“Rostro y corazón”: Punto de partida del concepto Náhuatl de la educación

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Como se mostro en los párrafos anteriores la diferencia de la educación entre nobles y plebeyos era la rigidez con la que se formaban, para obtener una mejor posición y privilegios en su vida adulta; pues se decía que merecían esta posición por haber sido educados en el rigor de los nobles y no en la ligereza de los plebeyos.

Una pregunta predominante que preexiste en la cultura náhuatl es que si existía un concepto claro sobre lo que hoy conocemos como educación. Su definición se tomaba como una concepción de carácter abstracto.

Los tlamatinime eran los sabios nahuas; los textos se recopilaban de los testimonios de sus huehuetlatolli “platica de viejos”.

“Rostro y corazón”: Punto de partida del concepto Náhuatl de la educación

Al tomarle la palabra aquel con quien se está hablando aparece una expresión “vuestro rostro, vuestro corazón” esto se hacía debido a las reglas del tecpilatolli “lengua noble o cultivado”.

In ixli in yóllotl “la cara, el corazón”, lo que hoy es para la humanidad fisonomía moral. Se concebía la fisonomía moral, como un prósopon o rostro solo que los náhuatl tomaban el rostro como el corazón.

Ideales de la educación

El hombre maduro era característico por ser “dueño de un rostro y un corazón”, de no ser así debía ocultar su rostro y amortajar su corazón, estos aspectos calificaba al hombre maduro que había recibió la educación.

“Ixtlamachiliztli”: acción de dar sabiduría a los rostros ajenos

Los maestros eran quienes les daban un rostro, los instruían, los guiaban, abrían los oídos, los iluminaban, el maestro era toda la verdad. Gracias a él humanizan su querer y reciben una estricta enseñanza. Entre los maestros náhuatl temachtiani había dos clases, los primeros que eran los que hacían que los educandos tomaran un rostro y lo volvieran sabio y los segundos que eran los que humanizaban el corazón de la gente y hacia fuertes corazones.

Los términos náhuatl más relevantes citados en el texto son temachtiani el que a los otros una cara hace tomar, teixtlamachtiani que significa el que hace sabio el rostro de los otros, tetezcahuiani que representa que a los otros pone un espejo adelante, netlacaneco que simboliza gracias a el se humaniza el querer de la gente y por último tlayolpachivitia que denota aquel que hace fuerte los corazones. Los anteriormente presentados son los cinco atributos que caracterizaban a un maestro náhuatl.

La educación se concebía como la acción de dar sabiduría, prudencia y cordura a los rostros ajenos, mediante la enseñanza de darles a conocer cómo deben vivir, obedecer a las personas, respetarlas, entregarse a lo correcto y como evitar lo no recto y saber cómo huir con fuerza y perseverancia.

Algunas creaciones de cultura espiritual

¿Qué era lo que se impartía a los estudiantes? con claridad se puede notar que su educación predominaba en dar sabiduría a los rostros ajenos y en la transmisión de la sabiduría. El conceptos clave para comprender mejor la educación de los nahuas es la resonancia que alcanzo esta idea en los variados ordenes de la vida de los nahuas, por ejemplo se decía que para llegar a una dignidad tan elevada como lo era el sacerdote Quetzalcóatl se necesitaba poseer un rostro sabio y un corazón firme.

El modo de formar “Rostros sabios y corazones firmes”

Había reglamentos en los cuales se señalaba que era lo que se les enseñaba y como se llevaba a cabo. Se llevaba a cabo mediante una serie de prácticas exteriores como ir a traer a cuestas la leña, barrer los patios, ir a buscar puntas de maguey, entre otras, dirigidas a desarrollar el sentido de la obligación y responsabilidades; de esta manera se iba dando firmeza a la voluntad (corazón). En cuanto a la enseñanza propiamente se les adiestraban los cantares divinos, la cuenta de los días, el libro de los sueños y el libro de los años.

Actuación de los maestros de la palabra en los calmécac

Los maestros eran sacerdotes, poetas, sabios y autores de discursos empeñados para dominar el arte de expresar el pensamiento y abrir el camino a la comprensión.

Se creó la icniúhyotlque que era una fraternidad de sabios y poetas que se reunían para dar a conocer sus ideas, composiciones y discursos. Había dos formas de lenguaje el macehuallatolli que era la forma de hablar del pueblo y el tecpillatollique era la expresión cuidadosa de los sabios y poetas, este último se enseñaba en los calmécac. Se enseñaba a hablar de acuerdo a su rango, al igual que les enseñaban cantos divinos; había también maestros conservadores que eran los que se encargaban de enseñar los cantos divinos nombrados “tlapizcatzitzin” y se decía que los maestros que no podían expresarse no podían educar.

Educación abierta a todos

En el mundo náhuatl prehispánico no había ser que fuese privado de recibir educación, desde el momento en que nacían eran llevados al calmécac para volverse curas o al telpochcalli para que fueran unos guerreros. Llevar a los hijos a recibir educación era un factor indispensable para tener una posición dentro de la comunidad.

Como lo menciona Miguel león Portilla la educación es “la expresión de una voluntad altísima mediante la cual esculpe su destino”.

En la cultura náhuatl aun no se sabe si se tuvo una definición clara de lo que es educación

Según Alfredo López Austin la educación formal es el proceso sistematico, complejo y riguroso por medio del cual las sociedades preparan a sus niños y jóvenes para el desempeño en la vida adulta.