Análisis de Películas Los olvidados - Ciudad de Dios

...

Otro ejemplo muy claro para el diagnóstico de estos trastornos, es de “El jaibo” en Los olvidados. Un joven quien ejerce cierta influencia sobre su grupo, ya que es él quien dirige y da órdenes a los niños para que lleven a cabo los robos y asaltos. En la película se comentó que El Jaibo había escapado de la correccional, siempre está en la calle, es agresivo con quien se meta con él, es deshonesto y siempre trata de sacar provecho del liderazgo que tiene en el grupo. Un suceso importante fue cuando El Jaibo, enojado, lanzo un piedra a la cabeza y golpeo agresivamente con una tabla a Julián, la persona a quien acusa de traición por meterlo a la correccional, uno de sus amigos llamado Pedro logró detenerlo e hizo que se fueran del lugar antes de que alguien llegara, pensando que solo lo había dejado inconsciente, hasta que más adelante se enteraron de que lo había matado, y amenazo a Pedro de no decirle a nadie, pero al final, Jaibo lo mata por su traición. Estas conductas lo llevan al trastorno antisocial de la personalidad por su edad, y aunque no pasaron alguna escena donde se pueda mostrar que cosas habrá pasado a través de sus etapas del desarrollo, se puede inferir que cuando era menor de edad, es posible que se haya encontrado en un ambiente violento y con carencia de afecto, siendo así la razón por la que se comporta de esta forma, porque al no haber experimentado lo que es la empatía, el respeto y el amor, lleva a su inconsciente a que se comporte agresivo hacia los demás, el controlar a su beneficio y sin tener remordimiento alguno ante esas acciones.

El trastorno disocial y antisocial de la personalidad se ve muy claramente en ambas películas. No solo es en los personajes de Jaibo y Dadinho, sino que el resto de los personajes de alguna forma también lo presentan. Otro personaje interesante en la película de Los Olvidados es la de Pedro. Como se mencionó, el fue testigo del asesinato de Julián por el Jaibo, y antes de que todo esto pasara, el formaba parte del grupo y realizaba junto a los demás niños los robos planeados por el Jaibo. El se pasa la mayoría del tiempo en la calle, ya que la relación con su madre era muy difícil: le rechaza la comida, le reprocha todo y no acepta los gestos de amor por parte de su hijo. El ambiente hostil y la carencia de afecto por parte de la madre es lo que lleva a que Pedro realice tales actos inadecuados. Sin embargo, sin importar el fuerte rechazo por parte de su madre, el trata de alguna forma buscar desesperadamente el amor de su madre. El cumple con los criterios para ser diagnosticado con el trastorno disocial de la personalidad, sin embargo, después de presenciar el suceso que realizo el Jaibo, se muestra el intento de encontrar un “mejor camino”, incluso el menciona que “quiere comportarse bien” pero que “no puede”. Pedro es una prueba de que la verdadera miseria puede implicar la delincuencia, a pesar de que en su interior sea un buen niño, además de que hace desaparecer los valores fundamentales para el equilibrio del niño.

Otros personajes son el pequeño grupo de niños (entre 4 a 12 años) en Ciudad de Dios que ya realizaban actos delictivos: robaban, golpeaban a otros niños, ya empezaban a probar las drogas y utilizaban armas de fuego, ellos ya pueden juntar los criterios del trastorno disocial y conforme crezcan, estos comportamientos empeoraran y llegaran al punto de ser los siguientes “Zé pequeños” de Brasil.

Una prueba más sobre como el ambiente influye significativamente en el desarrollo del niño es en Buscapé, el niño fotógrafo de Ciudad de Dios. El siempre vivió en ese mismo ambiente lleno de violencia, donde las armas y el poder demostraban ser lo más importante a su alrededor. Sin embargo, la única diferencia entre los demás niños y el, es que se mantuvo en un ambiente donde los padres estaban presentes y a pesar de no mostrar como fue el trato de sus padres, podría inferir que de alguna forma fue benéfica para el desarrollo de Buscapé, ya que no siguió el mismo sueño que los demás niños. El observaba como los niños duros se desenvolvían violentamente y el deseo de la mayoría de esos niños es el de ser alguien con poder, mientras que él era tímido y trataba de sobrevivir y luchar para poder ser un fotógrafo.

Conclusión

En base a todo lo descrito anteriormente, está más que demostrado que el ambiente en el que nos desenvolvemos es el principal factor por el que tenemos nuestro comportamiento. En los personajes mencionados, todos se encuentran en un ambiente violento, a pesar de ser diferentes épocas, la violencia es similar, con la única diferencia de como lo llevan a cabo. Los comportamientos de los personajes juntan los criterios para el trastorno disocial y antisocial de la personalidad y para dar ese diagnóstico, es importante ver el problema desde sus inicios, desde el ambiente y las condiciones en que vivieron todos ellos. Paulina Kernberg, mencionó en su libro “Trastorno de personalidad en niños y adolescentes” que un estudio ha identificado que aquellos pacientes con trastorno antisocial de la personalidad son aquellos que han sido antisociales desde una temprana edad, es decir, que para el criterio para el trastorno antisocial corresponde a un trastorno disocial de niños.

Es más que evidente que la educación no es igual en todos lados, cada cultura le da más importancia a unos valores que a otros, las creencias también son distintos y el entorno es el principal factor del comportamiento de todos estos niños y adolescentes, ya que se mueven en un ambiente en donde las armas, el mal trato y la venganza es la solución a sus problemas. Los niños desde pequeños conviven con esta realidad y es sorprendente el cómo ven que su comportamiento es algo normal, aunque para nosotros sea algo impensable. También, es importante resaltar la ausencia de los padres de esos niños, ya que sin tener una figura paternal, no hay quien les brinde el afecto, el amor y los valores positivos que a esos niños les hace falta para poder ser funcionales dentro de una sociedad moralista. Esto se demuestra en Buscapé, quien tuvo la oportunidad de experimentarlo y el como a pesar de estar en un ambiente violento, hizo su esfuerzo para trabajar en distintos lugares para poder juntar dinero y poder comprar una cámara profesional y llegar a ser un fotógrafo y ser una persona libre.

Bibliografía

Kernberg, P. 2001. Trastornos de personalidad en niños y adolescentes. Manual Moderno.