La historiografía se dirige hacia el estudio de temas específicos o de periodos
Enviado por tomas • 3 de Abril de 2018 • 978 Palabras (4 Páginas) • 373 Visitas
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Las regiones
Nadie pone en duda los aportes de la historia regional al conocimiento histórico en la educación, ha permitido llegar a profundidades, abordar problemas cuya comprensión requiere micro escenarios en cada región. Al contar con todos los hechos históricos en diferentes regiones no se nos asegura que se obtenga una visión global de la historia, ni resuelve acertijos.
Fuentes
Debido a todos aquellos objetos de estudio en la historiografía de la educación, y a querer dar un sustento más científico y profesional, provoco que los historiadores buscaran y usaran nuevas fuentes. Cada día hay más trabajos de investigación, los cuales son sustentados en fuentes primarias en archivos antes inaccesibles, ahora ya es posible a acceder a ellos gracias a los acervos personales e institucionales
Los paradigmas teóricos
La historiografía de la educación en México estuvo influida por los análisis y categorías de otras áreas del conocimiento social. Los sociólogos, filósofos, pedagogos y hasta políticos. Los historiadores con frecuencia acuden a paradigmas de disciplinas vecinas a la suya, y buscan elementos de análisis e interpretación.
En sus orígenes, el estudio histórico de la educación en México se alimentó de los métodos y reflexiones de la sociología educativa. El pensamiento marxista fue el que mayor repercusión tuvo, su principal interlocutor fue la historiografía oficial, signada por una retórica triunfalista.
Resulta difícil evaluar hoy, una vez caídos los héroes y derrumbados los muros, los aportes y las limitaciones de los estudios enunciados, a los que se podrían agregar una larga lista de artículos, libros y ensayos.
Las nuevas orientaciones
En el transcurso de los años ochenta, la historiografía mexicanista de la educación se fue independizando con respecto a la sociología educativa y los esquemas de análisis políticos y entro al círculo de la llamada nueva historia, que proponía como objeto de estudio, metodologías y formas de escritura del quehacer historiográfico.
Los últimos años de la década de los ochenta marcan el inicio de una doble crisis en la historiografía de la educación. Por un lado, el derrumbe de los paradigmas teóricos dominantes hiso que los historiadores buscaran nuevas herramientas conceptuales y metodológicas y por otro la fragmentación del campo y el encuentro con múltiples objetos de estudio, no vinculados con la institución escolar, los condujo hacia otras áreas del conocimiento histórico.
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