Métodos de Evaluación en las Neurociencias

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Método de lesión

Este método ha prevalecido en todas las etapas históricas ya que se basa en la lesión cerebral para encontrar la relación en la conducta utilizando los modelos de redes en la región del daño cerebral. Se provocan lesiones de prueba que permiten investigar si afectan o no al comportamiento y teniendo como objetivo del método predecir el patrón de alteración en algún aspecto de una ejecución cognitiva o conductual dependiendo el sitio de las lesiones y a la inversa, predecir el sitio de la lesión mediante la sintomatología clínica apoyándose en análisis estadísticos y anteponiendo 5 puntos propuestos por Kertesz (1983)

1. El mismo déficit funcional siempre sigue a la lesión.

2. El mismo déficit no es producido por otras lesiones independientes.

3. El déficit es medido por métodos estandarizados y significativos.

4. La localización de la lesión es determinada con objetividad y exactitud.

5. Variables biológicas, tales como el tiempo de inicio, la edad, etiología y otras, son controladas.

La gran limitación que encuentra este método tiene que ver con lo ético, ya que no se pueden crear lesiones en humanos para la experimentación, por lo tanto se trabaja con mamíferos animales que puedan tener una similitud pero teniendo en cuenta que los resultados pueden variar en humanos.

Método psicométrico

Este método tiene una gran aportación a las neurociencias cognitivas y a la neuropsicología, ya que las pruebas o test psicométricos que normalmente eran utilizadas para medir la inteligencia o el reclutamiento de personal, ya son parte integral de la clínica ayudando a discernir en el hecho de porque un paciente presenta dificultades al realizar una tarea y no centrarse en si la logra realizar o no.

A la llegada de las pruebas estandarizadas se comenzó a trabajar en grupos y a realizar análisis estadísticos que permitían determinar el rendimiento de una tarea con una normativa o línea base, logrando diseñar pruebas y test tan importantes como “aproximación del test singular”, “test-especificación” logrando ya aplicar pruebas automatizadas con una ventaja de ahorro de tiempo.

Estudios de Grupo y Estudios de Caso

Estos dos estudios tienen grandes aportaciones y han sido de gran ayuda para los avances de la neuropsicología, aunque cada uno tiene sus ventajas y desventajas es conveniente que se puedan emplear ambos, es decir cuando estamos hablando de una enfermedad o trastorno muy raro seria muy complicado poder tener un grupo de personas con las mismas características para su investigación, pero por otra parte si se manejan grupos y en especial si cuantiosos es muy probable que se pierdan datos específicos como los podría proporcionar un solo sujeto con respecto a su sintomatología.

La evaluación neuropsicológica

Es un proceso que se orienta a determinar el estado cognitivo y afectivo-conductual de un sujeto, empleando instrumentos específicos como son los modelos teóricos, test, entrevistas, cuestionarios y escalas, que provienen de diferentes áreas de la psicología y neuropsicología. Esto se lleva a cabo en un contexto clínico, médico-legal y de investigación.

Estas pruebas pueden ser realizadas tanto a sujetos que padecen una enfermedad o un daño neurológico, o a las que padecen algún trastorno o patología psiquiátrica.

Incluye la exploración de capacidades o funciones cognitivas ( atención , memoria, lenguaje, praxis, gnosias, función ejecutiva, etc) del nivel de autonomía del sujeto en vida cotidiana (actividades básicas, instrumentales y avanzadas) y en ocasiones, la valoración de posibles cambios afectivos, conductuales y de personalidad secundarios a patología neurológica.

Generalidades

1. En la evaluación neuropsicológica existe una integración de los factores cuantitativos (resultados y puntuaciones en las pruebas) y los cualitativos (proceso de ejecución y conducta), para una correcta interpretación de los datos resultantes.

2. Existen variables como las demográficas ( edad, años de escolarización, nivel cultural, lengua materna, dominancia manual) , déficits sensoriales y motores, estado de salud concreto del paciente, motivación, fatiga, distractibilidad, tratamientos farmacológicos, ansiedad, depresión, falta de tolerancia a la frustración, alteración conductual pero tambien, posibles ganancias secundarias, o ambiente o contexto inadecuados, siendo factores, que pueden influir en la realización y resultados de las pruebas , debiéndose tener en cuenta.

3. Es importante disponer de buenos instrumentos de medición (sensibilidad, especificidad, fiabilidad, validez……), y datos normativos de referencia sobre los mismos que permiten una correcta comparación del rendimiento del sujeto en las pruebas, con el rendimiento de individuos de características demográficas similares.

4. Los datos de la evaluación neuropsicológica deben integrarse con los obtenidos en la historia clínica, evaluación neurológica, evaluación neuropsiquiátrica, pruebas complementarias y datos de observación de conducta; todo ello, dentro en una aproximación global y de conjunto, para llegar un diagnóstico más preciso y plantear una intervención o tratamiento posterior más adecuado.

Sus objetivos contribuyen en manera determinante a:

a) La descripción y conocimiento del estado cognitivo de un sujeto concreto, determinando la existencia o no de deterioro mental.

b) La caracterización del perfil cognitivo, diferenciando capacidades neuropsicológicas afectadas y preservadas.

c) Determinación de la intensidad o de la fase evolutiva del deterioro cognitivo.

d) Diagnóstico de síndrome y etiológico del deterioro.

e) Determinación del pronóstico cuando sea posible.

f) Planificación de una intervención medico/ terapéutica y/o rehabilitadora individualizada, de cara a optimizar la mayor independencia y calidad de vida del paciente con disfunción cerebral.

g) Evaluación de la eficacia de los tratamientos e intervenciones con fines terapéuticos (fármacos, rehabilitación, etc).

e) Análisis de cambios evolutivos en el estado cognitivo de un sujeto debidos