Los dos modelos: el relacional y e institucional

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Pero esa dialéctica "finalista" venía a resultar, en última instancia, no otra cosa que un fundamentalismo, ideología que no se circunscribe, como simplistamente puede suponerse, al islámico, sino que tiene manifestaciones en otras creencias, ideologías o religiones, como el propio cristianismo o el judaísmo, a inclusive la tecnología. Por acá hasta tenemos algunos exponentes del fundamentalismo de mercado. En fin, estos modernos fundamentalismos tienen en común con el marxismo la idea de que en última instancia va a haber un final feliz. Es decir que la lucha que se da en estos modelos dialécticos tendría una síntesis final, que sería un mañana venturoso.

Frente a esa probadamente errónea interpretación de la dialéctica, tenemos a la historia, que ha demostrado hasta el cansancio que a todo avance, a todo progreso, se va a oponer una regresión compensatoria. Y esto vuelve a demostrarse en estos mismos momentos en Europa, en los Balcanes, con los trágicos enfrentamientos que han llevado a decir a un filósofo francés, que "en la ruta a Maastricht está Sarajevo", es decir que esa Europa que ya estaba hablando el lenguaje de la unidad política, se encuentra de pronto en su marcha con los horrores de lo que está sucediendo en estos momentos en la ex Yugoslavia.

Con esta introducción queda claro que nosotros no pretendemos sostener que tal o cual modelo va a triunfar sobre el otro. Ni decimos que todo es conflicto, que todo es pura relación de fuerzas, como sería la resultante de aplicar el modelo relacional, ni tampoco caemos en la ingenuidad de creer que el modelo institucional va a crear el gran Estado mundial en el cual reine la paz universal.

Y esto, por otra parte, viene a confirmar que nadie puede determinar "el fin de la historia", porque el conflicto y la unidad son inseparables en la sociedad, en el ser humano, en la pareja, en la nación, y obviamente en las relaciones internacionales: siempre va a existir el conflicto y siempre va a ir acompañado de procesos de unidad política. Inclusive tenemos a Latinoamérica, que tres lustros atrás estaba gobernada por estructuras no democráticas Hoy en cambio ostenta en su casi totalidad estructuras democráticas en el poder.

Con lo cual estoy diciendo también que mi exposición no va a desembocar en un final determinado. No. Dependerá de ustedes; será una conclusión de cada uno determinar si la sociedad internacional va hacia la instalación de uno u otro modelo, o si sobrevivirán los dos y en qué medida. En esta lucha dialéctica obviamente un modelo, el relacional, el clásico, el predominante, va a tratar de persistir, en tanto el modelo institucional procurará a su vez imponerse.

¿Y cómo se produce esta lucha dialéctica que tanto influye en el derecho internacional? Comencemos por decir que el derecho internacional, producto del modelo clásico, se plasma en normas. Por ejemplo, cuando nos referimos a la dispersión del poder estamos diciendo que solamente el Estado era el gran sujeto en el derecho internacional. De lo que se desprende que el individuo estaba desprotegido, contando solamente con la protección diplomática del Estado que se la otorgaba; además si quería, ya que no estaba obligado.

3. Un factor nuevo y decisivo: los organismos internacionales

Pero surgen otros factores en el siglo XX; el primero de los cuales está constituido por los organismos internacionales, que conforman en gran medida esto que llamamos modelo institucional y con él crece el valor del individuo, que antes era solo objeto mediato del derecho internacional y que ahora en cambio tiene un gran papel que se manifiesta en dos aspectos: en especial con las normas sobre derechos humanos.

Por la Convención de San José de Costa Rica y por la Convención Europea de los Derechos del Hombre, en ciertas circunstancias y cumpliendo ciertas normas el individuo puede tener un papel en cierta forma central. Inclusive más. Nuestro país ratifica la Convención de San José de Costa Rica y la competencia obligatoria de la Corte, de forma que en determinados casos vinculados con los derechos humanos esa Corte se halla por encima aun de nuestra Corte Suprema de Justicia.

Es decir que el individuo pasa a jugar un papel central. Pero hay otro aspecto en el cual el individuo cumple un papel fundamental. Y es el caso de los funcionarios internacionales, ejemplificado concretamente en el del Secretario General de las Naciones Unidas, y también, luego de la última reforma de la Carta de la OEA, en el del Secretario General de este organismo.

Y esto es así porque el hombre elegido de común acuerdo por todos los integrantes de las Naciones Unidas para cubrir ese cargo cumple funciones políticas. No es ya el Secretario que simplemente desarrollaba tareas administrativas: es el papel político del Secretario General. Función política que tiene un valor extraordinario, a pesar de que su fuerza, su poder, está muy lejos de ser absoluto, y por el contrario se halla enormemente condicionado, pero que sin embargo no pocas veces se materializa en la práctica. Por ejemplo, cuando el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas está bloqueado, como sucedía durante la Guerra Fría, el Secretario General es el que puede destrabarlo; todo ello sin contar otras funciones de mediación, de buenos oficios, etc. Es decir que el ser humano, el hombre, pasa a tener un papel fundamental en el derecho internacional, cosa que no había existido hasta el nacimiento de las Naciones Unidas.

Corresponde ocuparnos ahora de un novedoso sujeto de derecho internacional, que todos nosotros hemos visto nacer y del cual tampoco lamentablemente parecen ocuparse los autores que escriben sobre estas cuestiones. Nos referimos a las ONG, las Organizaciones No Gubernamentales, cuyo accionar es ya noticia diaria. Como la reunión de la Cuarta Conferencia Anual de las Naciones Unidas sobre la Mujer, considerado el mayor encuentro femenino en la historia; el Foro de Organizaciones No Gubernamentales. Y hay más: la protesta de decenas de militantes que pujan por impedir los ensayos atómicos franceses.

La presencia de las ONG a nivel internacional se va tornando masiva, en cuanto van generándose nuevos organismos en todos los países del orbe, fortaleciéndose la idea de que estamos ante una nueva sociedad civil internacional emergente, hecho que se corresponde en ese nivel con el fortalecimiento de la sociedad civil en el ámbito nacional.

Otras demostraciones del crecimiento y la fuerza que están alcanzando las ONG han sido su presencia masiva en la cumbre sobre el Medio Ambiente y Desarrollo, realizada en Río de Janeiro en junio de 1992, y en especial