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DISCRIMINACIÓN SOCIAL DE LAS PERSONAS ENVEJECIENTES

Enviado por   •  9 de Abril de 2018  •  5.865 Palabras (24 Páginas)  •  413 Visitas

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En esta etapa se cierra un ciclo de vida finalizándola con la muerte, pocos tienen la dicha de tener la ayuda de seres queridos, pero desafortunadamente la gran mayoría la termina en el abandono total o recluidos en un asilo, para concreta, la ancianidad es una etapa donde la experiencia y los años de toda una vida puede llevar a la realización personal, a la marginación, desesperanza o a la decepción.

La vejez vista en la actualidad

Los estereotipos negativos sobre los ancianos reflejan un prejuicio o discriminación con base en la edad. En la actualidad, muchas personas de edad avanzada son saludables, vigorosas y activas, las personas pueden referirse a ellas como el viejo “joven”, y al débil y enfermo como el viejo “viejo”.

Las actitudes negativas hacia los ancianos afectan los sentimientos de las personas de mayor edad sobre sí mismo, como también el tratamiento de la sociedad hacia ellos.La senectud, el periodo de la vida marcado por cambios físicos asociados con el envejecimiento, comienza a edades diferentes para distintas personas.

Cambios físicos en la vejez

Hay Extensas diferencias individuales en la cronología y alcance de los cambios durante la edad adulta tardía en las capacidades de percepción y sensitivas. Los problemas de la división son los más comunes.

Las personas de edad avanzada experimentan un debilitamiento general de las respuestas y del procesamiento de información. Este retardo les exige hacer ajustes de muchos aspectos de su vida. El entrenamiento parece ser útil.

Aunque el cerebro cambia con la edad, el de una persona saludable de mayor edad es muy parecido al de una persona saludable más joven.

La mayoría de los sistemas del cuerpo generalmente continua funcionando bastante bien, pero el corazón, en particular, se vuelve más susceptible a las enfermedades a causa de su eficiencia disminuida. La capacidad de reserva del corazón y de los otros órganos desciende.

La salud en la vejez

La mayoría de las personas de edad avanzadas son saludables, en especial si siguen un estilo de vida sana, incorporando ejercicio y alimentación apropiada. Pero la incidencia de la enfermedad y el número de días de hospitalización son proporcionalmente más alto entre las personas de edad avanzada, que entre las más jóvenes. Muchas personas de edad avanzada no están impedidas por condiciones crónicas, si bien la mayoría tienen una o más.

La pérdida de dientes y los problemas de encías son comunes en la edad adulta tardía, sobre todo cuando el cuidado dental ha sido inadecuado. Muy pocas personas conservan todos sus dientes hasta bien avanzada edad.

La mayoría de las personas de edad avanzada tienen buena salud mental. La demencia, o el deterioro intelectual, afectan a una minoría de estas personas.Algunas formas de demencia, como las ocasionadas por sobre medicación y depresión, pueden revertirse mediante tratamiento apropiado; otras, como las producidas por la enfermedad Alzheimer o por ataques de apoplejía, son irreversibles.

La confusión, el olvido y los cambiaos de personalidad a veces asociados con la vejez a menudo tiene causa fisiológicas. El término general para denominar este deterioro intelectual evidente es demencia. La palabra senilidad, usada para describir la demencia de las personas de edad avanzada, no es un verdadero diagnósticomédico, sino un término “de cajón” para una amplia gama de síntomas.

Contrario a otros estereotipos, la demencia no es una parte inevitable del envejecimiento. La mayoría de las personas de edad avanzada tienen buena salud mental. La pérdida moderada de memoria no es necesariamente una señal de demencia. (Cuando las personas más jóvenes no pueden recordar algo, encogen sus hombros; cuando las de edades avanzadas olvidan algo, pueden alarmarse, atribuyendo el simple olvido a la “Senilidad”.) Aun si una persona padece demencia, el tratamiento puede ser capaz de revertirla.

La depresión

Muchas personas de edad avanzada sufren de diversas aflicciones más o menos molestas; han perdido a su cónyuge, hermanos, amigos, y a veces a los hijos; toman medicinas que alteran la disposición de ánimo, y sienten que no tienen ningún control sobre sus vidas. Cualquiera de estos factores puede hacer que estas personas de cualquier edad se depriman. Un estimado del 10 % de personas ancianas que viven en la comunidad muestran algunos signos de depresión (Blazer, 1989).

Los signos de depresión son los mismos en la vejez y en etapas más tempranas de la vida; extrema tristeza, carencia de interés o disfrute en la vida, pérdida de peso, insomnio, agotamiento, sentimiento de inutilidad o inapropiada culpabilidad, pérdida de memoria, incapacidad para concentrarse, y pensamientos de muerte o suicidio (Blazer, 1989).

Las redes de apoyo de la familia y los amigos pueden ayudar a los ancianos a deshacerse de la depresión o a encontrar ayuda para disiparla. También puede obtenerse ayuda mediante drogas antidepresivas, psicoterapia o diversos servicios médicos comunitario.

Enfermedad de Alzheimer

Es un desorden degenerativo del cerebro que despoja de forma gradual la inteligencia y la conciencia de las personas, su capacidad para controlar las funciones corporales y finalmente, los mata.

La mayoría de las personas de edad avanzada no sufren de esta enfermedad. No obstante, es la forma más frecuente y más temida de demencia irreversible. La investigación extensiva y la atención de los medios de comunicación a esta enfermedad en años recientes contribuyen al temor que tienen tantas personas de edad intermedia y ancianas a sucumbir a ella.

Aunque la enfermedad de Alzheimer en ocasiones se presenta en la edad adulta intermedia, la mayoría de las víctimas tienen más de 65 años; la estimación de su preponderancia varia del 2 al 10 % de todas las personas de más de 65 años y de cerca del 13 al 50 % de las personas de 85 años o más (D. A. Evans et, al., 1989; Folstein, Bassett, Antony, Romanoski, y Nestadt, 1991; Skoog, Nilsson, Palmertz, Andreasson y Svanborg, 1993).

Formulación del problema

Se presentan las siguientes interrogantes:

- ¿Cómo es vista la vejez en la actualidad?

- ¿Cómo impacta la discriminación a los envejecientes, tanto a nivel físico como

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