LA COMUNIÓN EN LA IGLESIA.

...

Usted quiere que los demás lo aprecien:

William James ha dicho: "el principio más arraigado en la naturaleza humana es el deseo ardiente de ser reconocido por los demás".

Se trata de personas que necesitan reconocimiento, trate a los demás como usted desea ser tratado por ellos. Tratarlos como si fueran importantes; ellos reaccionarán según la forma en que usted los percibe, la mayoría pensamos cosas maravillosas acerca de las demás personas, pero nunca lo llega a saber.

Usted quiere que los demás lo perdonen:

Saber perdonar constituye el ingrediente básico y necesario para una relación sólida, el perdón nos permite interactuar positivamente con otras personas, es una de las características más distintivas en el cristiano. Las personas a quienes les resulta difícil perdonar no se ven a sí mismas de manera realista, son o bien sumamente arrogantes o tremendamente inseguras, una persona con esas características y que lleva la cuenta en sus relaciones, se siente presionada emocional y en ocasiones también físicamente por lo tanto, el perdón debe concederse tan rápido y totalmente como sea posible.

Usted quiere que los demás lo escuchen:

Escuchar significa querer oír, es un hábito que ayuda a ser capaces de recibir la información que necesita, y las demás personas se sentirán satisfechos de tener a alguien para compartir sus inquietudes y así llegar a tener la respuesta adecuadas para la solución de sus problemas o simplemente decir tengo una persona que me escucha.

Usted quiere que los demás lo comprendan:

La comunicación es fundamental para la comprensión. En la vida, usted siempre deberá a las personas o bien como adversarios o como aliados, si se trata de adversarios estará todo el tiempo luchando contra ellas y tratando de defender su posición. En cambio si la persona son sus aliados cada uno entregara lo mejor de sí.

Usted quiere que los demás sean sensibles:

Es evidente que la comunión permite a las personas un importante instrumento de gran valor como lo es la sensibilidad. Las personas sensibles observan la reacción de otros. Esto va mucho más allá del simple escuchar palabras habladas, sino a través de la atención al problema de la persona y a la ayuda brindada colocándose en su lugar implicando, conocerlo, caminar donde él camina, interesarse en él como persona logrando resultados compensatorios. Para esto debe ejecutar los siguientes pasos:

- escuchar a la persona para conocer su posición.

- Ayudar a la persona a sentirse cómoda.

- Demostrar el deseo de escuchar.

- Evitar distracciones.

- Enfatizar.

- Paciencia.

- Evitar emociones negativas.

- Ofrecer consejo cuando se lo pida, entre otros.

UNIDAD ENTRE LOS HERMANOS

La unidad no es suficiente, Jesús oró por la unidad basada, no en la opinión como humano, sino en la voluntad de Dios, la cual está revelada en la palabra de verdad puesto que la palabra de Dios es la base de la unidad, por medio de esta palabra podemos ver cómo la iglesia del Señor durante el primer siglo era unida entonces, nosotros podemos agradar a Dios de la misma manera en que los cristianos del primer siglo le agradar. La Iglesia está llamada a tener comunión con Dios; Dios es el padre, Cristo es el hijo el primogénito de la familia, y todos los miembros de la Iglesia son hijos de Dios y hermanos del señor Jesucristo. En verdad, Dios tuvo un buen propósito al establecer la Iglesia como una familia de comunión.

La intención de Dios es que experimentemos la vida juntos. En la Biblia se conoce como vivir en comunión, la verdadera comunión está en experimentar la vida unidos, consiste en armar desinteresadamente, compartir con corazón sincero, servir en la práctica, consolar y solidarizarse con los que sufren. Estas actividades sostienen la verdadera comunión y debería estar siempre presente entre los cristianos. El amor verdadero es algo que fluye de manera natural debido a la relación que las personas tienen con Dios, una relación que afecta a todas las demás relaciones en la vida.

TIPOS DE COMUNIÓN

Debe existir comunión individual

(Es decir que una persona debe estar en paz consigo mismo), antes de que pueda haber unidad en la Iglesia.

Comunión con Dios

Debe existir en el creyente una vida emocional diaria ya que de allí depende de tener una buena comunión con los demás.

Comunión con la Iglesia

El creyente debe saber que es parte de la Iglesia y tiene deberes y derechos dentro de ella, por lo tanto debe integrarse a la unidad de su cuerpo ya que todos hemos sido llamados por el mismo sendero y en la misma dirección, por lo tanto hay que permanecer juntos, tanto externa como internamente.

Comunión unos con otros

Un escritor interpretó el pasaje del libro de precios donde Pablo habla "soportarnos los unos a los otros en amor", esta es una clave para desarrollar la común

Comunión practicada

Ésta no se alcanza escondiendo nuestras diferencias, sino al tratar de manejar las en forma abierta con la misericordia de Cristo lograremos la verdadera comunión cuando los creyentes trabajen juntos en armonía. Esto se logra cuando Dios nos tome como individuos y nos mondé para alcanzar una meta común. Cristo estableció la regla perfecta para establecer relaciones ganas de calidad cuando dijo "así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también hace vosotros con ellos (Mateo 7:12)". Cristo nos enseñó dos cosas acerca del desarrollo de las relaciones con los demás, necesitamos decidir cómo queremos que nos trate; luego debemos comenzar a tratar a los demás de esa manera.

Factores negativos de la comunión

Cierta relación de se describen como incompatibles con la comunión cristiana.

- Un cristiano