PROCESO DE ORGANIZACIÓN INSTITUCIONAL DE LOS ESTADOS NORTEAMERICANOS

...

Al finalizar la Guerra de la Independencia entre las Trece Colonias británicas originales en América del Norte contra el Reino de Gran Bretaña, los problemas económicos y políticos comenzaron a presentarse para la confederación. La misma disolución del ejército genero deficiencias financieras y a pesar de que el Congreso (en 1781) pidió una contribución a los Estados para poder solucionar sus problemas económicos, estos en 1784 habían contribuido con solo un séptimo del total necesario. Ese mismo año el Congreso se vio obligado a endeudarse con los Países Bajos para poder pagarle al ejército. A partir de 1780 los créditos y los subsidios europeos eran el verdadero medio de financiación de la revolución y el comercio, por lo que la Confederación se endeudaba vertiginosamente. Durante los años de la Guerra de Independencia algunos países de Europa pusieron a disposición, entre todos, aproximadamente once millones de dólares para la Confederación.

También en el ámbito político los Estados estaban viviendo un periodo problemático ya que el proyecto de Dickinson para los artículos expresaba que la contribución a los gastos de la Confederación fuese proporcional a la población, incluyendo los esclavos, pero los Estados del sur se negaron rotundamente a optar por esta medida. Por esto la fórmula adoptada sería la de tomar como base de la aportación el valor a la tierra; y aunque hubo estados que al comienzo se negaron, ésta termino por ser la decisión final.

Debido a la falta activa del comercio, sin la cual el Congreso no podían pagar sus deudas la situación seguía empeorando. Los Estados Unidos importaban mucho más de lo que exportaban por lo que les era prácticamente imposible poder obtener un margen de ganancia en su mercado interno. A pesar de que la producción de su industria de acero carecía, esta lo hacía muy lento como para poder pagar las deudas, y por el contrario iban en aumento. Todo esto culminó ese mismo año (1784) dando inicio a la primera gran depresión de los Estados norteamericanos, que duró aproximadamente cuatro años. Los Estados trataron de solucionar sus problemas económicos a través de diferentes medidas, como la nueva emisión de papel moneda y una fuerte política fiscal restrictiva. Las leyes tributarias eran sumamente estrictas y casi imposibles de pagar para muchos ciudadanos; en Estados como Massachusetts nueve de cada diez personas en prisión eran deudores. La crisis se extendió por toda la población, en cientos de haciendas campesinas se llevó a cabo la subasta forzosa y esto dio origen a algunos grupos rebeldes que empeoraban la situación para toda la sociedad. Unos años después, durante la presidencia de George Washington se llevaron a cabo una serie de políticas proteccionistas que le permitieron a los Estados Unidos poder salir del periodo de depresión.

En 1787 se dictó una Nueva Constitución de los Estados Unidos de América. Esta establecía una concepción popular de la soberanía que se encuentra en el pueblo de la Nación, en contraposición del modelo de la Confederación en el cual la soberanía recaía en los Estados, y por eso no había una verdadera representación Nacional, ya que como dice Patrick Henry, los que la constituían eran algo tan abstracto como “representantes de representantes”.

Antes de 1787, como explica Morgan, nadie parece haber señalado que la respuesta podía ser crear una cámara nacional de representantes popularmente elegidos, debido a que había un predominio de la visión local del sujeto. En la Convención constituyente de 1787 fue llevada a cabo para resolver los problemas de gobierno de Estados Unidos, que había estado funcionando conforme a los Artículos de la Confederación después de su independencia de Gran Bretaña. Aunque la idea de la Convención era solamente revisar los Artículos de la Confederación, la intención de James Madison y otros proponentes, era el crear un nuevo gobierno en lugar de modificar el que ya existía. Los delegados eligieron a Washington para que presidiera la convención. El resultado de la Convención fue la Constitución de los Estados Unidos de América. Este hecho es uno de los eventos centrales en la historia de los Estados Unidos. Es muy posible que ni siquiera el propio Madison hubiera predicho el resultado de esa Convención, y como en un momento la Cámara de los Comunes inglesa había inventado un pueblo soberano para derrotar la soberanía del Rey; Madison estaba inventando una soberanía del pueblo estadounidense para superar la soberanía de los Estados, y al final, eso fue lo que sucedió y se pactó en la Constitución.

Como conclusión podemos decir que este periodo de los Estados Unidos de norteamericana cambio la forma moderna de los gobiernos. Este fue el primer país del mundo con una Constitución Nacional en la que el pueblo era soberano, con una forma de gobierno no vinculante y con una representación expresa, ya que como dijo Patrick Henry: “La representación en el Gobierno Nacional seria necesariamente nominal, ya que si no sería la misma representación virtual que Inglaterra había ofrecido a las colonias”. Esta nueva Constitución Nacional dio origen a un nuevo mundo para la política mundial.