El hueco negro.

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Pero cuando la producción o consumo de ese producto desciende, los ingresos al país que dependen de ese producto, descienden con él, y descontrola su economía, empujando al país hacia el hueco.

Hoy en día, Colombia ha dejado de ser mono exportador, pues hay gran variedad de rubros [8] colombianos en el mercado internacional, lo que garantiza una economía, un tanto estable, en caso de un descontrol de capital, como ocurrió después de la Bonanza.

Dados los anteriores argumentos, es necesario afirmar, que la posición del libro acerca de la Bonanza, puede llegar a ser fundamentalista, pues hay que prestar atención también, a los factores políticos sociales y temporales, que nos han traído hasta este punto de la economía nacional; aunque todos estén directa y subyacentemente relacionados con la Bonanza.

Otra propuesta del libro en análisis, nos muestra “Como salir del Hueco”.

Esta parte, propone diversos factores que podrían ayudar a estabilizar, y organizar la economía colombiana. En realidad, es pertinente que el libro aborde esta cuestión, ya habiendo hecho el análisis a la problemática, resulta adecuado, buscar la solución.

Al leer El Hueco Negro, nos podemos dar cuenta, de que este describe el proceso de salida, como una etapa lenta y gradual, en fin; paulatina[9]. Pero a partir de esta solución, surge otro problema o interrogante. Y es que si salir del hueco es un proceso lento, y estamos en él desde 1979; ¿no ha habido suficiente tiempo para salir de ahí? Y es que por más paulatino que sea, para organizar o reorganizar una economía; treinta y cinco años[10], sería bastantemente suficiente.

De nuevo sería oportuno, rectificar la posición acerca de que la Bonanza, no es la causante del descontrol económico en que vive el país.

En realidad, y de acuerdo a la perspectiva personal; para salir del hueco, habría que definir la condición económica colombiana, para no dar paso a desequilibrios. También es necesario que la economía sea independiente; así, no habría quien la desestabilizara. El apoyo a la tecnificación, a la calidad, al expansionismo económico[11], el nacionalismo y/o amor patrio y de sus intereses, pero sobre todo, abrir los ojos, evitar la corrupción y hacer frente a ella. Si se tiene en la cuenta estos puntos, la economía colombiana puede llegar a reorganizarse. Literalmente, lo ya mencionado, nos serviría como escalera para comenzar a salir del hueco.

Por último, el libro hace referencia, a “cómo podemos volver a caer”

Es como una advertencia; pero… ¿Cómo vamos a volver a caer, si aún no hemos salido? En caso de que algún día salgamos de ese hueco, el autor propone una serie de precauciones, con el fin de evitar una nueva odisea.

Están, los problemas sociales de consumo, siendo este uno de los principales problemas en el ámbito económico. El despilfarro, hace parte de la no planeación, y esta fue una de las principales causas que llevaron a la caída económica.

También, dentro de esos problemas sociales de consumo, figura la corrupción, consecuencia de los intereses económicos personales de muchos, los cuales obtienen mucho dinero por medio de este método[12]. Y como se dijo anteriormente, en los núcleos sociales más pequeños, (aunque suene insignificante) puede estar el mayor problema social de consumo, pues en estas pequeñas sociedades; por ejemplo una familia, las necesidades básicas principalmente, y luego las no necesarias, pero requeridas por la sociedad, fundamentan el consumo a nivel nacional.

Otro problema, son las deudas con el Fondo Monetario Internacional, como ocurrió durante la Bonanza, que se pensaba que nunca iba a haber un descenso económico; y un proceso de planeación requiere eso, estar preparado para esos descensos, y tener planeado, cómo cubrir la demanda, en caso de un ascenso económico.

Con las deudas, si no se saben usar los recursos provenientes de estas, es convierten en un “monstruo” que empieza a devorar al deudor, (en este caso un país, hasta dejarlo como nos dejó a nosotros, en un hueco; por eso es muy importante, evitar las deudas, al momento de evitar también, caer al hueco.

Por último, en la lista de cómo evitar caer al hueco, está el mediocrísimo empresarial, pues este es el que trae una carencia de planeación, dirección y liderazgo[13]; y esto acarrea todos los problemas anteriores.

La economía colombiana, ha atravesado por etapas que han marcado la historia de la nación, la Bonanza, trajo grandes beneficios, y si esta se hubiera aprovechado al máximo, quizás gozáramos de grandes beneficios económicos, y por ende, una mejor educación, un mejor servicio de salud, una mejor infraestructura, quizás, estaríamos mejor preparados tecnológicamente, u otros beneficios que un buen manejo económico brinda. Mientras tanto seguiremos en el hueco negro.

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