La Instancia de la letra Lacan.

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Lo que critica Lacan es que no hay una relación significante-significado estabilizada, ya dada. Destaca la posibilidad de decir entre líneas la verdad. A la metonimia le cabe esta posibilidad de decir entre líneas la verdad.

Destaca la conexión palabra a palabra, el deslizamiento propio del eje sintagmático para la metonimia y la sustitución de una palabra por otra, el eje paradigmático, la condensación, para la metáfora.

En la metáfora aparece la chispa creadora que “brota” entre dos significantes de los cuales uno ha sustituido al otro tomando su lugar en la cadena significante, mientras el significante oculto sigue presente por su conexión metonímica con el resto de la cadena”.

Con respecto a la metáfora Lacan dirá que hay que estar inmerso en el poema para que la chispa creadora produzca en nosotros ese efecto. Esto en referencia a “Su gavilla no era avara ni tenía odio..”

La metáfora se coloca en el punto preciso donde el sentido se produce en el sinsentido. Pero a la vez con ese sinsentido logramos un efecto de sentido, un plus de sentido, que no estaría presente sin el deslizamiento metonímico. Es por esto que Lacan se refiere para la metáfora a un "pas de sens", “paso de sentido” a través del sinsentido. El acento no está en el sentido de lo que se dice sino en el “paso de sentido”, es decir en el hecho de que pasa un mensaje, lo importante es hacer pasar una palabra entre el sujeto y el Otro. Lo esencial en esa relación es la alteridad del Otro, porque es sostén del ser del sujeto.

La metonimia es un "peu de sens", un “poco de sentido”, un menos de sentido.

Está claro que tanto la metáfora, como la metonimia producen sentido, una más, la otra menos.

La conexión del significante con el significante posibilita la elisión que instala la carencia de ser, la falta en ser, es decir el deseo. La conexión de los significantes da lugar a una carencia de ser. Podemos decirlo al revés la carencia de ser, la falta en ser, el deseo es consecuencia de la conexión de los significantes. Dicho de otro modo, la conexión de los significantes provoca una falta, una carencia en la relación de objeto. La relación con el objeto queda desnaturalizada por la acción del significante y el sujeto mismo se desliza de un significante a otro.

Lacan dirá que si se desconoce la excentricidad radical con la que se enfrenta el hombre se fallará en cuanto al orden y las vías de la mediación psicoanalítica.