Portobelo vibraba alrededor del comercio.

...

- La Naturaleza

Ha sido extraordinaria y prodigiosa con Portobelo. Una amplia bahía y ensenadas en una costa irregular, bordeada por extensa playa con rica vegetación tropical, son otros atractivos que cuenta la localidad. El propio paisaje cautiva a propios y extraños. De la propia naturaleza se han sustraído conchas, caracoles, coral, maderas, hojas, semillas, coco, piedras para confeccionar sus muestras artesanales.

Ruinas de Portobelo

[pic 9]

[pic 10]

[pic 11]

[pic 12]

Armas

[pic 13]

[pic 14]

Ser humano y naturaleza: un reto desafiante

La colonización supuso el uso excesivo de los recursos que ofrece la naturaleza para la vida. De la explotación de bosques, riveras y mares se obtenían los productos para la construcción de casas, los útiles domésticos y la alimentación. Hasta para las fortalezas se extrajeron estos recursos al ser construidas de bosques de coral.

La desforestación de los bosques original fue enorme, tanto para como cultivar el sueño como para facilitar el tránsito. La nueva colonización de finales del siglo XX extendió aún más la tala.

Pero, como si estuviera dolida por sus heridas, la naturaleza se ha revelado.

La vegetación amenaza con devorar a las fortalezas, los ríos more, claro y cascajal acarrean tierras erosionadas que llenan la había y algunos castillos se resquebrajan por la fuerza de las olas y las mareas.

También el mar y la tierra se enfrentan entre sí por su protagonismo. Los ataques de los piratas, por más o tierra, competían en ferocidad. Hasta la cultura, por medio de los congós, expresa muy bien las diferencias entre la costa, en donde se celebran los rituales, y la selva, el límite desconocido que nunca se debía sobrepasar.

La vida marina

La había de portobelo tiene forma de herradura, son casi dos kilómetros de ancho. Además de su belleza paisajística existe una diversa vida marina subyace bajo sus aguas y formada por coloridos peces, tortugas, corales, algas y demás criaturas de mar, constituyendo tanto por abundancia, diversidad y belleza, en potenciales para el desarrollo económico y la explotación turísticas.

La piedra coralina de portobelo, era usada para construcción de sus fuentes, muros, puentes y paredes de viviendas, pero es en La Real Aduana, donde en sus esbeltas columnas estilo toscano, este material adquiere forma extraordinaria y hermosa. Basta pensar el trabajo curioso del artesano para realizar su faena de tallado.

Un rico mestizaje de razas y culturas

[pic 15]

La mezcla inicial de africanos y europeos se ha ido enriqueciendo con inmigrantes de otros países y de las provincias centrales de panamá, los llamados interioranos.

El mestizaje también se manifiesta en la cultura, y la de portobelo es rica y compleja. Los ritos y creencias son diferentes a lo de otras zonas rurales de panamá.

El ritual Congo es de la tradición de la cultura afro-panameña que refleja las adaptaciones de los esclavos a su nuevo ambiente de selva y costa.

Es un auténtico teatro popular en la naturaleza. Durante la extracción seca la población negra refuerza su identidad con una manifestación delirante de canciones, danzas y representaciones de papeles.

Entre lo pagano y lo religioso, cada 21 de octubre se celebra una de las mayores peregrinaciones de panamá, que venera al cristo negro en la iglesia San Felipe de Portobelo. Atraídos por los milagros que se atribuyen a Jesús nazareno, una multitud de devotos manifiestan la fe del pueblo y estremecen cada año, la tranquila vida del pueblo costeño.

Arqueología

[pic 16]

La provincia de Colon, se articula dentro del contexto arqueológico llamado GRAN DARIEN y curiosamente es talvez la zona menos explotada en panamá; sin embargo gracias a las crónicas conocemos sobre vestimenta, ornamentos, alimentación, demografía y lenguaje al que los europeos lo denominaron como cueva.

“Los indios ejecutaban una operación de sangrado, hacen sentar al enfermo sobre una piedra que está en el rio, enseguida el operador armado de un arco pequeño y cortas flechas las tira tan ligero como puede por todo el cuerpo desnudo del pariente sin omitir un solo punto”

Una población de esclavos africanos que lograron su libertad

La fuerza de trabajo de los esclavos, mano de obra barata, era usada para realizar las más duras tareas. Construyeron el camino real que comunicaba con la ciudad de panamá y cargaban por estas rutas las riquezas del comercio entre España y américa. También las fortalezas de portobelo fueron por las manos de los esclavos.

Con estas condiciones de vida, la rebeldía no se hizo esperar desde el principio hubo fugitivos que escapaban solos a los bosques próximos.

Los cimarrones o en grupos, formando poblados fortificados