Dinamica de la personalidad

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El ello y el superyó deforman el pensamiento realista del yo, el superyó obliga al yo a ver las cosas como deberían ser y no como son, el ello obliga al yo a ver el mundo como el ello desea que sea. La conducta de una persona está determinada por su dinámica. Si la mayor parte de la energía está controlada por el superyó, su conducta será moralista. Si está controlada por el yo, su conducta será realista. Y si depende del ello sus acciones serán impulsivas.

Freud caracteriza el psicoanálisis como una concepción dinámica que reduce la vida mental a la interacción de fuerzas que se impulsan y controlan. Las fuerzas impulsoras son las catexias y las controladoras las contracatexias. El ello solo tiene catexias y el yo y superyó también tienen contracatexias. El concepto de contracatexia es verlo como una frustración interna donde la fuerza resistente frustra la descarga de tensión por ejemplo cuando una persona quiere hacer algo pero su yo o superyó se lo impiden, estamos frente a una frustración interna.

La oposición de una contracatexia a una catexia se llama conflicto interno o endopsíquico. Se puede clasificar en dos categorías, con conflictos del ello-yo y los conflictos del yo-superyó.

Hablando de la consciencia y el inconsciente Freud creía que la consciencia era solo una delgada corteza de la mente total y que para que la psicología pudiera llamarse ciencia, debía descubrir las causas desconocidas del comportamiento y lo inconsciente es lo desconocido. Diferencio dos cualidades del inconsciente: lo preconsciente y el inconsciente. Una idea o recuerdo preconscientes son los que se pueden hacer conscientes fácilmente porque la resistencia es débil. Y un pensamiento o recuerdo inconscientes son más difíciles de hacerse consciente porque la fuerza que se les opone es poderosa.

Freud reconoció dos grandes grupos de instintos: los que están al servicio de la vida y los que están al servicio de la muerte. La meta final de los instintos de muerte es el retorno a la constancia de la materia inorgánica, cumplen su tarea de manera invisible. Poco se sabe de ellos, excepto que es inevitable que cumplan su misión. Los instintos de vida son mejor conocidos porque sus efectos son mas manifiestos. Son los representantes mentales de todas las necesidades corporales cuya satisfacción es necesaria para sobrevivir y reproducirse. La forma de energía que utilizan recibe el nombre de libido. El yo es el agente principal en los instintos de vida sirve a estos de dos maneras. Originalmente nace para que las necesidades básicas del cuerpo alcancen su satisfacción y su otra función es que transforma a los instintos de muerte en formas que cumplen los fines de la vida por ejemplo cuando una persona se protege a si misma del daño o destrucción que pueden causarle sus enemigos. Como el yo es el agente de la vida, el superyó al tratar de destruir al yo se convierte en el agente de los instintos de la muerte.

La angustia es una experiencia emocional penosa producida por excitaciones de los órganos internos del cuerpo. Freud distinguió 3 tipos de angustia que solo difieren respecto de sus fuentes. En la angustia real el origen del peligro está en el mundo externo por ejemplo el temor a una serpiente. La angustia neurótica tiene su fuente de amenaza en una elección objetal instintiva del ello, cuando una persona tiene miedo de ser dominada por un impulso incontrolable de cometer un acto que le será perjudicial. Y en la angustia moral la fuente de amenaza es la consciencia del sistema del superyó, uno teme que la consciencia moral lo castigue por hacer algo contrario a las normas.

La única función de la angustia es actuar como una señal de peligro para el yo