede sustituir por así.
El sujeto, por tanto, ha de ser de categoría sustantiva y ha de mantener concordancia con el verbo y ha de rechazar toda preposición, así que esas aparentes excepciones no lo son.
-Tipos de unidades de la categoría sustantiva
Son de categoría propiamente sustantiva, y por lo tanto pueden realizar esta función de sujeto, los nombres propios (María estudia) y los sustantivos comunes (El chico estudia), pero también los llamados pronombres personales de sujeto (Yo salgo). También entran dentro de la categoría sustantiva los demostrativos (Esto no sirve), los numerales (Dos se perdieron) y los indefinidos llamados existenciales (Alguien llama/Algo sucede), que se llaman así porque no cuantifican, sino que solo señalan la existencia de algo de forma indeterminada. Los contrarios serían los inexistenciales (Nadie acudió/Nada sucede). También son de categoría sustantiva y pueden funcionar como sujeto los pronombres relativos tónicos en los interrogativos (¿Qué te interesa? [qué es sujeto porque podría sustituirse por cualquier sustantivo]) y los infinitivos de los verbos, aunque no tienen desinencia para mantener concordancia con el verbo (Me interesa venir). Las oraciones también pueden funcionar como sujeto léxico de una oración, pero para ello tienen que experimentar una transposición como categoría sustantiva (Me gusta que habléis). Al introducir un verbo con persona nos encontramos una oración subordinada. Los adjetivos calificativos (El grande me gusta más), los posesivos (Conozco su casa y veo que la mía es más pequeña) y los ordinales también pueden funcionar como sujeto léxico, pero para ello necesitan ser sustantivados mediante el artículo. Con el artículo también se puede sustantivar y, por lo tanto, permitir que funcione como sujeto léxico, cualquier sintagma previamente adjetivado (Las personas sin techo me preocupan [techo aparece adjetivado por la preposición sin]). Nominalizando el sujeto, podríamos decir Los sintecho me preocupan.
-La concordancia
Una de las características sintácticas de la función de sujeto léxico es la concordancia en número y persona con el sujeto morfológico del verbo. Teniendo esto en cuenta, a veces, en torno a un mismo verbo, utilizamos dos aparentes sujetos, puesto que ambas formas presentan concordancia con ese sujeto morfológico. Son construcciones como Yo me maquillo yo o El abuelo todavía se afeita él, aunque tenemos que decir que el verdadero sujeto es uno solo: el pronombre o sustantivo que va delante del verbo. El que se sitúa detrás funciona como complemento predicativo del sujeto. La finalidad del elemento que aparece detrás es insistir sobre la capacidad agentiva del sujeto, quiere remarcar quién realiza la acción del verbo. Esa es la razón por la que muchas veces ese pronombre que aparece detrás del verbo aparece reforzado con el identificador mismo (Yo me maquillo yo misma). Como es propio de los sintagmas en función de predicativos, estos pronombres o estos sustantivos siempre presentan concordancia con el sujeto. Desde el punto de vista semántico hablamos de modales, siempre expresan modo, por eso ese predicativo se puede sustituir por así. No hay oraciones con doble sujeto.
Por otra parte, conviene saber que los sustantivos propiamente dichos concuerdan todos ellos en tercera persona con el verbo. El sujeto, cuando es un sustantivo, siempre es de tercera persona (Los vecinos nos aprecian mucho). Pero hay que tener en cuenta que un sustantivo puede representar también al sujeto de primera o de segunda persona (Los vecinos lo apreciamos mucho). Parece haber una discordancia, pero no la hay, ya que en Los vecinos se incluye el hablante, y al decir lo apreciamos se incluye a este en la
...