Estres. En los últimos años el estrés ha sido un tema de mucha relevancia en nuestro contexto social, de interés y preocupación para varios científicos de la conducta humana; en cuanto a sus efectos los cuales inciden tanto en la salud mental, físi

...

Sin embargo el tipo de estrés dependerá de la manera en cómo se percibe o se interprete los acontecimientos; siendo de carácter subjetivo, lo que para una persona puede ser un factor estresante para otra no. Existen dosis de estrés que son necesaria biológicamente para cada individuo, con el objetivo que la persona se desempeñe de manera equilibrada y logre adaptarse a los cambios; no obstante si la dosis de estrés no es óptima, ya sea por carencia o exceso, el estrés se convierte en Distrés, exigiendo una adaptación particular del organismo por encima de las normas fisiológicas, tanto en aspecto físico, psicológico como biológico.

Cuando una persona está por debajo del umbral óptimo del estrés, el organismo se encuentra subestimado, poco solicitado física psicológica y biológicamente. Si el reposo es excesivo, se puede traducir en enojo y fatiga. Por el contrario, cuando se funciona por encima del nivel óptimo, el organismo se encuentra sobreestimulado, agotado por cansancio.

- Fases del estrés

Habitualmente, el estrés no ocurre de manera imprevista o repentina, el organismo tiene la capacidad para detectas las señales de que se está ante un evento estresor. Hans Selye en 1975, estas reacciones se manifiestan en 3 fases: la fase de alarma, la fase de resistencia y la fase de agotamiento.

La fase de alarma conforma la primera fase del proceso de estrés, forma el aviso de que hay un agente estresante. La reacciones fisiológicas como respiración entrecortada y acelerada, aumento de ritmo cariaco, aumento de presión arterial, angustia, sensación de tener un nudo en la garganta, aparecen siendo estas las primeras en surgir, para advertir a la persona que debe ponerse en estado de alerta una vez perciba la situación.

La resistencia es la segunda fase, cuando el estado de agresión se prolonga, las reacciones de adaptación provocan que se inicie un proceso de resistencia a dicho estado. En esta fase la persona se mantiene, mientras dura la estimulación, en continuo estado de activación y a pesar de que aparecen los primeros síntomas de cansancio el organismo sigue respondiendo bien. A lo largo de esta etapa, las personas afectadas adoptan conductas diferentes: algunos se preparan para afrontar el estrés, otros siguen viviendo sin preocuparse por solucionar su estado o tratando de evitar situaciones que puedan activarlo.

Por último se encuentra la fase de agotamiento, cuando se presenta un cuadro constante y severo de estrés, el organismo pierde su capacidad de respuesta y se agota. Esta se caracteriza por la fatiga, la ansiedad y la depresión, las cuales pueden aparecer por separado o simultáneamente.

El estado de estrés es tan intenso que la persona afectada ya no puede afrontar las agresiones. El organismo se colapsa y ya no puede defenderse de las situaciones de agresión. Las reservas psíquicas y biológicas se agotan. Durante esta fase, es probable que la persona afectada desarrolle algunas patologías que provoquen que el organismo pierda su capacidad de activación.

- Casusas

Actualmente los factores estresantes predominantes son de índole más mental o emocional, en muchos casos asociados a problemas familiares y/o laborales.

Casusas fisiológicas: Estas causas están relacionadas con las enfermedades y lesiones del cuerpo que aumentan la tensión interior de la persona produciendo un nivel de estrés que se vuelve contraproducente hacia uno mismo.

Casusas psicológicas: Se relaciona con la vulnerabilidad emocional y cognitiva. Crisis vitales por determinados cambios: infancia, adolescencia, madurez, vejez. Relaciones interpersonales conflictivas o insuficientes. Condiciones frustrantes de trabajo o estudio: excesiva exigencia o competitividad, monotonía, normas incongruentes, insatisfacción vocacional. Etc

Casusas sociales: Cambios sociales en los que cada época trae nuevos retos a afrontar. Cambios tecnológicos acelerados que la persona no puede integrar, etc.

Casusas ambientales: contaminación ambiental, alimentación desnaturalizada con tóxicos industriales, lugares de trabajo con poca seguridad o con carga electrostática, microorganismos patógenos, catástrofes.

Muchas situaciones diferentes pueden causar estrés, por ejemplo:

- Sentirse solo y aislado.

- Tener que hacer algo para lo que no estás bien preparado, como exponer un trabajo en clase

- Tener relaciones sexuales sin protección.--Evitar escoger las soluciones que más te convienen para solventar tus problemas.

- Algún cambio inesperado en tu vida o en las circunstancias de la familia.

- Sentirte presionado para mantener relaciones sexuales cuando no quieres tenerlas.

- Marcarse metas demasiado altas o bajas para uno mismo.

- No tener suficiente apoyo de tu familia y tus amigos.

- Estar sobreestimulado o muy aburrido.

- Tipos de estrés

El manejo del estrés puede resultar complicado y confuso porque existen diferentes tipos de estrés: estrés agudo, estrés agudo episódico y estrés crónico. Cada uno cuenta con sus propias características, síntomas, duración y enfoques de tratamiento.

Estrés agudo

Es la forma de estrés más común, nace de las exigencias y presiones del pasado reciente y las anticipadas del futuro cercano. Exagerar con el estrés a corto plazo puede derivar en agonía psicológica, dolores de cabeza tensiónales, malestar estomacal y otros síntomas.

Dado que es a corto plazo, el estrés agudo no tiene tiempo suficiente para causar los daños importantes asociados con el estrés a largo plazo.

Estrés agudo episódico

Surge cuando se experimentan episodios de estrés agudo con mucha frecuencia. Suele darse en personas con gran cantidad de responsabilidades o cargas que no puede hacer frente a tal cantidad de exigencias y generalmente, responden con irritabilidad, ansiedad o de forma muy emocional y descontrolada. Suelen ser personas muy nerviosas que siempre están apuradas y en tensión, que experimentan como síntomas fuertes dolores de cabeza, migrañas, dolores de pecho, hipertensión o incluso enfermedades cardiacas.

Estas personas pueden ser sumamente resistentes al