PROBLEMAS ALIMENTICIOS SEGÚN LOS CAMBIOS DE HUMOR EN LOS ADULTOS CON LA EDAD COMPRENDIDA ENTRE 30 A 45 AÑOS.
Enviado por klimbo3445 • 1 de Junio de 2018 • 3.523 Palabras (15 Páginas) • 500 Visitas
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Como los padres son los que llevan el dinero a la casa, compran la comida, la cocinan, etc. Hay que cuidar que no se enfermen por no comer como es debido, hay que prevenir enfermedades en Venezuela porque hay escasez de medicamentos; también hay que prevenir las faltas al trabajo o malos comportamientos por culpa de estados de ánimos como la ansiedad, rabia, estrés, etc.
Esta investigación puede beneficiar a los adultos que lleven vidas muy ajetreadas, con mucho estrés y peso sobre los hombros, personas que están tan ocupadas que no se dan el tiempo de preocuparse por sí mismos y que tiendan a comer lo primero que vean o a saciar la ansiedad con comida no saludable.
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CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
Antecedentes de la investigación
Elizabeth Martínez y Lucy Reidl (2015) realizaron un trabajo de investigación para la Universidad Nacional Autónoma de México, cuyo objetivo general fue identificar los alimentos consumidos con mayor frecuencia por estudiantes universitarios y las emociones que experimentan durante la alimentación. La investigación utilizó una metodología experimental, con una población de 819 universitarios, hombres y mujeres, con un promedio de edad de 22 años. La conclusión más importante fue que las emociones que experimentan los universitarios durante la alimentación son en su mayoría agradables (disfrute, placer, alegría, felicidad y amor).
Este trabajo de investigación tiene como objetivos la alimentación y las emociones, lo que proporciona conocimientos sobre que no solo se pueden conseguir malos cambios de ánimo sino que también atraen emociones buenas tales como el placer y alegría, esto ayuda en enfocar el trabajo de investigación en ambas caras de las emociones que son capaces de sentirse mientras los seres humanos se alimentan.
Mariana Alasino (2011) ejecutó un trabajo de investigación para la Universidad Abierta Interamericana, cuyo objetivo general fue entender la obesidad como un fenómeno social, un trastorno de la conducta alimentaria que afecta orgánicamente al individuo. La investigación empleó una metodología cualitativa-descriptiva, con una población de mujeres con las edades comprendidas entre 30 y 60 años. La deducción más importante fue que la obesidad desarrollada es originada mayormente por factores emocionales.
Este trabajo de investigación tiene como objetivo general una problemática social pero al divisar la conclusión de los resultados obtenidos, se detalla que el problema era uno emocional. Esto deja ver que hay muchas consecuencias físicas malas que se pueden contraer por alimentarse junto con emociones negativas.
Yanina Barattucci (2011) elaboró un trabajo de investigación para la Universidad Fasta, cuyo objetivo general fue indagar si existe relación entre el estrés y los patrones alimentarios. La investigación aplicó una metodología experimental-descriptiva, con una población de 120 hombres y mujeres con una edad promedio de 40 años. La conclusión más importante fue que entre el estrés y la alimentación no sólo se condiciona los hábitos alimentarios, sino también lo que hay detrás, el proceso metabólico nutricional, la situación de satisfacción de las necesidades nutricionales.
Por el trabajo de investigación de Barattucci, se puede decir que las personas en las edades cercanas a los 40 años, personas laborales; se someten a mucho estrés por los horarios y diferentes cargos de trabajo que contienen, lo que ocasiona que tengan mucha carga psicológica al momento de comer, afectando así la digestión y otros procesos importantes, esto puede ocasionar severas consecuencias con el pasar del tiempo. Es por esto que la presente investigación combina dos problemáticas como los problemas alimenticios y los cambios de humor.
Bases Teóricas
Problemas Alimenticios
Definición
Los problemas alimenticios son enfermedades que se relacionan con la alteración de los hábitos alimenticios comunes. Estas conductas pueden o no alterarse voluntariamente, esto está sujeto a factores internos y externos como el nivel de autoestima, presiones familiares, frustración por tener sobrepeso, comparación constante con alguien cercano por parte de un familiar o amigo. (Santiago Romero, 2011)
Tipos
(Constanza Cortés, 2016) Cuando existe una obsesión por comer sano, se está frente a un caso de ortorexia. Aquí, la persona lleva un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos que va a consumir. Por lo general, esto comienza cuando la persona limita mucho su alimentación, por ejemplo evitando la ingesta de carne roja, huevos, azúcares, lácteos y grasas.
En cambio, la vigorexia es un trastorno en el cual la persona se preocupa constantemente por parecer demasiado pequeña y débil. Por lo mismo, quienes sufren este problema realizan mucho deporte orientado a aumentar la masa muscular y para ello, también consumen suplementos proteicos y anabólicos.
Por lo general, las personas que tienen anorexia están obsesionadas con su físico y lo único que buscan es lucir cada vez más delgados. Por lo mismo, dejan de comer, toman remedios para inhibir el apetito o laxantes para perder más peso de lo recomendado. Aunque esta enfermedad suele asociarse a las adolescentes, cada vez es más frecuente encontrarla también en hombres y personas adultas.
Así mismo, la potomanía es una obsesión donde, de forma compulsiva, la persona desea beber agua en grandes cantidades durante todo el día. Las personas que sufren potomanía pueden consumir más de cuatro litros al día, y lo hacen con la intención de llenar su estómago y así evitar comer, por lo que también se le asocia a trastornos alimentarios como la bulimia o la anorexia.
Con respecto a la pica, se da más en niños pequeños y se manifiesta como un deseo irresistible de comer o lamer sustancias no nutritivas y poco usuales como tierra, tiza, yeso, virutas de la pintura, bicarbonato de sosa, almidón, pegamento, moho, cenizas de cigarrillo, insectos, papel o cualquier otra cosa que no tiene, al parecer, no tiene valor alimenticio.
En cuanto a la permarexia, es una obsesión donde la persona que la padece piensa que todo lo que come engorda, y esto la impulsa a realizar constantemente distintos tipos de dieta. La permarexia no es una enfermedad en
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