El papel de los acuerdos de paz de Chapultepec firmados en 1992 en la transición hacia una democracia.
Enviado por Antonio • 18 de Julio de 2018 • 4.443 Palabras (18 Páginas) • 483 Visitas
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La agenda de las negociaciones en todas sus fases fue determinada por las distintas partes contendientes. Se notaba a grandes rasgos que dentro de los temas centrales que se trataron, estaba el que tenía el proceso en el cese del enfrentamiento armado y en la inclusión del FMLN a la vida política legal como un partido político legítimo, compitiendo con los demás partidos políticos en elecciones libres y con posibilidades reales de alcanzar cuotas de poder dentro del Estado en todos los niveles (alcaldías, Asamblea Legislativa, Presidencia de la República).
“…A medida que se fue avanzando en la negociación de los acuerdos, se pudo ver el conjunto de temas que constituirían la agenda de trabajo y que quedó plasmada en los “Acuerdos de Caracas”; dicha agenda terminaría convirtiéndose en la base para los acuerdos definitivos. Como bien lo dijo Álvaro De Soto, el mediador designado de las Naciones Unidas en el proceso (2012), esta agenda terminó reflejando “la problemática salvadoreña en toda su amplitud” agrupada de la siguiente manera: fuerza armada, derechos humanos, sistema judicial, sistema electoral, tema económico y social, y reformas constitucionales. La agenda fue establecida por las partes contendientes y afinada gracias a la mediación de Naciones Unidas quien marcó el orden del proceso…” (López & otros, 2015: 13).
El plan consistió en que una vez creadas todas las condiciones, pudieran emprenderse reformas de orden constitucional, legislativas e institucionales, propiciando los verdaderos espacios para ver con claridad una mejor forma de restablecer y consolidar la democracia en El Salvador, garantizando las libertades y el respeto a los derechos humanos de toda la población en general.
“…En este sentido, el caso salvadoreño resulta interesante en contraste con otros conflictos latinoamericanos en la medida que, a pesar de que los grupos contendientes no lograron derrocar al gobierno (como habría sucedido previamente en Nicaragua y Cuba, por ejemplo), tampoco fueron derrotados militarmente, logrando en últimas insertarse exitosamente en el juego democrático con posibilidades reales de acceso al poder. De hecho este partido, luego de haber ganado alcaldías y diputaciones en la Asamblea Legislativa durante varios años, ha alcanzado hasta la fecha dos períodos presidenciales. Para que esto sucediera, tanto la negociación y la búsqueda de arreglos políticos debieron estar enfocados en establecer las garantías plenas para el cumplimiento de los acuerdos y el respeto a los derechos civiles y políticos de los antiguos contendientes. Los cambios no fueron menores y representaron una reestructuración completa del Estado y un proceso de aprendizaje para todos los implicados. (López & otros, 2015: 13).
Una vez que se estableció un camino para la negociación, se procedió a lograr acuerdos políticos que sentarían las bases para un cese al fuego definitivo y para que aquellos acuerdos permitieran la reincorporación a la sociedad civil del FMLN y el fin del conflicto armado en todo el país. Tanto la problemática que está dentro del origen del conflicto, y los problemas que constantemente fueron apareciendo durante su desarrollo, como por ejemplo el nuevo acuerdo social requerido para alcanzar la paz, se puede descifrar al final que la transición exigiría acuerdos sólidos para asegurar la transición de un régimen autoritario y excluyente a un sistema democrático e incluyente, capaz de adaptarse y responder a las demandas de una nueva sociedad cada vez más globalizada, interconectada y competitiva. “…El Acuerdo de Paz fue, en el fondo, un acuerdo político del cual no se podía esperar mucho en los campos social y económico, al menos no en el corto plazo. No obstante, el Acuerdo de Paz y la experiencia de los diez años siguientes sí guardan correspondencia con los objetivos que se fijaron las partes cuando comenzaron las negociaciones: la paz, el respeto a los derechos humanos, la democratización y la reconciliación. El Acuerdo de Paz es, en palabras del Secretario General de las Naciones Unidas, “un plan maestro” para alcanzar esos objetivos. La voluntad necesaria para construir con base a ese plan le corresponde a todas y todos los salvadoreños…” (López & otros, 2015: 14).
2.2. Los Acuerdos de Paz de Chapultepec, “Transición armada hacia una democracia”.
En los Acuerdos de Paz que se dan el 16 de enero de 1992, se toman áreas temáticas como el cese del enfrentamiento armado, la fuerza armada que es uno de los temas principales de este acuerdo, la participación política del FMLN en El Salvador, la Policía Nacional Civil (PNC), el sistema electoral, sistema judicial, el tema económico-social, la verificación de la ONU y el calendario de ejecución, fueron los ejes temáticos que quedaron plasmados en este acuerdo. En las siguientes páginas de este trabajo se explica en qué consisten estos cambios o reformas.
Las Fuerzas Armadas no permitían el avance a lo largo de la negociación servían de obstrucción para llegar a los acuerdos. “…El propósito principal de la negociación en materia de Fuerza Armada fue precisar y garantizar la subordinación de la institución castrense al poder civil y revertir la desproporcionada injerencia de los militares en la sociedad...” (Martínez Peñate, 1997: 16). Dentro de los puntos principales que se tomaron en cuenta para esta reforma a la Fuerza Armada fue el cese al fuego que consistía en que la FAES y el FMLN no podrían atacar de ninguna forma ni por aire, ni por mar, ni por tierra, además de ello se creó la ONUSAL para verificar que todo estuviera en orden y que no se dieran los enfrentamientos armados, para evitar precisamente estos enfrentamientos se da la separación de fuerzas que consistió en la concentración de la guerrilla y de la FAES en diferentes lugares para evitar que se dieran enfrentamientos armados y facilitar la verificación por parte de la ONUSAL.
El fin de la estructura militar del FMLN y su reincorporación a la vida civil y política del país con la cual se da la verificación de las Naciones Unidas, paralelamente ONUSAL aumentó su personal militar y civil para verificar el cumplimiento de los Acuerdos, la cual podrá movilizarse libremente por todo el territorio nacional.
“…Según la Constitución Política de El Salvador, la Fuerza Armada es obediente a las autoridades constitucionales y a la voluntad soberana del pueblo. Profesional, porque deben prepararse en el arte y técnicas militares y realizar estudios científicos y humanísticos que le eduquen para desenvolverse dentro de la sociedad civil, respetando los valores democráticos. Apolítica, porque debe ser imparcial, no
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